Amor total a Cristo - Revelaciones Marianas
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me a la comunión, estando el enemigo al lado del sacerdote con un<br />
arma en la mano. Yo le respondí que sí y que era una muerte<br />
hermosa morir desangrada con Jesús en el corazón. Le dije que lo<br />
consultase al confesor. Días más tarde me dijo que se lo había<br />
dicho y le había dado la misma respuesta. Me contaba estas<br />
cosas, porque, según lo que dijo en varias ocasiones, cuando iba a<br />
comulgar, veía al lado del sacerdote al demonio en figura espantosa,<br />
amenazándola de muerte 89 .<br />
Dice Gema: Un día, estaba rezando el rosario de las cinco<br />
llagas. Estaba en la cuarta llaga y veo delante de mí una figura<br />
semejante a la de Jesús, recién flagelado. Me dijo:<br />
- ¿Es así hija mía como me pagas? Mira cómo estoy. ¿Ves<br />
cuánto sufro por ti? Y tú, por tu parte, ni siquiera me das el<br />
consuelo de aquellas penitencias. Puedes seguir como<br />
antes 90<br />
- No, no, quiero obedecer. Si hago lo que tú dices, desobedezco.<br />
- Pero, al fin de cuentas, ni siquiera ha sido tu confesor quien te<br />
lo ha mandado, ha sido aquel... el padre Germán y tú no estás<br />
obligada a obedecerlo. Que mande en lo suyo. Tú escúchame<br />
a mí.<br />
Me levanté, tomé agua bendita y quedé tranquila, después de<br />
haber recibido algún golpe de los que de vez en cuando me<br />
propina 91 .<br />
Ayer noche, el diablo se me puso delante como un hombre<br />
gordo y muy alto y me golpeó toda la noche, diciéndome: “Tú<br />
seguramente crees que Jesús te quiere, pero Él te ha abandonado.<br />
Para ti no hay esperanza de salvación. Estás en mis manos”.<br />
Respondí que Dios es misericordioso y que no temía nada.<br />
Entonces él, enfurecido, dándome un fuerte golpe en la cabeza,<br />
dijo: “¡Maldita!”. Y despareció 92 .<br />
En otra ocasión vio un ángel de gran hermosura que le dijo:<br />
“Mírame, con sólo que jures obedecerme, puedo hacerte feliz”. No<br />
experimentando Gema la acostumbrada turbación, se puso a<br />
89 Proceso ordinario de Luca, fol 605.<br />
90 El padre Germán le había prohibido hacer penitencias.<br />
91 Carta al padre Germán del 6 de junio de 1900.<br />
92 Carta a Monseñor Volpi de agosto-setiembre de 1900.<br />
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