REVISTA PESCA ENERO 2015
La revista Pesca es un medio de información alternativo referido a temas del mar y de la pesquería. Transmite información, ideas y corrientes de opinión que tienen por objeto crear conciencia de sostenibilidad de los recursos marinos, de seguridad alimentaria, de cuidado y protección del medio ambiente y ecosistemas acuáticos y de la necesidad de una participación del país más justa en la renta pesquera.
La revista Pesca es un medio de información alternativo referido a temas del mar y de la pesquería. Transmite información, ideas y corrientes de opinión que tienen por objeto crear conciencia de sostenibilidad de los recursos marinos, de seguridad alimentaria, de cuidado y protección del medio ambiente y ecosistemas acuáticos y de la necesidad de una participación del país más justa en la renta pesquera.
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mitad de todo el pescado que se consume por año se<br />
hace en Semana Santa y el 95 % de todo lo que se pesca<br />
se exporta. En este momento hay cerca de mil buques<br />
de bandera argentina en el mar, y en estos buques<br />
hay tripulantes que se dedican a ir en busca de la pesca<br />
durante todo el año.<br />
Como jefe de la sala de máquinas de un buque de casi<br />
sesenta metros, Müller asume riesgos permanentes y su<br />
trabajo se define constantemente por las vicisitudes del<br />
océano. En 1997 zarpó desde el puerto de Mar del Plata<br />
y en el medio del Atlántico se incendió la popa del barco<br />
que navegaba. Debido a una mala maniobra de uno de<br />
los tripulantes en cubierta explotó un botellón de acetileno<br />
que causó un incendio. Estallaban las llamas y explotaban<br />
las lámparas de cubierta, las que se usaban por la<br />
noche para pescar el calamar. Si alguno de los pescadores<br />
miraba para arriba podía incrustársele un vidrio en el<br />
ojo, por eso Müller estaba tan preocupado, porque<br />
además de mantener a flote el barco tenía que asegurarse<br />
de que ninguno de los pescadores más novatos se<br />
tirase al agua, "porque cuando se prende fuego un barco<br />
es lo que primero muchos quieren hacer", aclara.<br />
Entre abril y mediados de octubre es la temporada de la<br />
pesca de langostino en la zona de aguas nacionales en<br />
las provincias de Santa Cruz y Chubut. En esa época, las<br />
temperaturas en alta mar son parecidas a las de tierra:<br />
debajo de los cero grados. El buque navega abriéndose<br />
camino por la masa de agua gélida del Atlántico Sur; a<br />
veces, si el clima acompaña corta la superficie del agua<br />
como si fuera una cuchilla, pero cuando hay temporal el<br />
océano parecería tragarse al barco sin siquiera hacer el<br />
esfuerzo de masticar. "El problema más grande, propio<br />
de la actividad e imposible de reparar, es el viento, donde<br />
el barco menos la vuelta carnero hace cualquier cosa",<br />
recuerda Müller. En un viaje en 2004 se enfrentó a<br />
un temporal de ocho días sin pausa donde se perdieron<br />
cuatro barcos de la flota de la empresa para la que él<br />
trabajaba -y con los barcos sus tripulantes-. "Después de<br />
que pasa el temporal te ponés a pensar que podrías<br />
haber muerto", reflexiona.<br />
Como oficial de barco, Müller ya goza de ciertos privilegios,<br />
de esos que llegan con una vida entera dedicada a<br />
un oficio: un camarote y un baño propios, y un comedor<br />
exclusivo para oficiales. Esto no es un detalle menor<br />
cuando algunos viajes de pesca duran meses. El viaje<br />
más largo de Müller fue una travesía de pesca de merluza<br />
negra por la Isla de los Estados que duró 87 días. La<br />
Isla de los Estados pertenece a la provincia de Tierra del<br />
Fuego, es la última manifestación del continente americano<br />
y ahí donde termina la cordillera de los Andes. Este<br />
archipiélago de cincuenta mil hectáreas y cuatro habitantes<br />
es un enclave natural de biodiversidad para ir en<br />
busca de la merluza negra, la especie más cara junto<br />
con las vieiras. Un kilo de merluza negra cuesta alrededor<br />
de 16 dólares el kilo, mientras que la merluza que<br />
comemos regularmente sale casi 2,5 dólares el kilo. En<br />
una pescadería de Palermo -después de recorrer varias,<br />
ya que esta especie se exporta casi en su totalidad- venden<br />
el kilo de merluza negra a 450 pesos.<br />
Alfredo Müller lleva más de la mitad de su vida arriba de<br />
un barco y explica la rutina de trabajo en el mar en<br />
horarios, en turnos, y en momentos delimitados permanentemente<br />
por el reloj, porque aunque en el océano el<br />
tiempo es eterno está perfectamente cronometrado. "Se<br />
come en dos horarios estrictos y como hay turnos de<br />
trabajo distintos y te levantás a destiempo, cada uno se<br />
hace su propio desayuno: café con leche y pan fresco",<br />
dice. Después de desayunar se va a la sala de máquinas<br />
y se queda las horas que dure el turno. Como un fantasma<br />
que parecería perseguirlo, Müller habla de las tormentas<br />
una y otra vez, y vuelve a señalar que lo más<br />
importante del oficio es tener "la cabeza bien fría y la<br />
sangre bien caliente, porque uno no puede fallar ni ponerse<br />
nervioso, no hay margen para el error".<br />
EL EPICENTRO DEL <strong>PESCA</strong>DO<br />
Revista Pesca Enero <strong>2015</strong> 57