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C e a r á
Francisca Ferreira dos Santos, 20 años, va
d e s p a ramando el maíz para las gallinas que
viven sueltas, no reciben hormonas para cre c e r
y son alimentadas con productos sin agro t ó x i-
cos, y comenta. “Me estoy dedicando a la cría
de gallinas. Mi objetivo es ser la mayor criadora
de aves ecológicas de la región”. Su madre ,
Doña Adelaide, no sabe muy bien lo que quiere
decir eso. “Solo sé que no se debe usar veneno”,
dice.
El primer cambio que se nota en los jóvenes
quienes desde el 2000 participan del pro y e c t o
Alianza con el Adolescente, una asociación de
la Fundación Odebrecht con el Instituto Ay rt o n
Senna, la Fundación Kellogg y el BNDES (Banco
Nacional de Desarrollo Económico y Social),
es la incorporación a su vocabulario de térm i-
nos antes inimaginables. ¿Quién podría suponerse
que expresiones como “agricultura org á-
nica”, “proyecto autosustentable”, o “identidad”,
“ciudadanía” y “autoestima” pudiesen
pasar a ser pronunciadas de forma tan natural
por adolescentes de las áreas carenciadas del
n o re s t e ?
En el Medio Jaguaribe, en Ceará, la agricultura
ecológica familiar modifica la vida de los jóvenes
Desde que entró en el proyecto, cuya org a-
nización asociada en la micro región de Ceará
es el “Instituto Elo Amigo” (Instituto Eslabón
Amigo), Francisca enloquece a sus padres con
tantos planes. “Antes era calladita, calladita”,
dice doña Adelaide. Ahora, charlotea todo el
tiempo sobre su plantación y sus sueños para
el futuro. Las capacitaciones desarrolladas por
el instituto en el área de agricultura ecológica
familiar le pusieron a Francisca muchas ideas
en la cabeza y una azada en la mano.
Al principio, el padre, don Adão, medio desconfiado,
la ayudó, cediéndole un área de 618
m 2 para que hiciese sus experiencias en la mitad
del terreno. Francisca plantó maíz, frijoles, acerola,
tamarindo y otras plantas nativas; en la otra
mitad, está el huerto. Los frijoles y el maíz serv i-
rían para alimentar a sus aves ecológicas. Después
de algunos meses, ella observó que limpiando
la tierra alrededor de la planta, técnica
que aprendió en el instituto, las orugas se comían
los yuyos, pero no llegaban al maíz. Pero en la
plantación del padre, se comían toda la planta.
También descubrió que una planta, el melón caetano,
colocada en el nido, ahuyenta los insectos.
Finalmente, don Adão tuvo que convencerse.
H o y, Francisca tiene en el huerto 50 gallinas
que ponen 100 huevos por mes, para consumo
de los familiares. Pagó el préstamo de R$ 500,00
que consiguió por medio de Pronaf (Pro g r a m a
Nacional de Fortalecimiento de la Agricultura
Familiar), del Banco del Noreste, y las gallinas
le sirv i e ron para pagar el curso de inform á t i c a .
El “Eslabón Amigo” también la ayudó de una
f o rma indirecta a adquirir la incubadora que
necesitaba para ampliar el negocio. Francisca
les pidió prestado el dinero a dos funcionarios
del instituto, que pagó con cuatro gallinas y 20
h u e v o s .
El “Eslabón Amigo”, con sede en Iguatú,
a b a rca asimismo los municipios cearenses de
Acopiara, Quixelô, Jucás y Orós que forman la
m i c ro - región del Medio Jaguaribe, una de las
t res zonas donde actúa el proyecto “Alianza con
el Adolescente” –las otras dos son el Bajo Sur,
en Bahía, y la Bacia do Goitá (Cuenca del Goitá),
en Pernanbuco. A pesar de estar localizada
en la región semiárida, esa zona es considerada
promisoria, rodeada por muchos lagos y cañadas.
Entretanto, el IDH (Índice de Desarro l l o
Humano) local es de 0,5 abajo del pro m e d i o
nacional, de 0,75. Y es exactamente eso lo que
el proyecto pretende modificar.
“ Q u e remos colocar una curva ascendente
en la línea de desarrollo”, dice el superintendente
de “Eslabón Amigo”, Eleudson Queiro z .
“La Alianza acertó al apostar en los jóvenes. He
o b s e rvado en ellos mucha responsabilidad, garra
y deseo de cambiar el mundo”. El Sebrae
( S e rvicio de Apoyo a las Micros y Pequeñas
E m p resas de Ceará) apoyó técnica y financieramente
la iniciativa desde el comienzo, inclusive
cediendo un local para el proyecto. En un
primer momento, hubo 800 jóvenes que re s u l-
t a ron beneficiados en programas como Form a-
ción del Adolescente Solidario, Cadena Pro d u c-
tiva de la Agricultura Ecológica, Cadena Productiva
de Acuicultura y Central de Serv i c i o s .
El veterinario Paulo Landim, líder de la cadena
de Acuicultura Familiar, informa que hay en
Ceará entre 18 y 20 mil millones de metros cúbicos
de agua en cañadas y re p resas, y se está
viviendo un momento de expansión con la crian-
8 Odebrecht Informa agosto • 2003