01.11.2014 Views

Hijos adultos mayores al cuidado de sus padres, un fenómeno ...

Hijos adultos mayores al cuidado de sus padres, un fenómeno ...

Hijos adultos mayores al cuidado de sus padres, un fenómeno ...

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

[EL VIEJO Y SU TIEMPO: Hacia <strong>un</strong>a ética <strong>de</strong> la razón cordi<strong>al</strong> - Dr. Carlos Trejo M. msh]<br />

da en que ese conocimiento es verda<strong>de</strong>ro, sino en la medida en que es<br />

consi<strong>de</strong>rado él mismo como <strong>un</strong> afecto" (4). En otras p<strong>al</strong>abras, el motor<br />

<strong>de</strong> las actitu<strong>de</strong>s son los afectos, la verdad por sí misma carece <strong>de</strong> po<strong>de</strong>r<br />

suficiente para superar los afectos a no ser que sea asumida como<br />

afecto. Este es <strong>un</strong> mensaje para aquellos que ponen <strong>sus</strong> esperanzas en<br />

las leyes para corregir las actitu<strong>de</strong>s. Se verán <strong>de</strong>fraudados, lo cu<strong>al</strong> no<br />

significa que las leyes <strong>de</strong>ban ser justas, razonables e imprescindibles.<br />

Las socieda<strong>de</strong>s se motivan más por las emociones que por las razones;<br />

muy diferente <strong>al</strong> m<strong>un</strong>do académico. Están, entonces, más próximas a la<br />

Retórica que a la Lógica.<br />

ADENDA<br />

Hace <strong>un</strong>a quincena <strong>de</strong> años que este artículo fue escrito. No ha envejecido,<br />

conserva su vigencia. Sin embargo, se hace necesario contextu<strong>al</strong>izarlo<br />

<strong>al</strong> día <strong>de</strong> hoy, pues los tiempos se siguen acelerando y siguiendo<br />

la lúcida sentencia <strong>de</strong>l historiador Mark Bloch “Los hombres son más<br />

hijos <strong>de</strong> su tiempo que <strong>de</strong> <strong>sus</strong> <strong>padres</strong>” daré <strong>un</strong>a síntesis breve, por<br />

tanto más sujeto error, <strong>de</strong> este lapso transcurrido <strong>de</strong>s<strong>de</strong> la caída <strong>de</strong>l<br />

Muro <strong>de</strong>l Berlín en 1989.<br />

El capit<strong>al</strong>ismo no encontró contrapeso y se produjo lo que Edward N.<br />

Luttwak <strong>de</strong>nominó “turbo-capit<strong>al</strong>ismo” en el que la influencia <strong>de</strong>l sector<br />

financiero adquirió <strong>un</strong> enorme po<strong>de</strong>r soci<strong>al</strong> y político <strong>de</strong>splazando<br />

<strong>al</strong> sector productivo. El <strong>de</strong>seo y el placer <strong>de</strong>l consumo, que no tiene límites,<br />

condijo a esas burbujas económicas que no tardaron en est<strong>al</strong>lar. En<br />

Europa fue <strong>al</strong>go diferente. El Estado <strong>de</strong> bienestar fue <strong>un</strong> logro humanizador<br />

<strong>de</strong> la política económica, sin embargo, las presiones políticas <strong>de</strong><br />

las últimas décadas fueron <strong>de</strong>svirtuando estos progresos llevándolo a<br />

<strong>un</strong>a situación que sobrepasó los límites razonables.<br />

Cuando Juan Gutemberg inventaba en la ciudad <strong>de</strong> Mag<strong>un</strong>cia <strong>un</strong> procedimiento<br />

para sacar copias <strong>de</strong> los libros, no tenía ni la más leve sospecha<br />

que re<strong>al</strong>izaba la primera gran revolución <strong>de</strong>mocratizadora <strong>de</strong> la<br />

humanidad.<br />

La <strong>de</strong>claración <strong>de</strong> Fila<strong>de</strong>lfia <strong>de</strong> 1774, influenciada por el pensamiento<br />

