<strong>de</strong> <strong>de</strong>legados <strong>de</strong> la palabra, una forma <strong>de</strong> li<strong>de</strong>razgo laicalnueva y ágil que en no pocas ocasiones unía en una solapersona el compromiso eclesial, social y político (muchosy muchas fueron al mismo tiempo promotores o animadorescomunitarios, activistas, alfabetizadores).A lo anterior se suma el surgimiento y evolución <strong>de</strong> loque Michel Löwy <strong>de</strong>nomina <strong>de</strong>s<strong>de</strong> las ciencias sociales“cristianismo liberacionista”, concepto amplio que preten<strong>de</strong>caracterizar una corriente <strong>de</strong> pensamiento y accióncon gran capacidad movilizadora que no se pue<strong>de</strong> circunscribiral quehacer teológico (teologías <strong>de</strong> la liberación),pero tampoco al ámbito propiamente eclesial (comunida<strong>de</strong>seclesiales <strong>de</strong> base, iglesia popular, iglesia <strong>de</strong> los pobres).Los sobrepasa, y se inscribe más propiamente enla dimensión <strong>de</strong> la “mística revolucionaria” <strong>de</strong>scrita porJosé Carlos Mariátegui. 2Un tercer elemento <strong>de</strong> la época, no menos importante,fue el <strong>de</strong>sarrollo <strong>de</strong> la propuesta pedagógica <strong>de</strong> Paulo Freire,asumida muy al comienzo <strong>de</strong> los sesenta por militantescristianos <strong>de</strong> diversas pastorales, comunida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> la IglesiaLuterana, y el Movimiento <strong>de</strong> Educación <strong>de</strong> Base enBrasil, con expreso patrocinio <strong>de</strong>l episcopado católico <strong>de</strong>ese país, difundida luego en innumerables proyectos quesubrayaban la importancia <strong>de</strong>l proceso <strong>de</strong> concientizaciónen la educación <strong>de</strong> los pueblos empobrecidos. Resulta significativoque en 1968 la Segunda Conferencia <strong>de</strong>l EpiscopadoLatinoamericano, reunida en Me<strong>de</strong>llín, le otorgaracategoría programática al indicar que “la paz, que noes mera ausencia <strong>de</strong> violencia, supone la instauración <strong>de</strong>un or<strong>de</strong>n justo… y la concientización y organización <strong>de</strong>los sectores populares…”; “es necesaria la concientizaciónen or<strong>de</strong>n al cambio <strong>de</strong> estructuras;” “la Iglesia <strong>de</strong>beprestar una atención especial a las minorías activas (lí<strong>de</strong>ressindicales y cooperativistas) que en los ambientes ruraly obrero están realizando un importante trabajo <strong>de</strong>concientización.” 3 Aunque en Freire se advierte con claridaduna evolución en su concepto <strong>de</strong> concientización,sólo mencionaremos aquí el énfasis que se otorgaba enlos procesos educativos populares a la toma <strong>de</strong> concienciacrítica sobre las situaciones vividas, más allá <strong>de</strong> la adquisición<strong>de</strong> habilida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> lectura y escritura, o la meraacumulación <strong>de</strong> conocimientos.Paralelamente, en aquel período los sectores más dinámicos<strong>de</strong> la iglesia, tanto católicos como evangélicos, sealejaron <strong>de</strong> sus clásicas posiciones <strong>de</strong> superioridad, a partir<strong>de</strong> una revalorización <strong>de</strong>l principio teológico <strong>de</strong> la encarnación;se ubicó el diálogo entre iguales como uno <strong>de</strong>los pilares fundamentales en las relaciones <strong>de</strong> esas iglesiascon la sociedad. La consigna era dialogar: con lasciencias sociales, con los movimientos y partidos políticosprogresistas, con las culturas originarias, con otrastradiciones religiosas. Esto implicaba, naturalmente, unavocación ecuménica inédita, que, entre otras <strong>de</strong>rivaciones,llevó a los católicos a rescatar, ratificar y poner enpráctica uno <strong>de</strong> los principios fundamentales <strong>de</strong>l protestantismo:la interpretación comunitaria <strong>de</strong> la