(=) ISBN 978-980-227-250-1

2015
Hoy Nicolás Maduro plasmaba la otra firma, no para un
referendo, sino para una exigencia de respeto a la soberanía
nacional; pero aquel texto de Chávez cobraba
vigencia de presente.
“Y a partir de mañana, a las 11:00... ¡a recoger firmas en todas las plazas Bolívar de Venezuela! Los
invito a estampar sus firmas por la Patria, por Venezuela, se los pido de corazón: ¡unidad nacional para
vencer!”.
19 de marzo. La convocatoria del presidente Nicolás
Maduro ha surtido efecto: las plazas Bolívar del
país han amanecido abarrotadas de gente que quiere
plasmar su firma en el cuadernillo “Obama deroga el
decreto ya”. Es un inicio exitoso que demuestra el altísimo
nivel de conciencia popular.
Los diputados opositores Ricardo Sánchez y Carlos
Vargas anuncian su decisión de establecer un “frente
común” con el Gobierno para “la defensa de la nación”
ante la injerencia de Estados Unidos.
En el acto de lanzamiento de la campaña, en la plaza
Bolívar de Caracas, los parlamentarios recibieron sus
cuadernillos y se sumaron a la recolección de los 10
millones de firmas contra el decreto ejecutivo del presidente
de EE. UU., Barack Obama.
El alcalde del municipio Libertador, Jorge Rodríguez, informa
que hasta la 1:00 de la tarde, vía redes sociales,
Venezuela recibió 1.377.595 mensajes de 97 países, que
expresaron su solidaridad y la exigencia de derogación
del “Decreto Obama”. Comentó que el país que más
mensajes envió fue Estados Unidos, en segundo lugar
Canadá, seguido de Ecuador, Chile, Argentina y México.
La canciller está en la sede de la Organización de Estados
Americanos (OEA) explicando el contenido y
alcance real de la Orden Ejecutiva del 9 de marzo, una
acción violatoria también de la Carta de las Naciones
Unidas y de la Carta de la OEA.
Estados Unidos con su proceder lo desconoce todo en
Venezuela, no sólo al Gobierno sino también a sus instituciones.
Rodríguez anuncia que desconoce la legalidad
internacional del decreto, el cual está apartado del
sistema jurídico de Venezuela y denuncia que con este
decreto se busca una intervención militar y ponerle
mano a la mayor empresa petrolera, como lo es Pdvsa.
El representante de Estados Unidos ante la OEA, Michael
Fitzpatrick, alega que su país no planifica una invasión
contra Venezuela, pero que se reserva la potestad
de decidir quién puede o no invertir o tener dinero en
su territorio. En su criterio, la decisión del mandatario
Barack Obama ha sido malinterpretada. Fitzpatrick dijo:
“Estados Unidos no creó los problemas que hoy enfrenta
Venezuela y nosotros no podemos resolverlos”.
Comenzando la tarde, el presidente bolivariano Nicolás
Maduro acude al Paseo Los Próceres de Caracas, en el
marco de la Misión Transporte (creada el 27 de marzo
de 2014), para dar inicio al programa de financiamiento
masivo de unidades para el 2015. Comenta que en lo
que va del primer día de la jornada de recolección de
firmas contra el decreto imperial, los informes que le
llegan minuto a minuto son muy positivos.
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#ObamaDerogaElDecretoYa