<strong>de</strong> Locke, inicia j<strong>un</strong>to a la francesa y a las <strong>de</strong> nuestro continente las<br />

seg<strong>un</strong>das revoluciones <strong>de</strong>mocratizadoras.<br />

Las terceras revoluciones <strong>de</strong>mocratizadoras están asociadas <strong>al</strong> progreso<br />

tecnocientífico <strong>de</strong> las com<strong>un</strong>icaciones y <strong>de</strong> las re<strong>de</strong>s soci<strong>al</strong>es.<br />

Cada <strong>un</strong>a <strong>de</strong> estas revoluciones llevan aparejadas <strong>un</strong> cambio en el<br />

sistema <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r, como también su diseminación soci<strong>al</strong>.<br />

Por otra parte, la concentración <strong>de</strong>l po<strong>de</strong>r que origina la economía <strong>de</strong><br />

mercado, la “sacr<strong>al</strong>ización <strong>de</strong>l dinero” en convivencia con la <strong>de</strong>mocratización<br />

provocada por la tecnociencia, nos ha conducido a <strong>un</strong>a encrucijada<br />

solemne, en la cu<strong>al</strong> hay <strong>un</strong>a mayor conciencia en los <strong>de</strong>rechos y<br />

posibilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> las personas en su afán <strong>de</strong> protagonismo, en contraste<br />

con la re<strong>al</strong>idad <strong>de</strong> abismos soci<strong>al</strong>es, ahora más insoportable. Por ello los<br />

movimientos populares <strong>de</strong> “m<strong>al</strong>-estar”, <strong>de</strong> rechazo a las instituciones<br />

cívicas y religiosas son el resultado <strong>de</strong> la concurrencia <strong>de</strong> los factores<br />

antes dichos. Lo preocupante es que estas manifestaciones populares<br />

tienen signos anarquizantes, sin proyectos <strong>de</strong>finidos hacia <strong>un</strong>a humanización.<br />

Entendida esta humanización con v<strong>al</strong>ores que propician <strong>un</strong><br />

m<strong>un</strong>do más habitable, <strong>un</strong>a convivencia estimulante.<br />

Los ancianos en esta re<strong>al</strong>idad están en <strong>un</strong>a situación <strong>de</strong>sventajosa. El<br />

rápido crecimiento <strong>de</strong> este estamento <strong>de</strong> la población, los constituye en<br />

<strong>un</strong> segmento importante que no pasa inadvertido. Su gravitación en el<br />

presupuesto <strong>de</strong> los países se hace cada vez más gravoso. Su presencia<br />

incómoda.<br />

Me parece oport<strong>un</strong>o terminar con <strong>un</strong>a reflexión <strong>de</strong> A<strong>de</strong>la Cortina “Porque<br />

hemos ido aprendiendo <strong>al</strong> hilo <strong>de</strong> los siglos que cu<strong>al</strong>quier ser humano,<br />

para serlo plenamente, <strong>de</strong>bería ser libre y aspirar a la igu<strong>al</strong>dad<br />

entre los hombres, ser solidario y respetar activamente su propia y a<br />

las <strong>de</strong>más personas, trabajar por la paz y el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> los pueblos,<br />

conservar el medio ambiente y entregarlo a las generaciones futuras<br />

no peor <strong>de</strong> lo que lo hemos recibido, hacerse responsable <strong>de</strong> aquellos<br />

que le han sido encomendado y estar dispuestos a resolver mediante el<br />

diálogo los problemas que puedan surgir con aquéllos que comparten<br />

con él, el m<strong>un</strong>do y la vida” (5).<br />

REFERENCIAS BIBLIOGRáFICAS<br />

1. Hei<strong>de</strong>gger, M. Serenidad. Barcelona, Ed. <strong>de</strong>l Serb<strong>al</strong>, 1989, p. 44.<br />

2. Minois, G. Historia <strong>de</strong> la Vejez. Madrid, Ed. Nerea, 1989, pp. 395-40.<br />

3. Lolas, F. "Gerontología: Enseñar a envejecer como tarea soci<strong>al</strong>". En:<br />

Ensayos sobre Ciencia y Sociedad. Buenos Aires, Ed. Sigma, 1995, pp. 71-74.<br />

4. Spinoza, B. Etica, IV, prop. XIV.<br />

5. Cortina, A<strong>de</strong>la. Bogotá, Ed. El Búho, 2000, p. 63.<br />

El autor <strong>de</strong>clara no tener conflictos <strong>de</strong> interés, en relación<br />

a este artículo.<br />

99

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!