14.05.2013 Views

Cash Luna – En Honor al Espiritu Santo - Ondas del Reino

Cash Luna – En Honor al Espiritu Santo - Ondas del Reino

Cash Luna – En Honor al Espiritu Santo - Ondas del Reino

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

EN HONOR AL EspíRITU SANTO<br />

nas ocasiones, cuando estoy orando por otra persona, les<br />

pido que me miren. Lo hago porque veo que se acercan<br />

a pedir un milagro, pero están más afligidos por la enfermedad<br />

que creyendo en la respuesta. Ellos necesitan que<br />

se les ayude en su fe para que esta no decaiga, necesitan<br />

ver un destello de fe en los ojos de <strong>al</strong>guien más que los<br />

inspire a creer y les dé la seguridad de que Dios me usará<br />

para sanarlos. No necesitan decir el histori<strong>al</strong> clínico de<br />

la enfermedad, pues no soy médico, sino que les ayude<br />

como pastor a creer en un milagro.<br />

El Señor Jesús también ayudó a la gente a conservar<br />

su fe. ]airo, el princip<strong>al</strong> de la sinagoga, le había rogado<br />

que fuese a su casa a orar por su hija de doce años que estaba<br />

enferma y de camino, en medio de la multitud, una<br />

mujer tocó su manto para ser sana de un flujo de sangre.<br />

El Señor se detuvo a hablar con ella. <strong>En</strong> ese momento llegaron<br />

unos enviados a decirle a Jairo que ya no molestara<br />

<strong>al</strong> maestro, pues su niña había muerto. Imagino que todo<br />

se derrumbó en el corazón de ]airo con esa noticia y sintió<br />

una enorme tristeza. Pero el Señor fue de inmediato<br />

a ministrar el sentimiento de temor que podría ahogar<br />

su fe, se volteó y le dijo: «No temas, cree solamente». No<br />

permitió que nadie más le siguiera, sino solamente Pedro,<br />

Juan y]acobo, y <strong>al</strong> llegar a la casa pidió que s<strong>al</strong>ieran<br />

todos y solo dejó que entraran el padre y la madre de la<br />

niña. Tomándola de la mano, le dijo que se levantara, y<br />

ella comenzó a caminar. El Señor ministró la fe de ]airo a<br />

través de las adversidades que él enfrentó, y así lo ayudó<br />

a conseguir el milagro que estaba esperando.<br />

EL PODER DE LA HONRA<br />

<strong>En</strong> una oportunidad me sentía muy m<strong>al</strong> de s<strong>al</strong>ud, con<br />

mucho dolor de cabeza. Estaba en el centro de conven-<br />

162

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!