La inversión en debate - Diseño Gráfico Ribeiro

ABC de la gestión
Características de un Proyecto
Es altamente complejo envolviendo
múltiples interdependencias
Se desarrolla progresivamente en
procesos interactivos
Desarrollado por personas
Participación de distintos sectores
Limitaciones de tiempo y recursos
Varios involucrados con diferentes
objetivos y expectativas
Restricciones organizacionales
Compite con otros proyectos
Compite con la tarea habitual
Ciclo de vida de un proyecto
Inicio
Planificación
Ejecución
Control
Cierre.
¿Qué es la gestión de proyectos
Es la aplicación de conocimientos,
competencias, herramientas y técnicas
a los distintos procesos interactivos
necesarios para alcanzar el objetivo
propuesto.
Es un proceso iterativo e interactivo
Es un proceso dinámico
Es una actividad de balanceo constante
de:
El alcance
El tiempo
El costo
La calidad
Los riesgos
La satisfacción de los interesados
o afectados por el proyecto
¿Por qué la gestión de proyectos es
importante
30% de todos los proyectos son
cancelados antes de que terminen
30% experimentan retrasos en el
cronograma
50% exceden los costos originales
12% finalizan en tiempo y con el
cumplimiento del presupuesto
Laura Gaidulewicz:
«Hay que estar preparado
para manejar la tensión y
los conflictos que implica
la gestión de un proyecto,
ya que se trata de una
situación muy diferente a
la operatoria habitual”.
CAP (Change Acelerant Process), sirven
al grupo como guías no tradicionales sobre
el modo de encarar cambios y están
muy ligadas a la coordinación, la comunicación,
motivación, liderazgo, manejo de
relaciones de poder, entre otros tópicos.
El Instituto Universitario IDEA fue entrenado
en el uso de estas herramientas
por equipos de la compañía y hoy muchas
de ellas son tomadas en cuenta en los
programas de formación para la gestión
de proyectos.
Los entendidos aseguran que para sanarse
en salud, las organizaciones se interesan en
serio por los proyectos que generan el
menor conflicto posible. Una propuesta
que presagie pugnas o peligros latentes,
hacia adentro o hacia afuera, se trata de
eliminar de la agenda. Algo que a menudo
adquiere una forma política relativamente
elegante: se deja morir.
Es que encarar diseños con
futuro incierto, ya sea por su
factura, objetivos o repercusiones,
puede traer aparejadas
heridas de difícil cicatrización
en los colaboradores
más valiosos. Gaidulewicz
explica que tras un proyecto
abortado o inconcluso, por
ejemplo, volver a entusiasmar
a la gente para llevar
adelante otra propuesta es
muy difícil y, en ocasiones,
hasta imposible.
Para mantener vivo el interés
de los actores, en el mundo
del management recomiendan
que el diseño del proyecto
contemple “éxitos tempranos”.
Es decir, el proceso de
la gestión necesita logros parciales
bien identificables, que
funcionen como estímulo
para que los afectados renueven
su compromiso y empeño
con la tarea. Se debe abonar
la idea de “estar en el camino.”
El manejo y cuidado de los recursos humanos
durante la administración de proyectos
es de capital importancia para llegar
a buen puerto. Una cuestión que también
roza la creación de una verdadera
cultura del cambio en la empresa. Gaidulewicz
explica que a medida que los proyectos
avanzan deben arraigarse en las
estructuras, porque implican cambios en
la organización que deben implantarse,
no sólo implementarse.
La planificación es otro aspecto al que no
siempre se asigna tiempo suficiente y suele
minimizarse su importancia respecto de la
ejecución. Por lo tanto, no se elaboran
bien los planes, que deben otorgar flexibilidad
al proceso y hasta se deben actualizar.
Hoy nadie recomendaría seguir una
planificación a rajatabla, contra viento y
marea.
Los aspectos a tener en cuenta son muchos
y la experiencia y evaluación internacionales
buenas aliadas para precisarlos. Las
organizaciones están compelidas a
acompañar la tendencia, porque los proyectos
bien manejados aceleran los tiempos
demandados para ejecutar cambios.
Algo muy apreciado por las compañías
en tiempos de novedades incesantes y de
podios ávidos de resultados contantes y
sonantes.
Adriana Lauro
noviembre de 2004 107