Billboard AR N°88 Noviembre 2020

Maluma apenas había actuado
antes de Marry Me, pero no tuvo
que hacer una audición formal para
la película, una clara señal de la
conciencia de Hollywood sobre el
valor de cortejar a los espectadores
hispanos, que compraron el 25% de
las entradas en Estados Unidos en
2019, según la empresa de estudios
de mercado Statista. El cantante es
parte de una ola de artistas latinos
que aparecen en la pantalla en estos
días: a principios de este año, J
Balvin tuvo un papel como Tresillo
en la película animada Trolls World
Tour: un clip de su personaje interpretando
su éxito mundial “Mi Gente”
fue destacado en los anuncios
de la película, y tanto Cardi B como
Ozuna se han unido al elenco del F9
del próximo año, la última entrega
de la serie Fast & Furious.
“Nunca en sus sueños más locos
Maluma se imaginó protagonizando
una película de Hollywood con Jennifer
Lopez”, dice el presidente/CEO
de Sony Music Latin Iberia, Afo Verde.
“Es un reflejo del momento que
estamos viviendo”.
Los servicios de transmisión
también reconocen el valor de las
historias de los artistas latinos, con
programas con guiones musicales
como Selena: The Series (que se
estrenará en diciembre) de Netflix
y Súbete a Mi Moto en español de
Amazon, basado en la historia de
la banda de chicos Menudo. Son de
“visita obligada” para los “millones
de fanáticos” de esos actos, dice
Daniel Eilemberg, presidente de
Exile Content Studio, una compañía
de producción en español e inglés
que tiene varios proyectos con temas
musicales preparados para su
distribución.
“Eso es [lo suficientemente poderoso]
como para generar suscripciones”.
Lopez, por supuesto, no es
ajena a las formas en que el cine y la
música pueden polinizar de forma
cruzada: es la única mujer que ha
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