Carballo e Inova Walker denunciaron feminicidios y violencia sexual en lascalles de Guatemala con sus respectivas obras. Voces Anónimas, deJazmin Morales y Elda Figueroa colocaba a un actor como pastor evangélicoque gritaba narraciones de acoso callejero. O Marilyn Boror, que abordólas resistencias desde el ejercicio político de las vestimentastradicionales de los pueblos.Por otro lado, Aiza Samayoa contó una historia de Guatemala ligada al genocidio.Mishad Orlandini narró la historia de su propia familia a través deun archivo histórico. El Colectivo Lemow (integrado por cineastas, comunicadorasy artistas) manifestó las resistencias desde la música, fotografíay pintura, o Gala Berguer con su performance Na tua cara. Además demencionar a mujeres que se enunciaron desde sus propios espacios comoXimena Rodas, cuyos dibujos son una crítica hacia la elitización estructuralde la ciudad de Guatemala, y Cristina Nuñez, quien desde Honduras rectificael lugar del arte popular.Todos estos proyectos estuvieron íntimamente ligados a nuestro ejerciciode reconocer el espacio que habitamos y la violencia que nos pasa por elcuerpo como mujeres. Y pudo culminar en un gran encuentro con cumbias,una microfiesta del colectivo Anarkiperreo exclusiva para mujeres.absoluta y siempre estamos cuestionando estos procesos, algo necesarioen nuestro proceso de deconstrucción del arte.Pienso en otros lugares afines de acción como la #00Bienal en Cuba,o la Bienal FEMSA en México, ejercicios que han descentralizado la circulaciónartística hacia el espacio público. En tu experiencia dentrode La Bienal en Resistencia, ¿cómo continuar estimulando el trabajocolectivo y descentralizado?Creemos que estos ejercicios de trabajo colectivo y descentralizado yaexisten, pero no son reconocidos por los medios masivos o las institucionesartísticas, en realidad no que estemos creando el agua azucarada pero síevidenciamos estas acciones. Por ejemplo, en Guatemala hubo una marchadel agua, todas las comunidades llegaron al centro histórico con cubetas oguacales de agua y en determinado momento las personas se acostaron enlas gradas de la casa presidencial. Para nosotros ese fue un performance ylo que estos proyectos hacen es intentar derribar la pared imaginaria entrelas manifestaciones político/ciudadanas y el arte.Como continuación de la conversación sobre la resistencia latinoamericana,¿qué bibliografía o referencias artísticas sugieres consultar?Latinoamérica atraviesa por un proceso convulso de protesta. Desdela experiencia de situar la bienal en este contexto, tengo dos preguntas:¿por qué es importante que el lenguaje artístico acompañe estarealidad? y ¿qué distancia critica debe tomar para evitar rumbos oportunistaso condescendientes?Creemos firmemente que el lenguaje artístico no es solo aquel que dialogaen el medio artístico, sino que el arte es un artículo de consumo diarioque puede consumirse a través de pintas en la calle, pancartas, consignasu objetos. Por eso no leemos que el lenguaje artístico esté separadode la realidad social, los ejercicios de poder capitalistas neoliberaleslos han separado para que leamos el arte solamente dentro delcubo blanco, pero no es así.Es primordial reconocer nuestros privilegios y reconocer que el arte no esun medio exclusivo de artistas, sino que debe acompañar los mensajes sociales.Debemos ser críticos con el espacio que ocupamos y cuestionar sila propuesta pretende utilizar al subalterno como lenguaje artístico o acompañarsu lucha. Que el arte para el arte tiene diálogos específicos, pero nosotroslo entendemos como una plataforma de acontecer social que tieneque tener acción en la realidad que nos contiene. No tenemos la respuestaSociología de la imagen. Miradas ch’ixi desde la historia andina,de Silvia Rivera CusicanquiFeminismos diversos: el feminismo comunitario,por Lorena Cabnal.Arte y resistencia política en (y a) las sociedades de control.Una fuga a travésde Deleuze.La responsabilidad política del arte,por Maya Juracán.Hilando fino desde el feminismo comunitario,por Julieta Paredes.¿Quién escribe la historia del arte?,por Maya Juracán.—1 Julieta Paredes C., Adriana Guzmán A., El tejido de la rebeldía. ¿Qué es el feminismo comunitario?La Paz, abril 2014.90
EL MÉIQUIN OF