Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Homero, educador de occidente<br />
César García Álvarez<br />
Homero, la Biblia de los griegos<br />
Homero, su Ilíada y su Odisea, ha sido considerado<br />
“la Biblia de los griegos”. Como<br />
la Biblia fue comentada por los Padres de<br />
la Iglesia, por los Apologistas, por los Teólogos como<br />
San Agustín y Santo Tomás, glosada por los poetas<br />
como Dante o líricos como San Juan de la Cruz,<br />
aprendida en las escuelas, explicada por los predicadores,<br />
esculpida por los artistas como lo hizo Ghiberti<br />
en las Puertas del Cielo del Batisterio de Florencia,<br />
motivo para los pintores como Miguel Angel en la<br />
Capilla Sixtina, Leonardo y Dalí en La Última Cena.<br />
Así Homero, su obra, subyugó en Grecia a historiadores,<br />
filósofos, artistas y pedagogos, a los que voy a<br />
referirme en cada caso.<br />
A) Historiadores y políticos tras el Logos<br />
Heródoto, el Padre de la historia, cita con frecuencia<br />
pasajes de la Ilíada y la Odisea. Heródoto recoge<br />
incluso la noticia de que el tirano Clístenes prohibió<br />
en Atenas que alguien compitiese con el rapsoda<br />
Sción, pues recitaba a Homero tal fuerza que le daba<br />
el poeta, que nadie podía competir con él.<br />
Tucídides es el otro gran historiador de Grecia,<br />
con Heródoto enmarcan la historia de Atenas, uno<br />
narra las Guerras Médicas, el otro, Tucídides, la decadencia<br />
de Atenas en Las Guerras del Peloponeso.<br />
Tucídides equivocadamente cree que Homero<br />
vivió unos 60 años después de la Guerra de Troya;<br />
digo equivocadamente, pues el realismo narrativo, la<br />
vivencia de los hechos, la fuerza de los detalles, son<br />
rasgos de estilo de toda epopeya, que esculpe, cincela<br />
los hechos para hacerlos visibles por el rapsoda o<br />
juglar a los oyentes. El oyente sabía de memoria los<br />
hechos, buscaba cómo vivía o expresaba el rapsoda o<br />
juglar los hechos. El arte de los rapsodas tenía mucho<br />
del retoricismo de los artistas del barroco, que queriendo<br />
expresar con énfasis las doctrinas del Concilio<br />
de Trento, las gesticulaban en demasía, así La transfixión<br />
de Santa Teresa de Bernini.<br />
Reconocieron historiadores, políticos como Clístenes<br />
y Licurgo, filósofos con Platón y Aristóteles,<br />
la necesidad de Occidente de contar con una palabra,<br />
un libro y un guía donde mirarse. “Espejo de las<br />
Musas”, es un libro de Bochetti donde comenta el<br />
Homero, educador de occidente<br />
Homero-Espejo. Precisamente entre las palabras más<br />
ponderadas en Grecia hay que destacar todas aquellas<br />
que tienen que ver con el espejo, así: MIME-<br />
SIS (Aristóteles), MÁSCARA (Esquilo), SOMBRA<br />
(Platón), SER ACCIDENTAL (Platón y Aristóteles).<br />
Todo aquello que representa algo pero no lo es.<br />
Reconocieron historiadores y políticos la necesidad<br />
de Occidente de un guía y una palabra escrita<br />
donde mirarse. Occidente, desde Homero, sintió<br />
hambre de la palabra, de la palabra ponderada y fija;<br />
así se apropió de: Homero, los trágicos, los historiadores<br />
como Heródoto y Tucídides, en Roma se miró<br />
en la Eneida; Occidente apenas supo de la Palabra de<br />
Dios, la aceptó como suya y le dio el nombre Griego<br />
de Bibli y la selló con sangre de mártires; Occidente<br />
es San Agustín y la Ciudad de Dios, Dante y la Divina<br />
Comedia, Cervantes y el Quijote, Shakespeare<br />
y Hamlet, Goethe y Fausto, Dostoviesky y Crimen<br />
y Castigo… PALABRA, LIBRO y GUÍA fueron una<br />
necesidad de Occidente, porque quería apresar el ser<br />
y no dejar todo al tiempo destructor que pasa, quería<br />
ser Aristóteles y Platón y no solo Heráclito. La pregunta<br />
inicial griega por el ser, no es ajena a la palabra<br />
consistente que tiene el griego de Homero.<br />
En otras culturas, las AGRAFAS, los ANCIA-<br />
NOS, el CLAN, el GURU, los RITOS, sustituían la<br />
palabra. Pero estos transmisores eran siempre muy<br />
débiles, una tradición muy cambiante. Lo ha estudiado<br />
Friedemann para la cultura afrocolombianas, Luis<br />
Ramiro en La Comunicación antes de Colón, y Levi-<br />
Strauss en muchas de sus obras.<br />
La palabra como FUNDAMENTO está asediada<br />
hoy por tanto best-seller, farándula y un laicismo<br />
que quiere instaurar el dogma del Nada Vale y Todo<br />
Vale. Frente a ello, felizmente, al lado de los Premios<br />
Nobel de Medicina, Física y Economía, se encuentra<br />
el de la palabra, el Premio Nobel de Literatura. Desde<br />
Homero con la Ilíada e Israel con la Biblia hasta el<br />
Premio Nobel de Literatura, Occidente reconoce aún<br />
la lucha por lo que vale, que eso significa clásico con<br />
que apodamos a Grecia.<br />
¿Es que no hubo amor a la palabra en Oriente? ¿Y<br />
los Vedas y Gilgamesh, por ejemplo?<br />
Ciertamente, pero Occidente es lo faústico: conocer,<br />
saber, explorar, buscar, inquirir, investigar, deducir<br />
e inducir, a partir de los axiomas inviolables;<br />
59