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al Decreto del Carbón, aprobado por el Gobierno en 2010.
Hay que notar también que las emisiones en los sectores
difusos (transporte, residencial, etcétera) no se han reducido
lo suficiente como para poder cumplir el primer periodo
del Protocolo de Kioto. De hecho las emisiones totales
de España están en torno a 192 millones de toneladas de
CO 2 e en lugar de los 159 millones de toneladas previstas
por el anterior Gobierno, lo que deja un déficit que deberá
ser cubierto con la compra de derechos de emisión.
Otro aspecto relevante es que la electricidad sólo pesa
un 23,3% en el conjunto de energía final. Aunque en general
la electricidad no es almacenable y por tanto en todo
momento la oferta debe casar con la demanda, las ventajas
que en cualquier caso presenta este vector energético
hacen que sea deseable y previsible que en los próximos
años se asista a un creciente proceso de electrificación.
Debido a ello le prestaremos una especial atención en
este análisis.
SECTOR DEL CARBÓN
Se encuentra en una situación crítica debido al proceso de
eliminación de la subvenciones de acuerdo con las imposiciones
de la UE aunque con el pequeño respiro otorgado
por el RD de 2010 que obligaba al uso de carbón en la generación
eléctrica para disminuir los stocks hasta el horizonte
de 2013. A continuación damos unas cifras correspondientes
a 2011, indicando entre paréntesis los valores
equivalentes en 2010, a efectos de comparación:
Producción total en 2011: 6.62 MM t. (8,4 MMt.), de las
cuales 4,26 MMt correspondieron a hulla y antracita y 2,36
MMt a lignito negro. Las ventas fueron de 8,82 MMt (4,33
MMt.) y los stocks acumulados 1,87 MMt. (4,97 MMt.). De
estas cifras se desprende la crítica situación del sector, que
a finales de 2010 había agotado la capacidad de almacenamiento,
inclusive utilizando al máximo los parques de
carbón de las centrales térmicas.
Debido al antes mencionado RD la cobertura de la
demanda de electricidad con carbón, que había ido descendiendo
desde 2007 hasta alcanzar un mínimo del 9,4%
en 2010, aumentó en 2011 hasta el 17,2%, si bien por motivos
regulatorios y con el asociado incremento de las emisiones.
Por este motivo, en 2011 se importaron 13,7 MMt
de carbón de mejor calidad y se emplearon 10 MMt. de
carbón nacional.
Con respecto al tema de las ayudas, cabe indicar que
cuando se consideran todos los impuestos que gravan
este sector, tales como IVA, IS, Seguros Sociales, retención
del IRPF, por cada euro de ayuda que recibe el sector retornan
más de tres a las administraciones.
Como conclusión de lo expuesto, parece que se debiera
considerar el carácter autóctono de esta fuente de energía
16 COIIM noviembre - diciembre
en el marco de nuestra fuerte dependencia energética y
que por lo menos se debería alcanzar una situación equilibrada
con las de otros países de la UE, tanto en cuanto a
la rentabilidad de las actividades productivas como a las
de I+D+i. Con relación a este último punto sería deseable
una mayor atención al acceso a fondos de la UE para desarrollar
tecnologías propias de depuración de óxidos de
azufre y nitrógeno, así como de captura y almacenamiento
de CO 2 , mediante la construcción de una central de
demostración a escala comercial.
SECTOR DE HIDROCARBUROS LÍQUIDOS
En 2011 las principales economías de la OCDE adolecieron
de la falta de una orientación definida. En la UE, la profunda
crisis financiera lastró el crecimiento. Sólo las economías
emergentes siguieron creciendo con vigor. El consumo
mundial de petróleo creció moderadamente en 800.000
barriles/día (0,9 %), hasta exceder ligeramente los 89 Mbd.
La primavera árabe afectó a los precios del petróleo
como consecuencia de la guerra en Libia y el cese total de
sus exportaciones de crudo. La devaluación paulatina del
euro con respecto al dólar ha encarecido la factura energética
y los precios de los derivados a pesar de la relativa
estabilidad del crudo en la segunda parte del año.
Por el lado de la oferta, Estados Unidos y Canadá lideraron
el mercado con crudo procedente de pizarras y arenas
bituminosas, mientras que en México y en el Mar del
Norte prosiguieron los descensos de producción. La capacidad
disponible de la OPEP disminuyó por la sustitución
del crudo libio (1,6 Mbd) y la utilización de reservas estratégicas.
El embargo a Irán fue otro factor que afectó a la