14.05.2013 Views

REVISTA CINECLUB UNED:Maquetación 1

REVISTA CINECLUB UNED:Maquetación 1

REVISTA CINECLUB UNED:Maquetación 1

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

64<br />

64<br />

64<br />

64<br />

inventor, donde conviven aparatos ultramodernos<br />

y símbolos cabalísticos). Pero, por otro lado,<br />

también contiene una molesta moraleja: la idea<br />

de que el corazón (el amor) es el mediador entre<br />

el cerebro (los capitalistas) y las manos (los obreros),<br />

un disparate (pues llamarlo ingenuidad es<br />

quedarse corto) del que Lang abjuró después.<br />

Tras una obra tan ambiciosa (y que a punto estuvo<br />

de arruinar a la productora UFA), Spione<br />

(“Los espías”, 1927) supuso una vuelta al espíritu<br />

más ligero del serial, repleto de asesinos, agentes<br />

dobles, conspiraciones y espías. Una sucesión de<br />

audaces robos de documentos y atentados hace<br />

cundir el pánico, y convierte a la agencia de seguridad<br />

del Estado en el hazmerreír de la prensa.<br />

“Dios mío, ¿quién está detrás de esto?” –claman las<br />

autoridades. Y el rótulo “Yo” precede a la aparición<br />

en pantalla de Haghi (Rudolf Klein-Rogge), el<br />

supercriminal, director de banco y agente doble,<br />

que mueve los hilos desde una silla de ruedas en<br />

su cuartel general, mediante teléfonos, pantallas<br />

y botones... Todos los agentes que han intentado<br />

desenmascararlo han muerto, y la misión recae<br />

ahora en el agente 326 (Willy Fritsch), quien termina<br />

encontrando una aliada en Sonja (Gerda<br />

Maurus), una agente de Haghi... La película es visualmente<br />

ágil (tiene pocos rótulos, y aún podría<br />

tener menos), compacta (de una duración más<br />

sensata que Mabuse), llena de imaginativas peripecias<br />

(el robo del acuerdo secreto con Japón, la<br />

15<br />

15<br />

15<br />

historia del traidor coronel Jellusic) y de gadgets<br />

que se adelantan a muchas futuras películas de<br />

espías (tintas invisibles, cámaras en miniatura, micrófonos<br />

ocultos, disfraces). Para muchos, Spione<br />

es la mejor película muda de Lang (Chabrol llegó<br />

a decir que el 90% de Hitchcock proviene de<br />

Spione; y no es menos cierto que casi todos los supervillanos<br />

de las películas de James Bond son<br />

hijos de Haghi).<br />

La mujer en la Luna (Frau im Mond, 1928) imagina<br />

el primer viaje a nuestro satélite. Su primera<br />

parte está llena de intrigas folletinescas propias<br />

del serial (científico loco, conspiración de magnates,<br />

espías, disfraces, robo de planos, sabotaje).<br />

Luego, la película (que contó con el asesoramiento<br />

de Hermann Oberth, uno de los padres de<br />

la astronáutica) incluye elementos rigurosamente<br />

verídicos, que se adelantaron a su tiempo (la<br />

“cuenta atrás”, las fases del cohete, los efectos de<br />

la aceleración y la ingravidez), pero deriva hacia<br />

una visión fantasiosa, más cercana al espíritu de<br />

Meliès (en la Luna hay atmósfera respirable... y<br />

oro). Al final, adquiere un inolvidable hálito poético,<br />

pues es también es una historia de amor,<br />

cuyos dos protagonistas, Helius (Willy Fritsch) y<br />

Friede (Gerda Maurus) quedarán solos en la Luna,<br />

como nuevos Adán y Eva...<br />

“M” (1931) se inspiró en el caso del “Vampiro de<br />

Dusseldorf”, Peter Kürten (cuya atroz historia real<br />

dejaría pequeña a la de ficción). Lang encontró insospechadas<br />

dificultades para rodar la película,<br />

pues su título provisional, Asesino entre nosotros,<br />

hizo pensar a muchos que iba a ser un film antinazi<br />

(!)... Los crímenes de un asesino de niños,<br />

Hans Beckert (Peter Lorre), aterrorizan la ciudad<br />

de Dusseldorf. La película muestra el ambiente de<br />

paranoia desatada (la gente está a punto de linchar<br />

a cualquier sospechoso) y su reflejo en los<br />

medios de comunicación. Dos investigaciones tienen<br />

lugar de manera paralela. Una es la investigación<br />

policial científica, minuciosa y rutinaria,<br />

dirigida por el mundano comisario Lohman (Otto<br />

Wernicke). La otra es la del hampa, cuyo negocio<br />

peligra por la mayor presencia policial causada<br />

por los crímenes, y que gracias a sus cómplices y<br />

ramificaciones tiene más éxito: el asesino será<br />

capturado y juzgado ante un tribunal de delincuentes,<br />

donde confesará patéticamente... “M”<br />

fue la primera película sonora de Lang, y el director<br />

la señaló siempre como su obra favorita, no<br />

sólo por su calidad, sino porque fue la última que<br />

pudo rodar en completa libertad, sin cortapisas,<br />

negociaciones, imposiciones o manipulaciones.<br />

Después, la idea de rodar una continuación de<br />

El Doctor Mabuse surgió como un encargo al que<br />

Lang fue inicialmente reacio, hasta que concibió<br />

una idea arriesgadísima, que años después explicó<br />

así: “Quería mostrar, como una parábola, los<br />

métodos terroristas de Hitler. Los eslóganes y doctrinas<br />

del Tercer Reich han sido puestos en boca de<br />

criminales”. No podemos estar seguros de que<br />

ésta no sea una explicación urdida a posteriori<br />

(sorprende que su esposa y coguionista, Thea<br />

von Harbou, simpatizante nazi, no notara nada).<br />

En El testamento del Dr. Mabuse (Das Testament<br />

des Dr. Mabuse 1933), el doctor (Rudolf Klein-<br />

Rogge) lleva diez años encerrado en el manicomio,<br />

donde se ha dedicado a escribir su<br />

testamento, un texto prolijo que detalla con tortuosa<br />

caligrafía el programa a seguir para instaurar<br />

el Imperio del Crimen… Y, al parecer,<br />

alguien está cumpliendo ese plan. La investigación<br />

de los crímenes que empiezan a producirse<br />

en Berlín es dirigida por el socarrón comisario<br />

Lohman (Otto Wernicke), que aparecía en “M”<br />

(y es muy diferente del hierático fiscal von Wenk<br />

del primer Mabuse). Los demás personajes<br />

(estén del lado de la ley o del lado del crimen)<br />

son peones en un juego que no controlan. La red<br />

criminal, organizada en “secciones” y cohesionada<br />

por el terror, actúa sin conocer la finalidad<br />

de sus acciones, ni la identidad de quien dicta las<br />

órdenes. El objetivo de Mabuse (y de su epígono)<br />

es ahora más ambicioso. A través de actos de<br />

violencia aleatoria, a través del terrorismo organizado,<br />

pretende llevar a la gente a la desesperación,<br />

minar su confianza en la organización<br />

social, en los poderes elegidos, para que se<br />

arroje en brazos de un nuevo orden salvador...<br />

Vista la película hoy día, con el conocimiento de<br />

lo que sucedió después en Alemania, resulta estremecedora<br />

su carga profética.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!