21.08.2017 Views

Revista Sala de Espera Venezuela Nro 156 Agosto 2017

Portada 17 Víctor Drija sin miedo a la evolución Demostró aptitud para la actuación, pero su verdadera pasión la desborda bailando en un escenario, acompañado por su romántica voz. Conoce la transformación de este virtuoso venezolano, sus próximas metas y qué nos traerá de nuevo Por Elizabeth M. Gutiérrez G. Casos y Rostros 20 Cuidadores profesionales a domicilio Por Yesmín Sánchez 22 Hacer sentir positivo: El nuevo desafío del branding mundial Por Yubelitze Angarita Borges 25 Una pasión en el desierto Por Daniel Centeno Maldonado Letras y tiempos 31 No hay “musos” en el arte Por Lucas Monsalve Secciones Fijas 7 Urbano y Actual Por Zandy Aliendres 14 A fuego lento El Basque Culinary World Prize 2017 tiene aroma colombiano Por Miryana Márquez Vucenovic 28 Equipaje Francia el país más influyente del mundo Por Elizabeth M. Gutiérrez G. 32 Mundo animal Qué “relata” nuestra mascota sobre nosotros Por Hans Graf 34 Cuerpos y Mentes Niños en la cocina El privilegio de tener mascotas Por Magaly Rodríguez Columnistas 2 Rosa de los vientos Aphrodisiakos Por José Antonio Sáenz 4 Brújula Digital Instagram acude a la inteligencia artificial Por Froilán Fernández 6 Pelota en juego Los rusos se toman selfies Por Cristóbal Guerra

Portada
17 Víctor Drija
sin miedo a la evolución
Demostró aptitud para la actuación, pero su verdadera pasión la desborda bailando en un escenario, acompañado por su romántica voz. Conoce la transformación de este virtuoso venezolano, sus próximas metas y qué nos traerá de nuevo
Por Elizabeth M. Gutiérrez G.
Casos y Rostros
20 Cuidadores profesionales a domicilio
Por Yesmín Sánchez
22 Hacer sentir positivo:
El nuevo desafío del branding mundial
Por Yubelitze Angarita Borges
25 Una pasión en el desierto
Por Daniel Centeno Maldonado
Letras y tiempos
31 No hay “musos” en el arte
Por Lucas Monsalve
Secciones Fijas
7 Urbano y Actual
Por Zandy Aliendres
14 A fuego lento
El Basque Culinary World Prize 2017 tiene aroma colombiano
Por Miryana Márquez Vucenovic
28 Equipaje
Francia el país más influyente del mundo
Por Elizabeth M. Gutiérrez G.
32 Mundo animal
Qué “relata” nuestra mascota sobre nosotros
Por Hans Graf
34 Cuerpos y Mentes
Niños en la cocina
El privilegio de tener mascotas
Por Magaly Rodríguez
Columnistas
2 Rosa de los vientos
Aphrodisiakos
Por José Antonio Sáenz
4 Brújula Digital
Instagram acude a la inteligencia artificial
Por Froilán Fernández
6 Pelota en juego
Los rusos se toman selfies
Por Cristóbal Guerra

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

Casos y rostros<br />

o sombreros anchos <strong>de</strong>l neo hipismo <strong>de</strong><br />

franquicias como Abercrombie o Forever<br />

21. Las hay con camisetas <strong>de</strong> los artistas<br />

<strong>de</strong>l día o <strong>de</strong>l cartel o incluso <strong>de</strong> propuestas<br />

que nada tienen que ver con la<br />

cita (Guns N’ Roses, por ejemplo). Una<br />

joven <strong>de</strong> unos 21 años lleva una negra en<br />

la que se lee en inglés la siguiente oración:<br />

“¿Quién diablos es Mick Jagger?”<br />

Un tiovivo <strong>de</strong> a 8 dólares por persona<br />

comienza a colorear la noche. A lo lejos<br />

un DJ pone canciones <strong>de</strong> Jimi Hendrix o<br />

The Kinks para los que llegaron en casas<br />

rodantes. Hace un par <strong>de</strong> horas que se terminaron<br />

las sesiones <strong>de</strong> yoga y pilates programadas<br />

para el público festivalero. El tiovivo<br />

ahora se torna amarillo para transformarse<br />

en la happy face. Y Dylan aparece<br />

para tocar una irreconocible “Rainy Day<br />

Women#12 & 35” casi a las 7 p.m.<br />

Es verdad que el <strong>de</strong> Duluth no se traiciona<br />

a sí mismo. Llega con aura <strong>de</strong> maestro<br />

huraño sin contacto con el público.<br />

Los jóvenes caminan en procura <strong>de</strong> latas<br />

<strong>de</strong> Budlight <strong>de</strong> a 10 dólares o por simple<br />

tedio, pero los mayores e incondicionales<br />

se postran ante el tótem. Dylan se escon<strong>de</strong><br />

<strong>de</strong>trás <strong>de</strong> un piano y en la mitad <strong>de</strong> su<br />

