rista y el extraño caso del señor ikea - CDD IMPIVA disseny
rista y el extraño caso del señor ikea - CDD IMPIVA disseny
rista y el extraño caso del señor ikea - CDD IMPIVA disseny
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
distribución. Por ejemplo, mucha gente desconoce, que casi todo <strong>el</strong> plástico<br />
de Ikea se hace aquí, en Aldaia, por parte de una empresa de plástico valenciana.<br />
Pensamos que Ikea lo tenemos muy lejos y luego resulta que está en Aldaia la<br />
fabricación. Son industrias que no son d<strong>el</strong> sector d<strong>el</strong> mueble, en este <strong>caso</strong> d<strong>el</strong><br />
sector tradicional, sino una industria nueva, la d<strong>el</strong> plástico, que empezó como<br />
industria auxiliar, y que sin embargo, hoy es la que hace <strong>el</strong> mueble, y un mueble que<br />
se vende a todo <strong>el</strong> mundo.<br />
C.G. Me imagino que cuando uno recibe <strong>el</strong> Premio Nacional de Diseño,<br />
cambian algunas cosas.<br />
V.M. Es curioso. Cuando tu estrechas la mano d<strong>el</strong> rey, en determinados ambientes<br />
parece que sea palabra de dios. A partir de ese momento, de la concesión d<strong>el</strong><br />
Premio Nacional de Diseño, aqu<strong>el</strong>lo que yo decía o proponía parecía que tenía mayor<br />
predicamento. Es decir aqu<strong>el</strong> premio y aqu<strong>el</strong> encuentro con <strong>el</strong> rey, me dió credibilidad.<br />
Pero tengo que decir que costó muchos años que lo que era normal en otros sitios, en<br />
otros ámbitos, fuera normal aquí.<br />
C.G. Y tal como está la situación, ¿tenemos que hablar de batallas<br />
perdidas?<br />
V.B. Yo creo que la industria tradicional, la industria d<strong>el</strong> mueble, la que era una<br />
industria pesada, con capacidad de inversión, con capacidad económica, con los<br />
mercados internacionales conquistados, se hubiese podido reciclar, reorientar o<br />
reposicionar hacia un mueble que hoy hubiese podido ser reconocido como <strong>el</strong> que<br />
en su día se hizo aquí en Valencia. Y sin embargo no lo ha hecho. Y si que es verdad<br />
que se ha impulsado desde las instituciones, donde ha participado Vicent, algún<br />
tipo de iniciativa. Y no se ha conseguido, ¿Por qué? Porqué se estaba cómodo.<br />
Se seguían conquistando nuevos mercados cada vez más remotos, se seguía<br />
pensando que <strong>el</strong> mercado aceptaba <strong>el</strong> mueble clásico, y sin embargo se<br />
abandonaba <strong>el</strong> mercado nacional.<br />
C.G. Y así finalmente nos ha lucido <strong>el</strong> p<strong>el</strong>o.<br />
VICENTMARTÍNEZ VICENTEBLASCO<br />
V.B. No ha habido una reflexión sobre qué es lo que podía comprar <strong>el</strong> operario de la<br />
fábrica o simplemente <strong>el</strong> vecino de la esquina, o lo que le gustaba a la propia hija o<br />
hijo de tu vecino industrial. Se han seguido buscando mercados para seguir<br />
haciendo lo que se sabía hacer, y eso es la oportunidad que se ha perdido. Otro de<br />
los errores es no haber seguido controlando los mercados. Y que en su día sí que<br />
se hizo. Las empresas grandes d<strong>el</strong> mueble clásico, tenían sus tiendas, una<br />
distribución más controlada, pero ese mueble contemporáneo, <strong>el</strong> mueble de<br />
diseño para entendernos, no ha sabido o no ha podido hacerlo. Y ahí entonces<br />
tenemos los fenómenos de Ikea o de Hábitat que si que han sabido llegar, y han<br />
sabido ocupar ese hueco.<br />
295