Revista CALIVIVA Edicion No. 011

cada uno puede aportar su grano de
arena para cristalizar colectivamente
proyectos en favor de la ciudad”
Y es que si nos atenemos a lo anterior
se pensaría que el CEVP está
lleno y por tanto está cumpliendo sus
metas de facturación. Sin embargo,
se viene arrastrando un pasivo por
cuanto la mayoría de Centros de
Eventos son públicos y necesitan un
apalancamiento financiero por parte
del Estado.
“Aspiro a que el CEVP se convierta
en una especie de empresa
mixta y ya la alta consejera para las
relaciones público- privadas quiere
liderar una convocatoria para que el
Ministerio de Industria y Comercio
con los alcaldes de Yumbo y Cali y
el departamento entero, busquen una
solución” y agrega: “tenemos que
romper esos paradigmas absurdos
de que no somos capaces de trabajar
unidos”.
eventos internacionales: “es importantísimo
mirar al exterior. Colombia
y México por ejemplo, están
creciendo en turismo de reunión,
de congresos y eventos y para ello
además es obligatorio tener un hotel
cerca. Bogotá, Cartagena y Medellín
tienen sus centros de eventos
urbanos pero el CEVP va a tener
que autoabastecerse muy pronto de
alojamientos y servicios. Por otra
parte, nuestra capacidad hotelera no
está dando abasto en algunas oportunidades
porque tenemos congresos
de ortopedistas, de oftalmólogos,
TLC con Japón y muchos en fechas
coincidentes. Necesitamos pues más
camas porque vamos para adelante”
En conclusión, la gestión de esta
hija de uno de los más ilustres empresarios
de la ingeniería del país y
nuera del líder cívico Alfonso Bonilla
Aragón, estará centrada en conseguir
recursos del gobierno nacional
para superar el problema financiero
que agobia al CEVP, propender por
la unión de todos los estamentos que
trabajan en torno al turismo empresarial,
llenar hasta el tejadillo los 365
días del año el CEVP y por sobre
todo, convertir este sueño vallecaucano
hecho realidad en un proyecto
de región al que todos a uno le apostemos
con optimismo y alegría.
Finalmente e interrogada por
su concepto de felicidad no duda
en decir que para ella la felicidad
consiste en levantarse en su finca
sin zapatos los domingos en la mañana
a sentir el césped y cultivar sus
orquídeas y sus hortensias allá donde
se juntan el cielo con la tierra...
María Cecilia acompañada de sus hijos
Sofia y Sergio y su esposo Juan Fernando Bonilla
Respecto a la ubicación de CEVP
no le ve problema: “Está en Yumbo
y por eso ha involucrado a su alcalde
en la Junta Directiva vinculando además
a Palmira para darle la oportunidad
a los municipios del Valle de que
se pongan la camiseta y se sientan
partícipes y orgullosos de esta realidad
vallecaucana”.
La Otoya, como le suelen decir
sus allegados, le está apostando a los