34 porque indica que lo conjeturado sigue en pie en cuanto conjetura, el segundo porque indica que ciertas correcciones <strong>de</strong>ben ser hechas. Po<strong>de</strong>mos encontrar personajes ficticios como Sherlock Holmes (<strong>de</strong> Arthur Conan Doyle), Auguste Dupin (<strong>de</strong> Edgar Allan Poe), Poirot (<strong>de</strong> Agatha Christie), y el padre Brown (<strong>de</strong> Gilbert Keith Chesterton), que son excelentes representantes <strong>de</strong> lo que en la tradición literaria inglesa es la novela policial. Estos personajes tienen una capacidad enorme <strong>de</strong> <strong>de</strong>scubrir al criminal. Generalmente están ro<strong>de</strong>ados <strong>de</strong> policías o compañeros circunstanciales con aptitu<strong>de</strong>s <strong>de</strong>tectivescas mínimas. Ellos ciertamente son mentes muy lógicas, pero no <strong>de</strong> argumentos <strong>de</strong>ductivos. Sus pensamientos, mezcla <strong>de</strong> imaginación y <strong>de</strong> capacidad analítica, son abductivos. La abducción es la clase <strong>de</strong> pensamiento que nos permite lanzar hipótesis explicativas. Todos estos <strong>de</strong>tectives, gran<strong>de</strong>s abductores (me permito otro neologismo), son muy buenos ejemplos <strong>de</strong> la importancia que tiene la abducción <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong> la lógica y <strong>de</strong>ntro <strong>de</strong>l conocimiento científico o vulgar. Pero la mera posesión <strong>de</strong> hipótesis que ‘podrían explicar’ lo que ocurre no basta. Es necesario, en primer lugar, una observación <strong>de</strong> los hechos para po<strong>de</strong>r luego lanzar una hipótesis. Toda hipótesis es sobre algo que vemos que ocurre, pero que aún ignoramos porqué. Toda abducción se da enmarcada en una serie <strong>de</strong> pensamientos. Por ello se indica 84 que la abducción implica observación, luego una manipulación imaginativa <strong>de</strong> los hechos observados y finalmente la formulación <strong>de</strong> la hipótesis explicativa. “[La abducción] es una facultad o habilidad tan básica, que es casi instintiva; es tan rápida que pue<strong>de</strong> llamarse intuición; pero es <strong>de</strong> naturaleza abstractiva, y realiza una operación inferencial, abductiva. Es una intuición abstractiva <strong>de</strong> las leyes, esencias o universales <strong>de</strong> las cosas <strong>de</strong> la naturaleza y <strong>de</strong> la sociedad; pero no una intuición inmediata y simple, sino compleja, integrada en una inferencia, la abducción.” 85 84 Así lo hace Sara Fernán<strong>de</strong>z <strong>de</strong> Barrena, Introducción, Un AO, pág. 33. 85 Mauricio Beuchot, Adbucción y analogía, punto 4. Documento <strong>de</strong> Internet.
35 <strong>Peirce</strong> <strong>de</strong>sarrolla mucho algunos otros aspectos, como sus aplicaciones, sus consecuencias en una verda<strong>de</strong>ra actitud científica, etc. Pero con lo <strong>de</strong>sarrollado sobre la abducción consi<strong>de</strong>ro haber expuesto lo esencial sobre ella. ojo: