09.05.2013 Views

la buena predicación gleen conjurske - Centro de Avivamiento ...

la buena predicación gleen conjurske - Centro de Avivamiento ...

la buena predicación gleen conjurske - Centro de Avivamiento ...

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

sentada con ambas manos ja<strong>la</strong>ndose fuertemente los cabellos, c<strong>la</strong>mando, ‘¡Señor, ten misericordia <strong>de</strong> mí!<br />

¡Sálvame, Señor, o moriré! ¡Iré al infierno!’ ”. (**).<br />

Pero ahora generaciones completas viven y mueren sin jamás haber visto tales cosas.<br />

Pero a<strong>de</strong>más, <strong>la</strong> <strong>buena</strong> <strong>predicación</strong> convierte a <strong>la</strong>s gentes. Las mueve a no so<strong>la</strong>mente confesar sus pecados,<br />

sino a abandonarlos. Las mueve a abandonar al mundo y rendirse a Dios, y a unirse a Su pueblo. La<br />

Escritura nos dice,<br />

_____________________________________________________________<br />

(*) “The Life of Freeborn Garrettson”, por Bangs, Pag. 74<br />

(**) “Experience and Gospel Labors of Benjamin Abbott, recopi<strong>la</strong>das por John Firth; Nueva York: Carlton<br />

& Phillips, 1856, Pag. 46<br />

“…el Señor añadía cada día a <strong>la</strong> iglesia los que habían <strong>de</strong> ser salvos” (Hechos 2:47). William Bramwell<br />

escribió, “Hemos tenido tiempos <strong>de</strong> bendición, y diariamente algunos han sido salvos” (*) Y esto era<br />

realmente cierto, bajo el ministerio <strong>de</strong> muchos <strong>de</strong> <strong>la</strong> c<strong>la</strong>se a <strong>la</strong> que pertenecía Bramwell, el más fructífero <strong>de</strong><br />

todos los primeros predicadores Metodistas.<br />

Observamos que en <strong>la</strong> Escritura mencionada dice que estos convertidos se añadían a <strong>la</strong> iglesia. Esto es, no<br />

eran <strong>de</strong> los que hab<strong>la</strong>n por hab<strong>la</strong>r, basados en un evangelio fácil y afeminado que <strong>de</strong>spués no se volvía a<br />

saber u oír <strong>de</strong> ellos. Los convertidos verda<strong>de</strong>ros son añadidos a <strong>la</strong> iglesia. Las iglesias apostólicas<br />

“…aumentaban en número cada día”. (Hechos 16:5). Pero <strong>la</strong>s iglesias <strong>de</strong> hoy en día han caído tan por<br />

<strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> este estándar, que han cesado ya hace tiempo tan siquiera <strong>de</strong> esperar o soñar en tal cosa. Y aún<br />

así, nada menos que esto, es el estándar <strong>de</strong> <strong>la</strong> Pa<strong>la</strong>bra <strong>de</strong> Dios, y nada menos <strong>de</strong>bería satisfacernos. La<br />

<strong>buena</strong> <strong>predicación</strong> producirá convertidos reales, y <strong>de</strong> este modo aumentarán en número <strong>la</strong>s iglesias. No hay<br />

mejor prueba que esta para <strong>de</strong>terminar <strong>la</strong> <strong>buena</strong> <strong>predicación</strong>.<br />

Debemos insistir ahora que cuando un convertido se “aña<strong>de</strong> a <strong>la</strong> iglesia” no significa que simplemente su<br />

nombre va a ser agregado a <strong>la</strong> lista <strong>de</strong> miembros. Existen muchas gran<strong>de</strong>s iglesias que se jactan <strong>de</strong> gran<strong>de</strong>s<br />

membresías y también presumen que cuentan con un gran número <strong>de</strong> convertidos. Pero cuando<br />

examinamos los registros reales <strong>de</strong> estas iglesias, <strong>de</strong>bemos <strong>de</strong>cir, que hay razón para sentir vergüenza y no<br />

orgullo. En primer lugar, <strong>de</strong> los miles o <strong>de</strong>cenas <strong>de</strong> miles <strong>de</strong> convertidos que aseguran cada año, so<strong>la</strong>mente<br />

unos cuantos se bautizan o se aña<strong>de</strong>n a <strong>la</strong> lista <strong>de</strong> miembros. Esto es bastante malo, pero lo peor es que<br />

entre aquellos cuyos nombres se aña<strong>de</strong>n a <strong>la</strong> lista <strong>de</strong> miembros, hay miles y <strong>de</strong>cenas <strong>de</strong> miles que ni siquiera<br />

asisten a <strong>la</strong>s reuniones <strong>de</strong> los domingos. La iglesia más gran<strong>de</strong> que se jacta <strong>de</strong> una membresía <strong>de</strong> 67,000,<br />

tiene un promedio <strong>de</strong> asistencia <strong>de</strong> so<strong>la</strong>mente 18,000. Ahora, el hecho simple es que hay miles <strong>de</strong> estos<br />

miembros que no se aña<strong>de</strong>n <strong>de</strong> ninguna manera a <strong>la</strong> iglesia. Se aña<strong>de</strong> únicamente su nombre pero no<br />

efectivamente. No son “…como piedras vivas…”. Ellos no son piedras vivas. No están convertidos. No<br />

son salvos. El Señor aña<strong>de</strong> a Su iglesia a aquellos que son salvos.<br />

_____________________________________________________________<br />

(*) “Memoir of the Life and Ministry of William Bramwell”, por James Sigston; Nueva York: Phillips &<br />

Hunt, n.d. Pag. 148<br />

Finalmente, <strong>la</strong> <strong>buena</strong> <strong>predicación</strong> edifica a <strong>la</strong> iglesia. Este es el negocio <strong>de</strong> todos los predicadores,<br />

incluyendo los evangelistas. Ya que <strong>la</strong> Escritura dice, “Y Él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros<br />

profetas; a otros, evangelistas; a otros, pastores y maestros, a fin <strong>de</strong> perfeccionar a los santos para <strong>la</strong> obra<br />

<strong>de</strong>l ministerio, para <strong>la</strong> edificación <strong>de</strong>l cuerpo <strong>de</strong> Cristo”. (Efesios 4:11-12). Los santos <strong>de</strong>ben edificarse<br />

para que se comprometan en <strong>la</strong> obra <strong>de</strong>l ministerio. La edificación los hace ganadores <strong>de</strong> almas. Hechos<br />

9:31 nos dice “…y eran edificadas, andando en el temor <strong>de</strong>l Señor y se acrecentaban fortalecidas por el<br />

Espíritu Santo”. La multiplicación sigue a <strong>la</strong> edificación. Así, llegamos otra vez al hecho que el resultado<br />

30

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!