UNIDAD 5
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TEORÍA GRAMATICAL IV<br />
Profs. Carmen Acquarone – Alicia Gil<br />
tienen significación en el sentido en que la semántica habla de significación refiriéndose a los lexemas. Sólo lo<br />
que tiene significación puede convertirse en metáfora. Este presupuesto yo quisiera confirmarlo expresamente<br />
una vez más en estas líneas. De ello se deduce que entre la semántica y la sintaxis no corre frontera fundamental.<br />
La existencia de metáforas temporales explica también la razón de que se desplacen los tiempos de las<br />
distintas lenguas, a pesar de la relativa constancia de las categorías fundamentales de las situaciones<br />
comunicativas y así no podamos equiparar los tiempos de los idiomas particulares. De la misma manera que las<br />
metáforas semánticas, que son con frecuencia los abanderados de un cambio de significación, las metáforas<br />
temporales pueden también hacerse habituales y, por una cierta repetición, arrastrar consigo un reajuste del<br />
sistema temporal. Entonces es el momento de que intervenga la lingüística histórica (lo mismo que la historia de<br />
la literatura).<br />
[...] El sistema metafórico de los tiempos no debe limitarse [...] a algunos tiempos, ni debe hacerse<br />
dependiente [...] de la asociación con un adverbio temporal (de Tiempo) de otra clase. El contexto que constituye<br />
la metáfora puede ser de cualquier clase.<br />
EL CONDICIONAL, METÁFORA TEMPORAL<br />
A la vista del texto de Gide ya hemos tratado de un conditionnel (on croirait) que funciona como metáfora<br />
temporal. Ahora vamos a seguir ocupándonos del problema para intentar abarcar todas las metáforas temporales<br />
posibles a base de este tiempo, lo cual no quiere decir agotarlas. Las metáforas temporales difieren entre sí según<br />
el verbo portador de la metáfora temporal y según el contexto en que éste aparece. Por consiguiente, el sistema<br />
metafórico temporal es el dominio del matiz. Como es difícil que dos matices se equiparen, aquí sólo podemos<br />
tratar de revisarlos con vistas a establecer una tipología. Así se hace inevitable cierta simplificación que parece<br />
justificada, debido a que su objeto principal va dirigido a llamar la atención sobre el fenómeno de la metáfora<br />
temporal. La interpretación de las distintas metáforas temporales y de sus matices expresivos puede dejarse a la<br />
observación personal.<br />
La lingüística francesa se ha enzarzado en una larga polémica en torno al conditionnel francés: ¿Hay que<br />
entenderlo como tiempo o como modo? Como en esta polémica bajo el término de tiempo verbal se entiende<br />
Tiempo, y bajo el término de modo no se entiende nada concreto, podemos darla por concluida. Con la<br />
diferencia establecida entre tiempos y metáforas temporales y con algunas consideraciones más (V. págs. 296 y<br />
ss.), la discusión sobre tiempos y modos es cosa superflua. Todos los tiempos son modos y ningún tiempo es<br />
modo: el resultado siempre es el mismo porque, de todas formas, el concepto de modo no dice nada.<br />
Voy a tomar otros ejemplos del diario de André Gide. El pasaje siguiente constituye un buen ejemplo de<br />
rotura de la concordancia porque se trata de un período: Pour moi je crains toujours (un peu mystiquement<br />
encore, je l'avoue) de renforcer la position de l'adversaire en mettant l'injustice de mon côté. Et puis de toute<br />
manière, et lorsqu'elle amènerait ma victoire, l'iniquité m'est intolérable; j'aime encore mieux en être<br />
victime... * (1-IX-1931). El matiz del conditionnel se reproduce en español con el subjuntivo trajese. Valga esto<br />
como breve indicación de que otras muchas lenguas, entre ellas el español, conocen instrumentos lingüísticos<br />
para expresar matices análogos.<br />
El apunte siguiente del diario de Gide está redactado en una angustiosa época de guerra (25-X-1916):<br />
Du train dont nous allons, il se formera d'ici peu un parti germanophile en France, et qui se recrutera non point parmi<br />
les anarchistes et les internationalistes, mais parmi ceux qui se trouveront contraints de reconnaître la constante supériorité<br />
de l'Allemagne. Ils estimeront avec raison qu'il est bon, qu'il est naturel, que ce soit la supériorité qui gouverne. Et peut-être<br />
songeront-ils que quelque chose, en France, reste supérieur à cette supériorité même; mais, hélas! ce quelque chose de divin<br />
reste impuissant et muet. L'Allemagne saurait-elle le reconnaître, ce quelque chose? Chercherait-elle à l'étouffer? Ou ne<br />
consentirait-elle pas au contraire à le mettre en valeur?... Mettre en valeur la précellence de l'ennemi! Quelle chimère! Et<br />
même ce quelque chose souffrirait-il d'être mis en valeur par l'ennemi? **<br />
* En cuanto a mí, siempre temo (aun con cierto misticismo, he de confesarlo) reforzar la posición del adversario colocando la<br />
injusticia de mi lado. Y después de todo y aunque trajese la victoria, la iniquidad me es intolerable; prefiero ser su víctima...<br />
** Al paso que vamos, dentro de poco se formará en Francia un partido germanófilo que se reclutará no entre los anarquistas<br />
e internacionalistas, sino entre los que se vean obligados a reconocer la constante superioridad de Alemania. Estimarán con<br />
razón que es bueno, que es natural, que sea la superioridad la que gobierne. Y acaso piensen que algo, en Francia, quede