CULTURA Y PODER EL ARTE EN LA VIDA POLÍTICA - Instituto ...
CULTURA Y PODER EL ARTE EN LA VIDA POLÍTICA - Instituto ...
CULTURA Y PODER EL ARTE EN LA VIDA POLÍTICA - Instituto ...
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
FOLIOS<br />
17<br />
son destruibles. La contemplación del objeto se hace algo<br />
prescindible, puesto que no permite interpretación. La obra<br />
significa lo que el curador explica de ella, lo que contiene<br />
la cédula, niegan que la obra pueda ser algo más, la acotan,<br />
limitan, le crean fronteras teóricas que el espectador no<br />
pueda traspasar. El arte contemporáneo no guarda misterio,<br />
no permite análisis, con sus explicaciones o reflexiones y su<br />
adicción a los soportes, haciendo del soporte mismo la obra,<br />
cierra la posibilidad de razonamiento. Están acabando con<br />
la curiosidad, el impulso del público de pensar en lo que ve,<br />
de comprometerse con las sensaciones que la obra provoca.<br />
La obra es una concatenación de ideas digeridas y listas para<br />
tragarse, el camino seguro hacia la apatía. Imponen estas<br />
ideas porque la obra no permite percibirse o no crea la experiencia<br />
de estar contemplando arte, entonces la obra no<br />
es verdad. Lo único que puede hacer que la obra sea verdad<br />
es una serie de soportes como el contexto, el museo le otorga<br />
a la obra verdad, realidad, le da condición de arte. La<br />
verdad en la ciencia es algo que se alcanza a través del método<br />
científico, y es verdad porque se puede comprobar,<br />
es conocimiento y esta comprobación no se altera con los<br />
contextos, la verdad es universal y por eso se acepta como<br />
una teoría. Una obra que se somete a un cambio elemental<br />
como sacarla de contexto y se desploma en su condición,<br />
y retoma su situación original de objeto encontrado en la<br />
basura quiere decir que no alcanza la categoría de verdad<br />
como sucede en la ciencia. “Lo verdadero en el arte es algo<br />
no existente”, Adorno. Entonces ¿por qué la adicción a<br />
escenarios y parámetros verdaderos?, mientras “el enigma<br />
es precisamente que dicha promesa pueda ser un engaño”<br />
entramos al terreno de la especulación y la ambigüedad,<br />
en una discusión y esta puede vivir sin un museo, puede<br />
cumplir su función con la impresión de un libro. Sin la<br />
ambigüedad del contenido, y ante lo que en verdad la obra<br />
representa, es una contradicción la necesidad de escenarios<br />
que sí significan y soportan algo. Hacen de esa necesidad<br />
una denuncia: la reflexión que muestra lo que no es visible,<br />
que contiene el significado es una estratagema para<br />
encubrir que el contexto, es lo único real de la obra. La<br />
radicalidad de los museos es contradictoria porque por un<br />
lado al ser contemporáneos sólo exponen arte nuevo, de<br />
Lo único que puede<br />
hacer que la obra<br />
sea verdad es una<br />
serie de soportes<br />
como el contexto,<br />
el museo le otorga<br />
a la obra verdad,<br />
realidad, le da<br />
condición de arte