Escritura.En la dinámica histórica <strong>de</strong> entrelazamiento <strong>de</strong> los fenómenosapuntados se hace evi<strong>de</strong>nte que el énfasis bíblicosurgió como un aporte específico a un proceso muchomás vasto, y sólo se constituyó como movimiento,más o menos organizado y con i<strong>de</strong>ntidad propia, con elpaso <strong>de</strong> los años. Po<strong>de</strong>mos <strong>de</strong>cir que la LPB es su formahermenéutica típica, el modo <strong>de</strong> leer la Biblia que lo caracterizay distingue, a la vez, <strong>de</strong> otras corrientes <strong>de</strong> interpretaciónbíblica vigentes; a<strong>de</strong>más, es importante subrayarque no resulta sencillo separar dicho movimientobíblico <strong>de</strong> otras dinámicas socioeclesiales, ya que nuncase concibió como fin en sí mismo y, como toda estructuraviviente, pa<strong>de</strong>ció diversas transformaciones. 4 Es necesariorecordar no sólo la prolongada etapa martirial, conplanes <strong>de</strong> exterminio sistemático <strong>de</strong> <strong>de</strong>legados <strong>de</strong> la palabra,sino también el proyecto restauracionista en la IglesiaCatólica, que insiste enfáticamente en un retorno a loscatecismos, garantizadores <strong>de</strong> un pensamiento indiferenciadoy acrítico. 5 A esto hay que agregar la revitalización<strong>de</strong> po<strong>de</strong>rosas corrientes fundamentalistas, literalistas yneoconservadoras al interior <strong>de</strong> las iglesias evangélicas,las censuras <strong>de</strong> todo tipo contra biblistas profesionales, elcontrol <strong>de</strong> la producción editorial, los cambios y los retrocesos<strong>de</strong> estrategias pastorales, las sospechas sobrelas comunida<strong>de</strong>s eclesiales <strong>de</strong> base, etc.En atención a la evolución <strong>de</strong> la corriente bíblica liberadora,el Consejo Mundial <strong>de</strong> Iglesias alentó ya <strong>de</strong>s<strong>de</strong> losaños setenta su articulación <strong>de</strong>s<strong>de</strong> una <strong>de</strong> sus estructuras,la Red Latinoamericana (REDLA). En 1984, reconocidosbiblistas organizaron varios encuentros en Costa Rica yBrasil con el objetivo <strong>de</strong> planificar la organización <strong>de</strong> espaciospara el intercambio <strong>de</strong> experiencias bíblicas populares.Un año <strong>de</strong>spués se celebraron dos seminarios enesos mismos países, con la participación <strong>de</strong> animadorespopulares y biblistas profesionales comprometidos; el temafue “La Biblia y los movimientos populares”. Propusieronla implementación <strong>de</strong> un programa específico <strong>de</strong> formaciónbíblica, que tomó forma en 1987 con el nombre <strong>de</strong>Programa Común <strong>de</strong> Biblia, y que quedó bajo la responsabilidad<strong>de</strong>l Centro Ecuménico <strong>de</strong> Estudios Bíblicos <strong>de</strong>Brasil (CEBI). Sucesivos cambios, a<strong>de</strong>más <strong>de</strong> la experienciaatesorada, <strong>de</strong>rivaron en la consolidación <strong>de</strong> la Red EcuménicaBíblica Latinoamericana y Caribeña (REBILAC)como instancia autónoma. Entre sus logros fundamentalesse encuentra el haber fortalecido un entramado <strong>de</strong> personas,movimientos e instituciones, y haber facilitado espacios<strong>de</strong> encuentro y capacitación; entre estos últimoshay que <strong>de</strong>stacar el Curso Intensivo <strong>de</strong> Biblia, que se <strong>de</strong>sarrollódurante varios años en diferentes países con unaduración <strong>de</strong> seis meses y la asesoría <strong>de</strong> connotados espe-12 Caminos
