Tenango del Valle - Revista Personae

Lugareños y visitantes, la mayoría suelen quedarse quietecitos, como viendo al infinito desconocido y de pronto decir: -“Aquí,
pareciera que el tiempo se hubiera detenido”. Luego se encontrarán en el Real de Minas de las Once
Mil Vírgenes, que es el nombre original –claro, impuesto por el conquistador- fundado en 1562.
Cosalá conserva su atmósfera colonial, creada por las numerosas casas típicas y calles empedradas. Entre los edificios más
interesantes se encuentran: Santa Úrsula, templo del siglo XVIII, que conserva su antiguo reloj de sol en la fachada; el Palacio
Municipal; la Capilla de la Virgen de Guadalupe, la Plaza de Armas y el Museo de Minería.
Desde luego, todos ellos encierran parte de la historia de la región.
Cosalá cuenta con varios balnearios: Vado Hondo, a 15 kilómetros de la cabecera municipal, hermoso paraje cuya
cascada y lago, rodeados de exuberante vegetación son ideales para pasar un espléndido día de campo.
A 20 kilómetros se encuentra la presa José López Portillo, donde se puede practicar la pesca deportiva.
En la parte alta, se topa uno con el Cerro Palmar de los Fonseca y al noreste con la Gruta México, que recontra
vale una excursión e incursión hasta sus entrañas y abismos. Aproveche, se lo recomiendo ampliamente, cualquier oportunidad
para visitar Cosalá, le reportará a usted y su gente, una de las más espléndidas experiencias. México, sus regiones y estados, son
maravilloso, en Sinaloa, por cualquier rumbo, lo podrá constatar. Buen viaje.
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P E R S O N A E • 7