show las pantallas sólo transmiten imágenes<br />

en blanco y negro <strong>de</strong> trenes o <strong>de</strong><br />

estampas americanas <strong>de</strong>l siglo pasado. Su<br />

banda es <strong>de</strong> primera. Transita por el country,<br />

el folk, el rock o el blues con la gracia<br />

<strong>de</strong> un gato que dobla una esquina. Su<br />

jefe apenas ladra “Don’t Think Twice It’s<br />

all Right” o “Highway 61 Revisited”.<br />

De pie y armónica en mano regala otras<br />

gemas como “Simple Twist of Fate”,<br />

“Early Roman Kings”, “Love Sick”,<br />

“Tangled Up In Blue”, “Lonesome Day<br />

Blues”, “Pay Your Blood”, “Soon After<br />

Midnight y Ballad of a Thin Man”. Para<br />

cuando “Masters of War” cierra el show,<br />

apenas han pasado unos escasos 75 minutos<br />

<strong>de</strong> recital. Un joven regresa con unas<br />

camisetas recién compradas en el puesto<br />

<strong>de</strong> mercancía oficial y exclama: “¡Ya terminó!<br />

Si apenas pu<strong>de</strong> escuchar una canción<br />

antes <strong>de</strong> hacer la cola.”<br />

Y sí, Dylan se va sin siquiera haberle<br />

dado permiso a la prensa para ser fotografiado<br />

con su sombrero cordobés. Ladró,<br />

ya se dijo, <strong>de</strong>s<strong>de</strong> el principio hasta el final<br />

<strong>de</strong> su comparecencia. El sentido <strong>de</strong> este<br />

verbo ya queda a gusto <strong>de</strong> cada quién.<br />

El bajón es innegable. Unas chicas<br />

intercambian noticias al revisar su celular:<br />

Catherine Zeta-Jones, Michael Douglas,<br />

Rob Lowe y Cindy Crawford están<br />

entre el público comentan al <strong>de</strong>scuido. Una<br />

dice que a la mo<strong>de</strong>lo Georgia May Jagger,<br />

hija <strong>de</strong>l cantante <strong>de</strong> los Stones, la vieron<br />

comiendo en la zona. Es probable. Des<strong>de</strong><br />

que comenzaron los rumores <strong>de</strong>l festival,<br />

una noche en la habitación más barata <strong>de</strong><br />

todo el área se acerca a los 200 dólares. El<br />

cielo tiene un precio, y el papá <strong>de</strong> Georgia<br />

está a punto <strong>de</strong> hacer valer esta entrada.<br />

Si Dylan fue la austeridad, los Rolling<br />

Stones juegan con lo opuesto. Y no <strong>de</strong>cepcionan.<br />

Mick Jagger, Keith Richards,<br />

Charlie Watts y Ronnie Wood aparecen<br />

tras los primeros compases <strong>de</strong> “Start Me<br />

Up” para encen<strong>de</strong>r un ambiente <strong>de</strong> brasa<br />

fría. Es cierto que sus “satánicas majesta<strong>de</strong>s”<br />

son unas fieras al momento <strong>de</strong> ven<strong>de</strong>rse<br />

a sí mismos. Horas antes los periódicos<br />

<strong>de</strong> medio mundo habían anunciado<br />

la inminente salida <strong>de</strong> su próximo disco<br />

<strong>de</strong> estudio, Blue & Lonesome. El mismo<br />

Jagger atizó a las masas con una camiseta<br />

con la lengua azul. Así que la expectación<br />

ya estaba macerada.<br />

Un show <strong>de</strong> los Stones se ha vuelto<br />

en un asunto social. Importa más haber<br />

estado allí, que el aporte musical <strong>de</strong> un<br />

grupo que no sorpren<strong>de</strong> <strong>de</strong>s<strong>de</strong> los 70. No<br />

obstante, para el Desert Trip se notan<br />

variaciones en un recital que llevan replicando<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> hace más <strong>de</strong> dos décadas.<br />

Hay un extra en canciones como “Mixed<br />

Emotions” o el estreno <strong>de</strong> “Ri<strong>de</strong> ‘Em<br />

on Down”. También es cierto que esta<br />

maquinaria <strong>de</strong> éxitos no <strong>de</strong>ja <strong>de</strong> lado<br />

sus imprescindibles “It’s Only Rock<br />

’n’ Roll”, “Miss You”, “Gimme Shelter”,<br />

“Sympathy for the Devil”, “Brown<br />

Sugar”, “Jumpin’ Jack Flash”, “You<br />

Can’t Always Get What You Want”,<br />

“Midnight Rambler”, “Wild Horses” y<br />

“(I Can’t Get No)? Satisfaction”. Pero<br />

se notan unas ganas <strong>de</strong> complacer a un<br />

público que los ha seguido <strong>de</strong> toda la<br />

vida. Jagger, aunque bromea al no permitir<br />

chistes sobre la edad, hace una primera<br />

mención <strong>de</strong> manera clara: “Bienvenidos<br />

a la casa <strong>de</strong> retiro <strong>de</strong> Palm Springs<br />

para estos distinguidos músicos ingleses”.<br />

Y sí, hay un momento mágico, una<br />

excepción en su repertorio: una versión<br />

<strong>de</strong> “Come Together” <strong>de</strong> los Beatles, que<br />

alguien <strong>de</strong>l público escucha sorprendido<br />

al igual que todos los presentes y con el<br />

puño en alto: Sir Paul McCartney.<br />

¿Quién dijo que los Stones no crearon<br />

el rock <strong>de</strong> estadios?<br />

Lea la crónica completa en<br />

www.sala<strong>de</strong>espera.com.ve<br />

<strong>Agosto</strong> - Septiembre <strong>2017</strong> | www.revistasala<strong>de</strong>espera.com<br />

29

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!