10.06.2015 Views

El Diario de Ana Frank

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

EL DIARIO DE ANA FRANK<br />

Querida Kitty:<br />

¡Ay!, otro pecado viene a agregarse a mi larga lista. Anoche,<br />

cuando ya estaba acostada, aguardando a papá que <strong>de</strong>bía rezar<br />

conmigo, antes <strong>de</strong> darme las buenas noches, mamá entró, se sentó<br />

en mi cama y me preguntó muy discretamente:<br />

-<strong>Ana</strong>, papá no pue<strong>de</strong> venir todavía, ¿quieres que recemos<br />

juntas esta vez?<br />

-No, mamá -contesté.<br />

Mamá se levantó, se <strong>de</strong>tuvo un momento junto a mi cama y<br />

luego se dirigió lentamente hacia la puerta, <strong>de</strong> don<strong>de</strong> se volvió <strong>de</strong><br />

pronto, y, el rostro <strong>de</strong>mudado por la aflicción, dijo:<br />

-Prefiero no enojarme. Al cariño no se le or<strong>de</strong>na.<br />

Las lágrimas resbalaban por sus mejillas, cuando cerró la<br />

puerta. Yo permanecí inmóvil, juzgándome odiosa por haberla<br />

rechazado tan brutalmente, aunque sabiendo que no podía<br />

respon<strong>de</strong>r <strong>de</strong> otra manera. Soy incapaz <strong>de</strong> hipocresías, así como<br />

<strong>de</strong> rezar con ella a disgusto. Lo que ella me había pedido era<br />

sencillamente imposible.<br />

Sentí lástima <strong>de</strong> mamá, la compa<strong>de</strong>cí <strong>de</strong> todo corazón, pues<br />

por primera vez en mi vida me daba cuenta <strong>de</strong> que mi frialdad no<br />

le era indiferente. La pesadumbre se leía en su cara cuando dijo<br />

que al cariño no se le or<strong>de</strong>na. La verdad duele. Sin embargo,<br />

mamá me ha rechazado -es también la verdad-, me ha abrumado<br />

siempre con sus observaciones intempestivas y sin tacto, y se ha<br />

mofado <strong>de</strong> cosas que yo me resisto a tomar en broma. Se sintió<br />

afectada en lo más íntimo al comprobar que todo amor entre<br />

nosotros ha <strong>de</strong>saparecido <strong>de</strong> veras, exactamente como me ocurría<br />

a mí al recibir cada día sus duras palabras.<br />

Mamá lloró largo rato y pasó una noche en blanco. Papá no<br />

me mira casi, y, cuando sus ojos se cruzan con los míos, puedo<br />

leer en ellos: «¿Cómo has podido ser tan mala, cómo te has<br />

atrevido a causar esa pena a tu madre?».<br />

<strong>El</strong>los esperan que yo me disculpe, pero es imposible<br />

disculparme en un caso semejante, porque he dicho una verdad<br />

que, tar<strong>de</strong> o temprano, mamá se verá obligada a escuchar <strong>de</strong> todos<br />

modos. Ya no necesito aparentar, pues me he vuelto indiferente<br />

a las lágrimas <strong>de</strong> mamá y a las miradas <strong>de</strong> papá; por primera vez,<br />

ambos se percatan <strong>de</strong> lo que siento constantemente. No puedo<br />

sino apiadarme <strong>de</strong> mamá, que se ve obligada a guardar su<br />

compostura ante mí. Por mi parte, he resuelto callarme y<br />

mantenerme fría; no retroce<strong>de</strong>ré ante ninguna verdad, sea la que<br />

fuere, pues cuanto más tar<strong>de</strong> en <strong>de</strong>cirla, más doloroso será oírla.<br />

Tuya,<br />

ANA<br />

Martes 27 <strong>de</strong> abril <strong>de</strong> 1943<br />

Querida Kitty:<br />

Las disputas hacen retumbar toda la casa. Mamá contra mí,<br />

los Van Daan contra papá, la señora contra mamá. Todo el mundo<br />

está encolerizado. ¿Nos divertimos, eh? Los innumerables pecados<br />

<strong>de</strong> <strong>Ana</strong> han sido puestos <strong>de</strong> nuevo sobre el tapete en toda su<br />

amplitud.<br />

<strong>El</strong> señor Vossen está en el hospital. <strong>El</strong> señor Koophuis se ha<br />

restablecido más pronto <strong>de</strong> lo que se creía, pues, por esta vez la<br />

hemorragia pudo combatirse fácilmente. Nos contó que el<br />

Registro Civil fue tan bien tratado por los bomberos, que no<br />

solamente extinguieron las llamas, sino que, a<strong>de</strong>más, <strong>de</strong>jaron todo<br />

el interior bajo agua. Eso me alegra.<br />

<strong>El</strong> Carton Hotel está en ruinas; dos aviones ingleses, con un<br />

pesado cargamento <strong>de</strong> bombas incendiarias, atacaron el<br />

Offiziersheim* pegando fuego a todo el inmueble <strong>de</strong> la esquina.<br />

Se acabó el <strong>de</strong>scanso por la noche; tengo unas ojeras enormes<br />

por falta <strong>de</strong> sueño. Nuestra alimentación es abominable.<br />

Desayuno: pan duro y sucedáneo <strong>de</strong> café. Comida: espinaca o<br />

© Pehuén Editores, 2001.<br />

)45(

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!