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Leipzig 2005

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18 • ESCRIME INTERNATIONALE<br />

LES CHAMPIONNATS DU MONDE DE LEIPZIG • THE LEIPZIG WORLD<br />

■ La Française Laura Flessel-Colovic, dans une de ses<br />

attaques de prédilection, la touche au pied, contre la<br />

Hongroise Adrienn Hormay en finale de la compétition<br />

à l’épée par équipes.<br />

■ In <strong>Leipzig</strong>, the presentation and lighting of the finals<br />

provided the audience and television viewers with a<br />

superb show.<br />

■ En <strong>Leipzig</strong>, la presentación y las luces de las finales<br />

dieron un espectáculo muy apreciado por los espectadores<br />

y los telespectadores.<br />

➜<br />

dial por equipos de Francia que sucede al título<br />

olímpico ganado el año pasado en Atenas. Por una<br />

vez, es la juventud (tres de los otros franceses tienen<br />

menos de 25 años) que triunfó y la demostración<br />

fue también inevitable. Superioridad técnica,<br />

colectiva, homogeneidad: nada faltaba. La espada<br />

francesa alcanzó con mucha naturalidad el nivel de<br />

los grandes equipos de la historia. Al pasar, sus<br />

valientes caballeros arrasaron con todas las ambiciones:<br />

45-21 contra Venezuela, 45-22 contra<br />

Suiza, 45-39 contra Polonia, 45-32 contra Ucrania<br />

antes de completar la demostración contra<br />

Alemania, que sin embargo, era calurosamente<br />

estimulada por su público con ganas de medalla de<br />

oro: 45-31. Imposible hacerlo mejor. En este contexto,<br />

los espadistas ucranianos ya podían estar<br />

contentos de subir el tercer escalón del podio, como<br />

lo hicieron, al final de la prueba individual, el<br />

holandés Bas Werwijlen y el noruego Claus Moerch,<br />

un poco inesperados en tan buena compañía pero<br />

que no estaban ahí por casualidad. En efecto<br />

pequeños y grandes esgrimistas lo saben: nunca se<br />

sube al podio sin un verdadero talento. A fin de<br />

cuentas, el resultado de Claude Moerch puede<br />

compararse al de sus compatriotas, los espadistas<br />

Fossum segundo en el campeonato del mundo<br />

cadetes <strong>2005</strong> y Backer tercero en los juniors masculinos,<br />

otra vez en la última primavera en Linz. Un<br />

buen año, desde luego, para la esgrima noruega<br />

que supo concretar sus progresos.<br />

Y ya que estamos en lo inesperado, la disciplina<br />

que ofreció el cambio más grande en los dos escalones<br />

más altos de su podio mundial es indiscutiblemente<br />

la espada femenina. La polaca Danuta<br />

Dmowska, 23 años, ganó el título, tercera en la<br />

clasificación mundial a la víspera de <strong>Leipzig</strong> pero<br />

que no se creía capaz de salir del apuro con tanta<br />

habilidad. Atlética, tocando con la mano derecha,<br />

muy concentrada en cada tocado hasta no cometer<br />

ninguna falta, esta espadista del club del Legia<br />

de Varsovia sin embargo se impuso con el dominio<br />

de una esgrimista experimentada. Danuta<br />

Dmowska sólo fue obligada a sacar sus recursos<br />

en la final cuando tuvo que rechazar los asaltos de<br />

la estonia Maarika Vosu hasta el tocado decisivo<br />

(12-11). Al ver izar la bandera polaca en el asta,<br />

la nueva medallista de oro podía estar legítimamente<br />

orgullosa de ella: desde 1995, y el triunfo<br />

de otra espadista Joanna Jalimuk, ningún esgrimista<br />

polaco había logrado ser campeón del<br />

mundo en seniors.<br />

El mismo año, Laura Flessel había ganado una<br />

medalla de bronce. Diez años más tarde, la francesa<br />

volvió a subir en el tercer escalón del podio, lo<br />

que, evidentemente, constituye también un ejemplo<br />

de longevidad. Sin embargo, a los 33 años,<br />

Laura Flessel-Colovic, con unas ganas de triunfo<br />

no saciadas totalmente, ponía a mal tiempo<br />

buena cara pero podía tener grandes disgustos.<br />

De hecho, en la presentación de los finalistas, ninguna<br />

de sus tres últimas rivales disponía al parecer<br />

de referencias suficientes para ser capaz de poder<br />

suplantar a la francesa. Fue sin contar con la solidez<br />

psicológica de Maarika Vosu, con 21 años<br />

pero que, lejos de dejarse impresionar por la lista<br />

de los resultados de su rival, supo merecer su califi-<br />

cación aunque sólo fue adquirida, otra vez, en el<br />

tocado decisivo. ¿Que faltó, en definitiva, a Laura<br />

Flessel-Colovic para renovar con un triunfo<br />

supremo que se le escapa desde 1999 y mostrarse,<br />

en <strong>Leipzig</strong>, al igual que Pavel Kolobkov y que<br />

Valentina Vezzali? Quizás sólo un poco de esta<br />

extraordinaria rabia de vencer que, a lo largo de<br />

los primeros años de su carrera internacional, la<br />

hacia sublimarse tanto como paralizar a las más<br />

ardientes de sus rivales.<br />

Resta que Laura Flessel-Colovic saludó como se<br />

debe la primera medalla mundial seniors ganada<br />

por Canadá con la tercera posición de Sherraine<br />

Mackay, preparada por el Francés Daniel<br />

Levavasseur, que fue también su entrenador y<br />

ayudó también a la suiza Sophie Lamon a ser<br />

campeona del mundo júnior <strong>2005</strong> después de una<br />

larga ausencia. Resta también que 45-31 quedará<br />

un marcador simbólico para los espadistas franceses.<br />

Es con este marcador que Fabrice Jeannet y los<br />

suyos habían ganado su final frente a Alemania.<br />

Es con este mismo marcador que Laura Flessel-<br />

Colovic, Maureen Nissima, Hajnalka Kiraly-Picot y<br />

Sarah Daninthe finalizaron el día con el oro frente<br />

a Hungría. El título le escapaba desde 1998.<br />

La incomparable campeona italiana de florete<br />

Valentina Vezzali había indicado antes de los campeonatos<br />

del mundo <strong>2005</strong> tener la idea de defender<br />

su título solamente cuatro meses después de su<br />

parto cuando recordó que en 2001 en Nîmes<br />

Laura Flessel-Colovic vino para defender el suyo en<br />

plazos análogos. Pietro, primer hijo de Valentina<br />

Vezzali, 31 años, y de Mimo Giugliano, futbolista,<br />

nació el 9 de junio de <strong>2005</strong>. El 9 de septiembre de<br />

<strong>2005</strong>: Valentina Vezzali es fiel al proyecto que<br />

estableció: hacer algo grande para su hijo. Y la<br />

campeona de Jesi, en la costa adriática es sin duda<br />

alguna una mujer joven que añade a su talento de

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