Des<strong>de</strong> ese mismo año, la Universidad Metodista <strong>de</strong> SaoPaulo edita la Bibliografía Bíblica Latinoamericana. Conocho volúmenes publicados hasta 1995 (a partir <strong>de</strong> 1996sólo en versión digital), procura abarcar el conjunto <strong>de</strong>publicaciones bíblico-teológicas en Latinoamérica, <strong>de</strong>s<strong>de</strong>trabajos populares y <strong>de</strong> aplicación práctica y pastoralhasta tesis doctorales. También en Internet se pue<strong>de</strong> acce<strong>de</strong>rlibremente a la <strong>Revista</strong> Electrónica Latinoamericana<strong>de</strong> Teología (RELAT), que ofrece parte <strong>de</strong> la produccióncontinental.En estos momentos, cada país presenta dinámicas propiasen relación con el movimiento bíblico, y es imposiblehablar <strong>de</strong> un proyecto único, orgánico y en evolución.Entre otras causas, hay que insistir en el impacto provocadopor los procesos <strong>de</strong> conservatización al interior <strong>de</strong>las iglesias, así como los cambios en la militancia sociopolítica<strong>de</strong> algunos cristianos, que hoy se <strong>de</strong>sarrolla conpreferencia en el ámbito <strong>de</strong> los movimientos sociales. Laactividad <strong>de</strong> REBILAC como instancia continental <strong>de</strong> li<strong>de</strong>razgose ha <strong>de</strong>bilitado notablemente, en parte porque espoco lo que pue<strong>de</strong> aportar a procesos nacionales quecuentan con caminos propios y autónomos. Pa<strong>de</strong>ce el <strong>de</strong>stino<strong>de</strong> otras organizaciones similares que tuvieron fuerteimpacto en circunstancias históricas diferentes y nolograron adaptarse a la nueva situación y <strong>de</strong>mandas <strong>de</strong>lcontinente. 6En Cubacialistas. En 1988 se lanzó la <strong>Revista</strong> <strong>de</strong> InterpretaciónBíblica (RIBLA), un interesante proyecto editorial <strong>de</strong> raízlatinoamericana que cuenta en la actualidad con cincuentiséisnúmeros en sendas versiones en portugués y castellano,una estupenda guía para hacer un seguimiento <strong>de</strong>ejes temáticos que nutrieron al movimiento bíblico a lolargo <strong>de</strong> dos décadas. Milton Schwantes, uno <strong>de</strong> sus fundadores,la presentó así:Esta revista se sitúa <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> las experiencias <strong>de</strong> fey <strong>de</strong> lucha <strong>de</strong> las comunida<strong>de</strong>s y <strong>de</strong> las iglesias. LaBiblia está siendo rescatada por el pueblo. Los dolores,utopías y poesías <strong>de</strong> los pobres se tornaron, através <strong>de</strong> las comunida<strong>de</strong>s, mediaciones hermenéuticas<strong>de</strong>cisivas para la lectura bíblica en América Latinay en el Caribe. Esta revista tiene como cuna lavida sufrida <strong>de</strong> nuestros pueblos y su tenaz resistenciaen dirección a una existencia digna y justa. Lascomunida<strong>de</strong>s <strong>de</strong> los pobres ahí insertadas se constituyeronen fermento para el conjunto <strong>de</strong> la hermenéuticabíblica…Consi<strong>de</strong>ramos que la relación <strong>de</strong> algunas iglesias evangélicas<strong>de</strong> nuestro país con la LPB se dio en dos etapas,separadas por un período <strong>de</strong> relativo silencio, entre losaños ochenta y noventa. Tal interregno es producto <strong>de</strong>múltiples factores, entre los que cabría <strong>de</strong>stacar el aumento<strong>de</strong> membresía en la mayor parte <strong>de</strong> esas iglesias a comienzos<strong>de</strong> los noventa, que las llevó a aten<strong>de</strong>r urgenciaspastorales propias <strong>de</strong>l crecimiento experimentado, en <strong>de</strong>smedro<strong>de</strong> otras activida<strong>de</strong>s.Primera etapaEsta se ubica entre los años setenta y mediados <strong>de</strong> losochenta. Hemos recurrido al testimonio <strong>de</strong> dos activosprotagonistas <strong>de</strong>l movimiento ecuménico en aquella época,la reverenda Dora Arce Valentín, pastora <strong>de</strong> la IglesiaPresbiteriana Reformada en Cuba, y Joel Suárez Rodés,<strong>de</strong> tradición bautista y actual coordinador general <strong>de</strong>lCMMLK.La reverenda Arce recuerda:Cuando comencé a participar activamente en la vida<strong>de</strong>l Movimiento Estudiantil Cristiano (MEC) ya serealizaban las Jornadas Teológicas “La Biblia y no-Pedagogía y Teología 13