14.05.2013 Views

Cash Luna – En Honor al Espiritu Santo - Ondas del Reino

Cash Luna – En Honor al Espiritu Santo - Ondas del Reino

Cash Luna – En Honor al Espiritu Santo - Ondas del Reino

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

EN HONOR AL ESPIRITU SANTO<br />

las nuestras. ¿Te imaginas si la sangre que Jesús derramó<br />

en la cruz hubiera estado llena de colesterol o triglicéridos?<br />

Para el Señor su cuerpo era muy importante. Nuestra<br />

s<strong>al</strong>vación dependió de ello. Él cuidó su s<strong>al</strong>ud porque sabía<br />

que en su cuerpo se presentaría el sacriflcio agradable <strong>al</strong><br />

Padre. El velo era su carne y nos dio la entrada cuando se<br />

rasgó. Hoy, tú puedes entrar <strong>al</strong> lugar Santísimo a través<br />

de Jesucristo.<br />

De igu<strong>al</strong> manera, el apóstol Pablo nos dice que nosotros<br />

también debemos cuidar nuestro cuerpo para presentarlo<br />

en sacriflcio <strong>al</strong> Señor: «Por lo tanto, hermanos,<br />

tomando en cuenta la misericordia de Dios, les ruego que<br />

cada uno de ustedes, en adoración espiritu<strong>al</strong>, ofrezca su<br />

cuerpo como sacriflcio vivo, santo y agradable a Dios. No<br />

se amolden <strong>al</strong> mundo actu<strong>al</strong>, sino sean transformados<br />

mediante la renovación de su mente. Así podrán comprobar<br />

cuál es la voluntad de Dios, buena, agradable y<br />

perfecta» (Romanos 12: 1-2).<br />

Si no vemos<br />

a Dios obrar<br />

más en nuestra<br />

vida es porque<br />

seguramente hay<br />

<strong>al</strong>go que no hemos<br />

hecho bien. Si<br />

quieres más unción<br />

debes respetar más<br />

tu cuerpo, porque<br />

sobre él viaja su<br />

poder.<br />

Cuando te acercas <strong>al</strong> Señor<br />

presentas tu cuerpo. Adoramos<br />

en espíritu y en verdad, pero lo<br />

hacemos levantando nuestras<br />

manos a él, cantando o danzando.<br />

Por eso, cuando ores,<br />

pregúntate: «¿Aceptará el Señor<br />

cómo estoy tratando mi cuerpo,<br />

o peco <strong>al</strong> presentarle un cuerpo<br />

indigno?». Si no vemos a Dios<br />

obrar más en nuestra vida es<br />

porque seguramente hay <strong>al</strong>go<br />

que no hemos hecho bien. Si<br />

quieres más unción debes respetar<br />

más tu cuerpo, porque<br />

142

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!