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Estudio Económico de América Latina y el Caribe 2015: desafíos para impulsar el ciclo de inversión con miras a reactivar el crecimiento

En su edición 2015, el Estudio Económico de América Latina y el Caribe consta de tres partes. En la primera se resume el desempeño de la economía regional durante 2014 y se analizan la evolución durante el primer semestre de 2015 y las perspectivas para el resto del año. En la segunda parte se analiza la dinámica de la inversión en los países de América Latina y el Caribe, su relación con el ciclo económico, el papel de la inversión pública, las carencias en infraestructura y los desafíos de financiamiento de la inversión privada. En la página web de la CEPAL (http://www.cepal.org/es/publicaciones/38713-estudio-economico-de-america...) está disponible la tercera parte, que contiene las notas referentes al desempeño económico de los países de América Latina y el Caribe durante 2014 y el primer semestre de 2015, así como los respectivos anexos estadísticos, en que se muestra la evolución de los principales indicadores económicos de los países de la región. La fecha límite de actualización de la información estadística de la presente publicación ha sido el 30 de junio de 2015.

En su edición 2015, el Estudio Económico de América Latina y el Caribe consta de tres partes. En la primera se resume el desempeño de la economía regional durante 2014 y se analizan la evolución durante el primer semestre de 2015 y las perspectivas para el resto del año. En la segunda parte se analiza la dinámica de la inversión en los países de América Latina y el Caribe, su relación con el ciclo económico, el papel de la inversión pública, las carencias en infraestructura y los desafíos de financiamiento de la inversión privada.
En la página web de la CEPAL (http://www.cepal.org/es/publicaciones/38713-estudio-economico-de-america...) está disponible la tercera parte, que contiene las notas referentes al desempeño económico de los países de América Latina y el Caribe durante 2014 y el primer semestre de 2015, así como los respectivos anexos estadísticos, en que se muestra la evolución de los principales indicadores económicos
de los países de la región. La fecha límite de actualización de la información estadística de la presente publicación ha sido el 30 de junio de 2015.

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<strong>Estudio</strong> <strong>E<strong>con</strong>ómico</strong> <strong>de</strong> <strong>América</strong> <strong>Latina</strong> y <strong>el</strong> <strong>Caribe</strong> • <strong>2015</strong><br />

D<strong>el</strong>ong y Summers (2012) procuran evaluar bajo qué <strong>con</strong>diciones<br />

un aumento <strong>de</strong> la <strong>inversión</strong> pública se autofinancia. A corto plazo,<br />

una ampliación <strong>de</strong> esta genera incrementos <strong>de</strong>l PIB a través <strong>de</strong>l<br />

multiplicador fiscal <strong>de</strong> gasto. A su vez, <strong>de</strong>pendiendo <strong>de</strong>l valor<br />

<strong>de</strong> este multiplicador y <strong>de</strong> la <strong>el</strong>asticidad <strong>de</strong> los impuestos <strong>con</strong><br />

respecto al ingreso, la r<strong>el</strong>ación entre la <strong>de</strong>uda pública y <strong>el</strong> PIB<br />

pue<strong>de</strong> reducirse. En términos formales, un aumento (anual) <strong>de</strong><br />

la <strong>inversión</strong> pública como porcentaje <strong>de</strong>l PIB (∆i), financiado <strong>con</strong><br />

<strong>de</strong>uda, modifica la r<strong>el</strong>ación entre la <strong>de</strong>uda y <strong>el</strong> PIB (∆d):<br />

∆d = (1 - ατ)∆i<br />

don<strong>de</strong> α es <strong>el</strong> multiplicador fiscal y τ es la tasa tributaria<br />

marginal o semi<strong>el</strong>asticidad tributaria. Los autores citados efectúan<br />

una metaevaluación <strong>de</strong>l valor <strong>de</strong>l multiplicador fiscal <strong>para</strong> países<br />

<strong>de</strong>sarrollados, que va <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 0,5 en épocas <strong>de</strong> bonanza hasta<br />

<strong>el</strong> valor <strong>de</strong> 2,5 en períodos recesivos (cuando la e<strong>con</strong>omía<br />

se sitúa por <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> su potencial) obtenido por Auerbach y<br />

Gorodnichenko (2012).<br />

Algunos autores argumentan que estos valores serían<br />

sensiblemente menores en países en <strong>de</strong>sarrollo a ; pero en<br />

Recuadro III.1<br />

Inversión pública, <strong>crecimiento</strong> y espacio fiscal<br />

los (pocos) estudios referidos a países <strong>de</strong> <strong>América</strong> <strong>Latina</strong>, <strong>el</strong><br />

multiplicador fiscal oscila en torno a 2 <strong>para</strong> la <strong>inversión</strong> pública.<br />

Si se toma dicho valor, asumiendo una tasa tributaria marginal<br />

<strong>de</strong> 0,25, se obtiene que la <strong>de</strong>uda pública b como porcentaje <strong>de</strong>l<br />

