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tas en las paredes de los Altos de Cazucá que dicen:
“acuesten a dormir a sus hijos temprano o nosotros
los pondremos a dormir”.
Los sábados a mediodía cuando la calle principal
del barrio de La Isla está llena de niños jugando,
hombres conversando y mujeres haciendo la compra
semanal de verduras y arroz, una veintena de jóvenes
afro-colombianos se reúnen frente a la gran casa
cultural de color verde que una organización para
afro-colombianos desplazados construyó con una
donación. (1)
(1) Extracto de LA JUVENTUD DENTRO DEL CONFLICTO URBANO.
Violencia, control social e iniciativa cultural en los Altos de
Cazucá. Por Kirstina Westh Jensen. Publicado por www.pcslatin.org
79
Ann Lislegaard
En realidad, el olor es una parte muy interesante de
nuestro entendimiento cognitivo y perceptivo de la
vida. Es maravilloso como un olor puede elevar nuestros
sentidos de una experiencia a otra.
Yo también solía tener un muy buen sentido del
olfato. Hace unos años padecí un severo resfriado
y desde entonces, desafortunadamente, mi sentido
del olfato no ha vuelto a ser el mismo. No obstante,
seguiría diciendo que “Out of Scene” me recuerda
el olor del soplo de una lluvia de invierno temprano,
una lluvia que enrojece la nariz y hace que uno pase
de la sensación de la temperatura húmeda del propio
cuerpo al aire húmedo de una ciudad sin polvo; es
también el olor que contiene el acero y se hace eco
de las hojas mojadas y amarillentas caídas de los
árboles en otoño. El olor se mueve con el drama de
una tempestad de lluvia, fresca, intensa y prometedora,
sin embargo es un olor que lleva el recuerdo del
tiempo que va transcurriendo.
80
Roland Fischer
El olor tiene algo que ver con lo que permanece invisible
en la superficie. Posiblemente cuenta la verdad
sobre las cosas modernas (aquellas que simulan el
brillante acabado de la perfección), y que también
pueden ser usadas como un arma de manipulación.
En el mundo, de acuerdo con nuestra cultura urbana,
el azul intenso rima con los olores del cloro. La piel de
acero y cristal que protege los edificios de las megalópolis
se han convertido en un campo de batalla donde
tiene lugar la lucha entre el exterior y el interior, entre
el deseo de la apariencia y los efectos de lo inevitable.
Calidad de aire: la fachada actúa como un área
de unión. Por un lado, este pequeño mundo interior
que protege, con su aire acondicionado en todas las
plantas y su llamada atmósfera esterilizada; por otra
parte, la calle, un caos de fenómenos olfativos más o
menos indeseables.
Pronto observaremos lo que sigue: el lavado puede
ser tan intenso como sea posible, el olor es persistente
y vuelve al ataque, una y otra vez.
81
Marlon de Azambuja
La primera vez que escuche hablar de colección olor-
VISUAL me despertó mucha curiosidad, en parte por
tratarse de una muy particular pauta para conducir
una colección pero también porque me habían comentado
que la idea de olor presente en las obras no
era nada evidente y que partían de la especial relación
que Ernesto, coleccionista, tiene con este sentido
dado a su profesión de perfumista.
Cuando empecé a buscar modelos de arquitecturas
distintas para ampliar la serie de pinturas negras que
venia haciendo de los museos se presento la oportunidad
de conocer una preciosa Masía Catalana.
Es cierto que el impulso que me llevó a realizar este
trabajo esta muy vinculado a su situación constructiva,
no solo de su modelo histórico pero también por
su perspectiva tan particular, así como por el dialogo
entre la inteligencia racional de las líneas arquitectónicas
en contraste al orden orgánico de la naturaleza.
Pero durante el proceso de pintura del trabajo, no he
podido dejar de pensar en cual serian los vínculos
olorosos que uno entablaría con la obra: ¿seria la
materia negra y brillante que cubre casi toda la obra?
¿Serian esos pequeños hilos de fotografía que conforman
el dibujo de la casa y sus jardines? O incluso,
¿será que se tratando de una obra que busca en
cierta medida la esencia de la imagen representada,
nos podemos poner a pensar en un olor primitivo que
rescate las experiencias vividas en este espacio?
