Revista Móvil #11

ADN 208
mito
regenerando UN
POR
hernando
calaza
El Peugeot 207 no parece haber heredado la
magia de sus antecesores. por eso, con el
lanzamiento del 208, la marca habla de Re-
Generación, apuntando a las joyas de la familia
en el segmento de autos pequeños, especialmente
205 y 206.
Contar
la historia de una marca en la era de Google
y Wikipedia puede parecer innecesario.
Sin embargo, no hay enciclopedia digital que pueda transmitir
la emotividad de una historia: carecen de dramas, clímax y
sentimientos. Por fortuna, Móvil existe para rescatar ese costado
emotivo del mundo del automóvil.
El wiki-saber nos dice que Peugeot es una de las marcas
de autos más viejas, incluso que nació como empresa mucho
antes de la invención del automóvil, cuando producía pimenteros
y luego también bicicletas. Luego, en 1889 tomaría un
nuevo rumbo subiéndose a la aventura de las cuatro ruedas y
creando “la que es hoy en día la segunda marca de automóviles
con más tradición del mundo”. No es poca cosa.
Por estos pagos, todos tenemos bien presentes los clásicos
de la marca, al menos los más modernos, y la gran mayoría
lleva un 4 o un 5 delante del 0 y algún otro número detrás de él.
Incluso en la Argentina, decir 403, 404, 504 y 505 es hablar de
clásicos. Pero si hay una serie importante en el mundo del león
encabritado es la 200, la encargada de hacer realmente masiva
a Peugeot, al punto de haberla salvado de un destino incierto a
comienzos de los años 80.
Al comenzar nuestro recorrido, tenemos los 201, 202,
203 y 204, los cuales fueron todos grandes autos, pero poco
tienen en común con nuestro actual 208. Recién en 1972, la
historia comienza a torcerse hacia lo que podríamos llamar un
hatchback compacto: el 104. Así es, el antecesor de los gloriosos
205 y 206 no es un serie 200, sino el primer serie 100 de la
historia de Peugeot.