29.06.2013 Views

UNIDAD 5

UNIDAD 5

UNIDAD 5

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

TEORÍA GRAMATICAL IV<br />

Profs. Carmen Acquarone – Alicia Gil<br />

imperfecto representa la acción en su decurso y es un tiempo durativo; el perfecto simple representa la acción<br />

como mero acontecer y es un tiempo puntual. En la Gramática de la lengua española de J.A. Pérez-Rioja, a<br />

propósito del perfecto simple se lee lo siguiente: "Predomina en él la acción momentánea frente a la durativa del<br />

imperfecto" (5ª ed., 1964, pág. 335). [...]<br />

UN CONCEPTO DESAFORTUNADO: "ASPECTO"<br />

Salta a la vista que la diferencia entre imperfecto y perfecto simple no tiene nada que ver con el Tiempo,<br />

cosa reconocida hasta por aquellos que juran por él. Ahora bien; con este argumento el concepto de aspecto ha<br />

encontrado su asiento en las gramáticas de las lenguas románicas. Paul Imbs, al caracterizar a ambos tiempos,<br />

habla de un aspecto durativo y de un aspecto puntual y establece entre ellos una oposición aspectual 6 . Knud<br />

Togeby encuentra en el imperfecto un aspecto imperfectivo y en el perfecto simple un aspecto perfectivo, pero<br />

además ve en el presente un tercer aspecto, el neutro 7 .<br />

Pero, ¿qué es aspecto? Paul Imbs lo define así: "El aspecto es una de las cualidades inherentes al proceso" 8 .<br />

Lo mismo quiere significar Ernst Cassirer cuando explica el aspecto como "cualidades formales del Tiempo"<br />

(zeitliche Gestaltqualitäten) 9 . No vamos a tomar la palabra zeitlich (temporal, de Tiempo) al pie de la letra.<br />

Cassirer quiere decir ante todo temporal (del tiempo verbal), pero identifica, naturalmente, como todos, los<br />

tiempos verbales con el Tiempo. Nosotros traducimos la definición de Imbs con ayuda de Cassirer para concebir<br />

el aspecto como cualidades formales del proceso. Del aspecto hay que distinguir con todo rigor, según una<br />

concepción más moderna, los llamados "modos de la acción", por ejemplo, los que constituyen la diferencia<br />

entre vocablos imperfectivos como "seguir" y perfectivos como "conseguir". Esta diferenciación, que atañe a la<br />

significación de las palabras, compete, por lo tanto, a la semántica general y no a la sintaxis ni al estudio de los<br />

tiempos 10 .<br />

[...]<br />

La doctrina del aspecto y la doctrina del Tiempo están relacionadas entre sí. La primera ha arraigado<br />

tardíamente en la lingüística románica, precisamente en un momento en que se ha visto que a la igualdad tiempo<br />

verbal = Tiempo le sobraba un resto considerable. Este resto tenía que ir a cuenta del concepto aspecto sin<br />

atender al hecho de que en la igualdad tiempo verbal = Tiempo + aspecto habían intervenido conceptos<br />

totalmente extralingüísticos para explicar el sistema temporal, en sí cerrado y armónico en su estructura. [...]<br />

Después de haber rechazado el fundamento según el cual tiempo verbal = Tiempo, no tenemos motivo para tratar<br />

con mejores modales el artilugio que es la ecuación tiempo verbal = aspecto. Nuestra ecuación es otra: tiempo<br />

verbal = comportamiento del hablante articulado en los dos grupos temporales del mundo comentado y del<br />

mundo narrado. Si esta doctrina es correcta, tendrá que ser lo bastante fuerte para explicar también la pareja<br />

imperfecto-perfecto simple y parejas comparables en otras lenguas y, lo que es más, por medio de una teoría<br />

sencilla y coherente. (La sencillez de la explicación es un criterio de la verdad).<br />

EL RELIEVE EN LA NARRACIÓN<br />

Para la explicación de la pareja de tiempos imperfecto y perfecto simple vamos a partir de un hecho muy<br />

sencillo hasta ahora no observado, aunque ya contiene en sí toda la explicación: en las lenguas románicas hay<br />

más tiempos narrativos que comentadores y la pareja imperfecto-perfecto simple, que hasta ahora se ha intentado<br />

explicar en vano con ayuda del concepto de aspecto, aparece sólo en el grupo temporal del mundo narrado.<br />

Supongamos una vez más por un momento que la explicación a base del aspecto es correcta, y que el lenguaje<br />

nos da a conocer, efectivamente, la forma y el decurso de las acciones y de los procesos. En este caso debería<br />

6<br />

Paul Imbs: Op. cit., págs. 16 y 170.<br />

7<br />

Knud Togeby: Structure immanente de la langue française, 1951, páginas 173 s.<br />

8<br />

Op. cit., pág. 15.<br />

9<br />

Ernst Cassirer: Philosophie der symbolischen Formen, 1956, pág. 180.<br />

10<br />

Esta diferenciación proviene del eslavista Sigurd Agrell. Cfr. para todo el problema Wolfgang Pollak: Studien zum<br />

"Verbalaspekt" im Französische. Wien, 1960, Parte I, cap. I. Además, Hans Helmut Christmann: Zum "Aspekt" im<br />

Romanischen, en Romanische Forschungen 71 (1959), 1-16. Completado en Romanstisches Jahrbuch 13 (1962), 193.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!