Creo que a esas preguntas cabe solamente al espectador
responderlas.
82
Irene van de Mheen
Sobre el olor
Me acuerdo del olor de Barcelona de cuando llegué
por primera vez, hace más de diez años. Un olor que
siempre identifico como suya, de esta ciudad.
Es una mezcla de olores, olores a cigarrillos, perfumes,
humedad, historia, sudor, coches, ambientadores
de tiendas y cafés, el metro, más cigarrillos,
perfumes, coches, sudor, en suma el olor a cuidad, a
Barcelona, cuidad entonces desconocida para mí. Un
olor se huele sobre todo cuando has estado un tiempo
alejado, sin olerlo; como describirlo ahora que
no puedo olerlo ya que llevo años viviendo aquí, rodeado
de él ya no eres consciente, empieza a formar
parte de ti y no lo puedes distinguir. Pero cada vez
que vuelves después de haber estado en otro lugar,
lo hueles. Es un instante solamente, es imposible retener
el olor y la sensación que da, se esfuma, va y
viene en círculos concéntricos, en líneas onduladas,
fragmentos que recuerdan a otros fragmentos que te
llevan de una asociación a otra, una asociación que
puede ser el principio de un dibujo, una fotografía…
83
Rodrigo Gonzalo
El fuerte aroma del segundo piso hizo moverme. Según
subía la vieja escalera se iba haciendo cada vez
mas intenso. Un olor dulce, embriagador, penetrante,
lo impregnaba todo. Detrás de una de las puertas
rojas encontré el mostrador blanco, herido por el matiz
de los pétalos de rosa triturados. La sequedad del
ambiente y el frío invernal se oponían a la frescura de
su perfume; abrí la ventana y respire profundamente,
mientras los copos de nieve caían lentos del cielo.
84
Rosa Muñoz
Mirando el mar
Esta fotografía forma parte de una serie con la que
quise significar una época de mi vida. El cuadro del
mar en las paredes del salón de la casa de mis abuelos
es todo un icono de esos tiempos; al contemplarlo,
aún percibo en mi piel cierto frescor de brisa,
cierto regusto amargo de inocencia perdida. Aquel
sabor a sal, aquel perfume que me lleva hacia ti, a la
nostalgia de tu cuerpo invadido de mares.
El olor es también una emoción y la emoción un
sabor. Olores y sabores que fijan el recuerdo y dan
identidad a la mirada.
85
Loan Nguyen
Realicé esta imagen del telón verde en unas circunstancias
especiales: un arquitecto me había pedido
que creara una serie de fotografías en una escuela
que acababa de construir. Tenía las llaves de la escuela
y así podía ir durante el fin de semana, cuando
el edificio estaba tranquilo y vacío. Un día, visité
el aula de música y enseguida me impresionó este
gran telón verde, por su tamaño imponente, por su
color. Me vinieron ganas de crear una imagen un
poco misteriosa: en ella, una persona pasa la cabeza
a través del telón y se ve solamente su cuerpo, inclinado
hacia delante, como atraído, imantado por lo
que el espectador no puede ver. ¿Qué hay detrás de
esta cortina? ¿Una criatura monstruosa? ¿Un paisaje
fantástico? ¿Un olor cargante? No voy a responder a
esta pregunta; dejaré que cada cual se invente sus
propios escenarios, sus propios sueños, sus propias
sensaciones.
86
Humberto Rivas
Estando en Galicia pasé con el coche frente a esta
imagen, detuve el coche y andando fui a pararme
frente a esta casa. Quedé profundamente impresionado
por cómo la naturaleza se apoderaba del edificio
mostrando el pasado y el presente, con una clara
alusión a la muerte, y el fuerte olor de las plantas vivas
que invadían la imagen fotográfica que yo sentía
y que no era la que tenía delante.
Debido a la luz, me marché y volví al día siguiente
al atardecer. Cuando la luz era la que yo quería para
crear plásticamente y expresivamente lo que la foto
expresaba.
87
Helle Jetzig
Buscaba en mis sueños rotos
Verde, cadmio, azul y plata,
Buscaba en sueños que saben
A rosa y a miel de escarcha.
Entre los mil colores
De los neones prendidos
Y adormecidos sabores
En los Fast-food escondidos
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