Seminario Bíblico de las Américas 1

56 Seminario Bíblico de las Américas
D. Las dudas de Juan el Bautista (Mt. 11:2-19; Lc. 7:18-35).
• Estando Juan el Bautista preso en una celda ubicada al Este del Mar Muerto, comenzó a dudar
acerca de Jesús, y mandó a dos de sus discípulos a preguntarle si El era el Mesías o si deberían
esperar a otro.
• Cristo contestó que sus mismos hechos de sanar, resucitar muertos, y predicar el evangelio a
los pobres confirmaban quien era. Y no reprochó a Juan por sus dudas.
• En lugar de despreciar a Juan por su pregunta, Jesús después confirma a la gente el ministerio
verdadero de su pariente, diciendo que no hay mayor profeta que Juan el Bautista, “pero el más
pequeño en el reino de Dios es mayor que el”. ¿Qué quiere decir esto? Tal vez se refiera a los
privilegios de los creyentes que han vivido después de la venida de Cristo, que conocen el
evangelio en su plenitud y disfrutan de la íntima comunión con El por medio de su Espíritu Santo.
• La expresión “una caña sacudida por el viento” significa “un hombre que se somete a la opinión
popular, que cambia por ella y no tiene convicciones firmes. Juan no era así.
• Mt. 11:12, “Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos sufre violencia,
y los violentos lo arrebatan” también puede ser traducido de otra manera. La Nueva Versión
Internacional lo traduce, “Desde los días de Juan el Bautista hasta ahora, el reino de los cielos ha
venido avanzando contra viento y marea, y los que se esfuerzan logran aferrarse a él.” Probablemente
significa que es necesario aferrarse de Cristo con fuerza para lograr su reino, a pesar de
todos los obstáculos que se ponen en el camino. ¡El que venciere, reinará con Cristo! (Ap. 3:21)
• Esa generación rechazó a Juan y a Jesús. ¡Juan fue rechazado porque no comía ni bebía con la
gente, y Jesús porque sí comía y bebía con ellos! (Fueron excusas no más.)
• V. 19,“...Pero la sabiduría es justificada por sus hijos,” en la NVI, “Pero la sabiduría queda
demostrada por sus hechos.” O sea, los mismos hechos de Jesús y de Juan demuestran si eran
de Dios o no, no el hecho de comer o no ciertas comidas.
E. Jesús es ungido en casa de Simón el fariseo (Lc. 7:36-50).
• Simón, un fariseo, había invitado a Jesús a comer en su casa, cuando una “mujer pecadora”
entró, ungiendo sus pies con perfume, llorando y enjugando sus pies con su cabello.
• La descripción de la mujer sugiere que era prostituta.
• Cuando el fariseo vió esto, pensó que Jesús no era profeta o hubiera reconocido quien era la
mujer pecadora.
• Jesús contesta con la parábola de los dos deudores, y le enseña que la persona que es perdonada
de muchos pecados ama más. La mujer pecadora le mostró más amor que Simón mismo, su
anfitrión.
• Jesús le díjo a la mujer, “Tu fe te ha salvado, ve en paz.”
• Un caso parecido es el relato de María de Betania que también ungió los pies de Jesús en
Jn. 12:1-8. (La mayoría de los comentaristas piensan que no es la misma mujer que ungió
sus pies en Lucas. ¿Qué piensa usted? ¿Por qué?)
• Otro relato se encuentra en Mt. 26:6-12 y Mr. 14:3-9. Probablemente es María de Betania en
estos relatos.