TAST MARÇ-ABRIL 2017

escuela 3-6
Escenarios de juego
162 in-fan-cia
«Jugar es como soñar
con todo el cuerpo.»
DUMAHEL
Cada semana presentamos
un proyecto de juego diferente, a veces
surgen dos. Depende siempre de lo que esté
ocurriendo en la escuela.
El escenario de juego se presenta como una
sorpresa, como algo extraordinario que ha sucedido,
que disfrutarán todos los niños y las niñas
que lo deseen, desde las clases de dos años hasta
las de cinco y seis años, e incluso en ocasiones
invitamos a los niños de primaria. Las compañeras
decimos cuál es el momento más adecuado,
ya que no establecemos calendarios rígidos,
sino que este espacio común lo utilizamos
para disfrute de todos, pequeños y mayores.
La duración de la propuesta es efímera: desaparece
cuando pasan todos los niños y las
Si sabemos que el juego desarrolla el pensamiento,
la creatividad y la imaginación, ¿por
qué no está más presente en nuestras clases?
En «el piso de abajo» de esta escuela de
Cantabria se ofrece un lugar para divertirse,
donde pasar el tiempo, sin retos, con placer.
niñas. La sesión nunca
es igual, la instalación
se va transformando,
cada grupo disfruta de
una forma diferente.
Al final de la sesión los propios niños reorganizan
el espacio y se lo regalan a los compañeros
que jugarán después, de una forma especial:
es «su sorpresa».
Los materiales de juego son sencillos,
desestructurados
Conociendo cómo el juego permite el aprendizaje,
diseñamos espacios de juego en los que ofrecemos
materiales (normalmente una tríada de
objetos) que favorecen el juego. Dependiendo
de la naturaleza de los materiales se desarrollarán
estilos diferentes, de exploración, de relación…
Cuando hacemos propuestas de juego,
intentamos seleccionar aquellos materiales
M. Paloma García González
que nos permitan estimular el desarrollo intelectual
del niño, porque intuimos que el niño
tendrá que hacer juicios sobre su propio
conocimiento al solucionar los problemas que
van surgiendo durante el desarrollo de la actividad.
Cuando escogemos los distintos objetos de
la instalación prevemos que aparecerán juegos
presimbólicos como jugar a destruir (la
destrucción no implica romper, sino transformar
y reorganizar el orden para crear un
proyecto de juego propio); juegos de placer
sensoriomotor como girar, balancear, saltar,
correr…; jugar a envolverse, taparse, adoptar
posiciones fetales de descanso, hacer «el
ángel», parecer «el muerto o el dormido»;
jugar a esconderse o a desaparecer; jugar a ser
perseguido, perseguir; jugar a llenar, vaciar,
reunir, apilar, trasladar, amontonar, colar,
seleccionar.
marzo abril 2017
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