Infrorme 2005-2006 - CONAVIM

hubo aquí fue femenina; ¿ya fuiste a ver esa finca confiscada al narco contodo y su zoológico particular, que con fondos de la FECHAC 6 opera comoun centro de desarrollo para niños?; ¿sabías que las maquiladoras donaron39 patrullas a la ciudad en la administración del ‘Güero Delgado’ 7 ?; ¿y quehace quince años un grupo de creadores y artistas se encadenó a un teatro porla zona del PRONAF 8 que querían tirar? El teatro allí sigue… Otros llevanplaneando el Plan Estratégico para Ciudad Juárez desde hace varios años.Ojalá… dicen que quieren rescatar la ribera del Río Bravo; imagínate, unparque lineal de 34 kilómetros…Y así, con la suma de voces plurales, propias de esa frontera, una vainvolucrándose, comenzando a pertenecer, a conocer y mirar, a matizar, aarmar el complejo rompecabezas de una comunidad que fue refugio de larepública trashumante: el Presidente Juárez, que resguardó en once carretaslos archivos de la Nación, aquí vivió por varios meses.Algunas imágenes, sin embargo, causan escozor; nos plantean preguntas dedifícil respuesta a todos los que ocupamos algún cargo municipal, estatal ofederal, y nos acicatean para no permitir que un estado de cosas seperpetúe. “Es cierto, no soy de aquí. No era, pero ya voy siendo”, podríaresponder. El modo más honroso con que se refirió a mí el gobernador JoséReyes Baeza Terrazas fue cuando me llamó en un acto público “hijaadoptiva de Chihuahua”, o “chihuahuense por adopción”, o algo similar.Echo de menos no haber conversado más con él y con su esposa Claudia enun plano más sabroso, desparpajado. Hay en él un entusiasmo que nodeclina en atender a Ciudad Juárez. Y con “Teto”, el alcalde del municipiode Juárez, Héctor Murguía Lardizábal, no obstante nuestras ya conocidasopiniones divergentes en algunos temas, desde el principio nos ha unidouna línea de comunicación franca y a ratos cercana a la simpatía. Discutimos,pero permanece una veta de humor, un guiño, una sin duda delicadaintervención secreta de Patricia Holguín, su esposa, y nunca nos hemospeleado. Es más, de cada discusión, llevada en buena lid, salimos másconvencidos de que hay que tender puentes.Con Patricio Martínez García, ex gobernador, nos salvó el afecto común asus viejos maestros jesuitas en el Regional de Chihuahua. En algunasituación ríspida en torno al tema de la tortura, unas frases de El Coloso deMarusi, de Henry Miller, que yo llevaba, salvaron la tensión del momento.Con Jesús Alfredo Delgado y su esposa Elba mantuve siempre un tratoformal no exento de calidez y cortesía que mucho les agradezco.A estos nombres y rostros se suman muchos otros de sus colaboradores yde personas que desde distintos liderazgos de la sociedad civil son ya partede mis referencias en estos casi tres años. Pero los más cercanos y concretoshan sido los de las mamás de las víctimas y los de quienes les han dedicadoaños de búsqueda en la academia y en distintas organizaciones paraencontrar para ellas verdad y justicia. No sólo de lo grato hay que hablar.Porque si olvidamos una parte de la verdad, hacemos que las palabras dejende servir a la verdad. También hay que hablar de esas imágenes que nosdeben animar a movernos, conmovernos, asumir la parte que nos toca.6 Fundación del Empresariado Chihuahuense,A.C.7 Jesús Alfredo Delgado, ex alcalde de Juárez.8 Programa Nacional FronterizoTercer Informe de Gestión185