Seminario Bíblico de las Américas 1

74 Seminario Bíblico de las Américas
V. EL VERDADERO DISCIPULADO
(Lc. 9:57-62)
1. El primero ofreció seguir a Jesús “adondequiera que vayas”, pero no había contado todavía el costo
de dejar su hogar y sus comodidades.
2. Jesús llamó al segundo, y éste quería volver a casa hasta que su padre muriera, quizás meses o años
después. No sintió la urgencia del llamado, y quiso poner en primer lugar a sus padres.
3. Jesús invita al tercero a “anunciar el reino de Dios” (predicar), pero éste estaba distraído por la
familia también. Jesús dijo, “Ninguno que poniendo su mano en el arado mira hacia atrás, es apto
para el reino de Dios”. ¡Dios tiene que ocupar el primer lugar para ser un verdadero discípulo!
VI. LA MISIÓN DE LOS SETENTA
(Lc. 10:1-23)
A. Hay muchas semejanzas con la misión de los Doce. (Mt. 10:1-42; Lc. 9:1-6)
B. Hay también diferencias notables:
1) El ministerio de los Setenta no estaba limitado a los judíos, sino a toda ciudad y lugar adonde Jesús
iba a ir (Lc. 10:1).
2) La misión de los Doce era permanente, y la de los Setenta fue momentánea. (Por eso solo predijo
persecución para los Doce.)
3) Cristo ordenó a los Setenta de no malgastar el tiempo con largos saludos en el camino, porque la
misión era urgente (Lc. 10:4).
C. El regreso de los Setenta.
1) ¡Regresaron con profundo gozo! (El ministerio debe traer gozo.)
2) Salieron con fe y vieron grandes resultados.
3) Hasta los demonios se les sujetaban, pero Jesús les aconsejó que deben regocijarse más por
tener escritos sus nombres en el libro de la vida.
4) ¿Qué quiso decir Cristo al afirmar que había visto a Satanás caer del cielo como un rayo? (Lc.10:18)
• Vea Is. 14:12-15.
• También Cristo estaba viendo la caída del reino de Satanás en las victorias que tuvieron los
Setenta sobre los demonios.
5) Jesús se regocijó tanto por el éxito de los Setenta que exclamó espontáneamente en oración,
“Yo te alabo, oh Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque escondiste estas cosas de los sabios
y entendidos, y las has revelado a los niños,” Lc. 10:21.
6) Mt. 11:25-30 repite esta oración y agrega la única y bella auto descripción de Jesús en los Evangelios
“Venid a mi todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar. Llevad mi yugo
sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso, y humilde de corazón; y hallaréis descanso
para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.” Mateo 11:28-30.