Tenango del Valle - Revista Personae
Tenango del Valle - Revista Personae
Tenango del Valle - Revista Personae
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
En portada: RoSalía TRejo<br />
Fotografía: enRique hueRTa laRa<br />
Presidente y Director General<br />
Ramón Zurita Sahagún<br />
Director Editorial<br />
José Antonio Ruiz Estrada<br />
Directora<br />
Irma Fuentes<br />
Directora Comercial<br />
Martha Garrido Ojeda<br />
Director Jurídico<br />
Roberto Vidal Méndez<br />
Asistente de Dirección<br />
María Eugenia Rosales<br />
Arte y Diseño Gráfico<br />
Enrique Huerta Lara<br />
Desarrollo en Internet<br />
José Rosales Manjarrez<br />
Fotógrafos<br />
Enrique Huerta, Alfredo<br />
Palomo, Mario Torres<br />
Colaboradores<br />
Elliot Barrascout, Carlos<br />
Bonilla, Vicente Cantú, Patricio<br />
Cortés, Felipe de la Lama,<br />
Bernardo González, Erika<br />
Montes, Ruperto de Nola,<br />
Aquiles Me<strong>del</strong>lín, Jorge Ramos<br />
Zepeda, Leopoldo Romero<br />
e d i t o r i a l<br />
Encrucijada<br />
El 2 de julio es el día más trascendente para los mexicanos como Sociedad, Nación y Estado.<br />
Del tino de los electores y de la capacidad –incluyendo los códigos de ética, profesión,<br />
verdadera vocación de servicio, como lo ha acuñado la famosa clase política- <strong>del</strong> candidato<br />
electo y sus respectivos equipos, dependerá el rumbo de México.<br />
Pero ese deberá considerar que desde el arranque de las campañas hasta este día,<br />
hemos sido testigos de la sorda lucha por el poder, librada entre la derecha radical –con<br />
visos inequívocos de los ultra-yunque, con señales de retornar al sistema confesional-<br />
disfrazada de progresismo democrático, pero, en realidad con intenciones de manipular<br />
a la sociedad a través de los dogmas rebasados hace tiempo.<br />
Seguimos oyendo las convocatorias de los falsos demócratas, aquellos que programáticamente<br />
enarbolan las banderas de la democracia, a partir de “sólidas convicciones de<br />
que todo poder dimana <strong>del</strong> pueblo y cuya lucha por dignificar el sistema político mexicano,<br />
aún no ha sido suficientemente valorada”, cuando ellos mismos durante su dictadura<br />
partidista de 72 años, reiteradamente ignoraron lo que ese pueblo les demandó. Peor<br />
aún, cuando en estos tiempos de campaña demuestran que buscan el poder <strong>del</strong> Estado<br />
como gran botín y no, como dicen, oportunidad para servir a los mexicanos.<br />
Es pertinaz también el canto mesiánico de quien se arrepintió de ser militante<br />
<strong>del</strong> partido en el poder que no le dio oportunidad para gobernar Tabasco y ahora, sin<br />
verdaderas bases científicas, tecnológicas, financieras, intenta acabar con la miseria que<br />
su ex partido provocó. Lo insólito es que no tenga escrúpulos para enlistar en su equipo<br />
a aquellos que también renunciaron porque la camarilla en el poder no les dio hueso<br />
alguno para asegurar su futuro de abundancia por otros seis años.<br />
La alternancia solo fue eso: alternancia. Todos lo sabemos. También que no hubo<br />
cambio alguno. Que la incertidumbre en todo creció. Que se deterioró la política externa.<br />
Que el desempleo aumentó alarmantemente. Que la economía ilegal (nueva forma de<br />
supervivencia de los mexicanos) es de más <strong>del</strong> 50% de la<br />
economía nacional. Que la estabilidad macroeconómica es<br />
un espejismo, porque los bolsillos <strong>del</strong> mexicano común y<br />
corriente (mayoría aplastante) siguen exangües.<br />
Por ello, cualquiera de los tres candidatos (los otros<br />
dos no cuentan en realidad) que reciba la mayoría de<br />
votos, debe entender que la pequeña o gran mayoría <strong>del</strong><br />
electorado que se decidió por él, fue porque lo consideraron<br />
el menos malo, de ninguna manera el mejor, por lo tanto,<br />
no sólo tendrán que cumplir sus promesas –ya estamos<br />
cansados de ellas: Echeverría, López Portillo, De la Madrid,<br />
Salinas, Zedillo y Fox, suman 36 años de incumplimiento-<br />
sino esforzarse más allá de ellas. Resulta obvio advertirles<br />
que el hartazgo suele derivar en estallido.<br />
Ramón Zurita Sahagún