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“En este mundo de belleza singular y<br />
esencialmente marítimo, grupos de cazadoresrecolectores<br />
deambulaban en canoas por un<br />
laberinto de canales en busca de comida,<br />
básicamente compuesta de lobos marinos<br />
(Otaria flavescens), aves, peces y mariscos.<br />
También cazaban huemules.” (Explora, 2009).<br />
PUEBLOS ORIGINARIOS DE LA REGIÓN DE AYSÉN<br />
De acuerdo con las más recientes investigaciones arqueológicas, la<br />
presencia humana en los archipiélagos del litoral de Aysén se remonta<br />
a los 3.000 años antes del presente (Reyes et al, 2014). Las evidencias<br />
sugieren un modo de vida cazador recolector marítimo que persistió<br />
hasta el siglo XX, del cual es posible hoy reconocer huellas en el modo<br />
de vida de las comunidades isleñas de dicho territorio (Saavedra, 2007).<br />
En el siglo XVI, los primeros exploradores europeos tuvieron contacto<br />
con los grupos de cazadores recolectores dispersos a lo largo de<br />
los archipiélagos. A los que ocupaban el espacio al norte del golfo de<br />
Penas, se los denominó Chonos, mientras que a los que ocupaban el<br />
territorio al sur de este golfo y oeste del gran Campo de Hielo Sur, se<br />
los conoció como Kawésqar o Alacalufes.<br />
Con una organización social sencilla y una cosmovisión compleja -a<br />
juzgar por lo que se ha podido conocer entre los Kawésqar-, subsistieron<br />
en un ambiente que hoy nos parece de extrema rudeza. Sin embargo<br />
el contacto con el mundo occidental alteró radicalmente su estilo de<br />
vida, llevándolos a la extinción.<br />
Los Chonos habrían desaparecido en el siglo XVIII, posiblemente<br />
en un proceso de mestizaje con la población chilota que incursionaba<br />
en los canales, pero también a causa de enfermedades occidentales,<br />
esclavismo y migración forzada o voluntaria. Actualmente sólo quedan<br />
mudos vestigios de su cultura en las cuevas donde depositaban sus<br />
muertos, en los conchales de sus ocasionales lugares de residencia y<br />
en la ininteligible toponimia de este «pueblo misterioso».<br />
Los Kawésqar, por su lado, subsistieron como pueblo independiente<br />
hasta principios del siglo XX, entablando esporádicos contactos con<br />
misioneros jesuitas y navegantes ingleses y franceses. El establecimiento<br />
de rutas regulares entre Punta Arenas y el centro de Chile, junto con<br />
la llegada de loberos chilotes a la zona, fueron cambiando completamente<br />
su estilo de vida. Hoy día existe una reducida población que se<br />
autoreconoce Kawésqar en la localidad de Puerto <strong>Ed</strong>én.<br />
Recientemente fueron halladas pinturas rupestres en un sitio costero<br />
en las cercanías de la localidad de Chaitén, región de Los Lagos,<br />
lo que abre nuevas perspectivas respecto a esta expresión cultural en<br />
los archipiélagos ayseninos, pues ya se conocían pinturas rupestres en<br />
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