13.05.2013 Views

Textos Teatrales - Casa del Teatro de Medellín

Textos Teatrales - Casa del Teatro de Medellín

Textos Teatrales - Casa del Teatro de Medellín

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Lo sé por experiencia. Hay un momento en que uno tiene<br />

que vomitar todo lo que le ha dolido para que el estomago<br />

se relaje.<br />

Ña Marta: (Entra en el juego <strong>de</strong> las palabras y su significado) De<br />

nada sirve. El dolor está aquí <strong>de</strong>ntro… aquí <strong>de</strong>ntro... (Se señala<br />

la frente. Se oye un ruido extraño. Todo pue<strong>de</strong> pasar. Pausa)<br />

El Hombre: (Repentinamente) Oiga, (afirmativamente) que le<br />

pasa con los curas…<br />

Ña Marta: (En el ir y venir <strong>de</strong> preguntas y respuestas esta se reviste<br />

<strong>de</strong> alegría no exenta <strong>de</strong> fina ironía) En el pueblo hubo uno que<br />

siempre empezaba diciendo: hable que escucho. Escuchaba<br />

todo el tiempo y luego sin <strong>de</strong>cir nada cerraba el ventanuco <strong><strong>de</strong>l</strong><br />

confesionario para rematar con: ¡la siguiente! Y no faltaban<br />

los cinco padrenuestros y tres credos <strong>de</strong> penitencia. Y ahí se<br />

quedaba todo, mucha chirimía y tantico escuchar.<br />

El Hombre: ¡Sshhh!<br />

EL AUTOR: Los dos se tensan. Es evi<strong>de</strong>nte que es más el<br />

temor que la posibilidad que sea alguien. Se va incrementando<br />

el ruido hasta que al final se vuelve ensor<strong>de</strong>cedor, <strong><strong>de</strong>l</strong> girar<br />

<strong>de</strong> las aspas <strong>de</strong> un helicóptero. La atmósfera es alucinante, el<br />

polvo <strong>de</strong> la tierra calcinada se levanta, gira y se sacu<strong>de</strong> <strong>de</strong> su<br />

letargo, golpea los seres y objetos que allí se encuentran, los<br />

zaran<strong>de</strong>a. Las hojas <strong><strong>de</strong>l</strong> rancho se <strong>de</strong>spren<strong>de</strong>n a medias <strong>de</strong><br />

sus dóciles ataduras. Se oyen ladridos <strong>de</strong> perros.<br />

El Hombre: (El Hombre coge a la mujer y se zambulle en el<br />

interior <strong><strong>de</strong>l</strong> cambuche, improvisada vivienda <strong>de</strong> supervivencia)<br />

¡Qué no se <strong>de</strong>spierte “Azulejo”!<br />

gilberto martínez 151

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!