PIB aumentaría ex post cerca <strong>de</strong> 0,5 puntos. Es <strong>de</strong>cir, en <strong>el</strong><br />

primer año, la <strong>inversión</strong> financiada por <strong>de</strong>uda generaría un déficit<br />

equivalente al 50% <strong>de</strong>l gasto inicial. El punto <strong>de</strong> inflexión, en <strong>el</strong><br />

que la <strong>inversión</strong> se financiaría sola en <strong>el</strong> primer año, se obtiene<br />

cuando <strong>el</strong> multiplicador fiscal y la semi<strong>el</strong>asticidad tributaria<br />

alcanzan valores <strong>de</strong> 2,5 y 0,4, respectivamente.<br />

A lo largo <strong>de</strong>l tiempo, <strong>el</strong> aumento <strong>de</strong> la <strong>inversión</strong> pública<br />

amplía también <strong>el</strong> producto potencial (y no solo <strong>el</strong> efectivo), lo que<br />

genera divi<strong>de</strong>ndos tributarios. Como se muestra en FMI (2014a), si<br />

los multiplicadores fiscales y la <strong>el</strong>asticidad <strong>de</strong>l producto potencial<br />

<strong>con</strong> respecto al capital público son <strong>el</strong>evados, un aumento <strong>de</strong> la<br />

<strong>inversión</strong> pública pue<strong>de</strong> autofinanciarse a mediano plazo. Queda<br />

claro que una combinación benigna <strong>de</strong> parámetros es factible y<br />

pue<strong>de</strong> dar lugar a una trayectoria ascen<strong>de</strong>nte <strong>de</strong>l potencial <strong>de</strong><br />

<strong>crecimiento</strong> y <strong>de</strong>scen<strong>de</strong>nte en <strong>el</strong> caso <strong>de</strong> la r<strong>el</strong>ación entre la<br />

<strong>de</strong>uda pública y <strong>el</strong> PIB.<br />

Fuente: Comisión E<strong>con</strong>ómica <strong>para</strong> <strong>América</strong> <strong>Latina</strong> y <strong>el</strong> <strong>Caribe</strong> (CEPAL).<br />

a<br />

Resulta intuitivo pensar que, en e<strong>con</strong>omías pequeñas y abiertas, buena parte <strong>de</strong> la mayor <strong>de</strong>manda se filtraría a las importaciones, dando lugar a déficit gem<strong>el</strong>os<br />

y menguando una eventual reactivación. Pero <strong>el</strong> efecto multiplicador <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong>l tipo <strong>de</strong> estímulo que se realiza; existe un cierto <strong>con</strong>senso respecto <strong>de</strong> que<br />

los mayores efectos se obtienen <strong>con</strong> <strong>inversión</strong> pública, pues esta supone un alza inmediata <strong>de</strong> la <strong>de</strong>manda agregada, <strong>con</strong> poco <strong>con</strong>tenido <strong>de</strong> importaciones y<br />

<strong>con</strong> una generación directa e indirecta <strong>de</strong> empleo formal.<br />

b<br />

Véase, por ejemplo, Sánchez y Galindo (2013) sobre <strong>el</strong> caso <strong>de</strong>l Perú, y González y Lozano (2012) sobre Colombia.<br />

La subutilización <strong>de</strong> la capacidad instalada hace que persista este escenario, por al menos tres razones: un débil<br />

niv<strong>el</strong> <strong>de</strong> actividad hoy tien<strong>de</strong> a alimentar expectativas <strong>de</strong> un débil niv<strong>el</strong> <strong>de</strong> actividad mañana; un bajo niv<strong>el</strong> <strong>de</strong> <strong>inversión</strong><br />

hoy reduce <strong>el</strong> potencial <strong>de</strong> oferta <strong>de</strong> mañana, y un débil niv<strong>el</strong> <strong>de</strong> actividad hoy tien<strong>de</strong> a empeorar la situación financiera<br />

<strong>de</strong> mañana, pues las rigi<strong>de</strong>ces <strong>de</strong> los precios pue<strong>de</strong>n impedir la recuperación <strong>de</strong> los márgenes <strong>de</strong> ganancia.<br />

En este entorno, entonces, la vía natural <strong>para</strong> respon<strong>de</strong>r a episodios <strong>de</strong> <strong>de</strong>sac<strong>el</strong>eración son las políticas sostenibles<br />

<strong>de</strong> estímulo <strong>de</strong> la <strong>de</strong>manda, que <strong>de</strong>ben <strong>con</strong>centrarse en inversiones que tengan rendimientos sociales a<strong>de</strong>cuados,<br />

como vivienda social, renovación urbana, transporte, energía y muchos otros. El hecho <strong>de</strong> promover estas inversiones<br />

en períodos en que otras inversiones privadas se han reducido transitoriamente es una manera eficaz <strong>de</strong> atenuar la<br />

volatilidad, la <strong>de</strong>bilidad persistente <strong>de</strong> la <strong>de</strong>manda global y sus <strong>de</strong>vastadores efectos sobre la oferta agregada. En<br />

presencia <strong>de</strong> histéresis o <strong>de</strong> persistencia <strong>de</strong> subutilización <strong>de</strong> capacida<strong>de</strong>s, un impulso fiscal bajo la forma <strong>de</strong> bienes<br />

<strong>de</strong> capital pue<strong>de</strong> compensar <strong>con</strong> creces su costo inicial si las tasas <strong>de</strong> interés son razonablemente bajas.<br />

Por supuesto, los efectos multiplicadores <strong>de</strong>pen<strong>de</strong>n <strong>de</strong> las <strong>con</strong>diciones <strong>de</strong> financiamiento y, críticamente,<br />

<strong>de</strong>l diferencial entre la tasa <strong>de</strong> interés real <strong>de</strong> la <strong>de</strong>uda y la tasa <strong>de</strong> <strong>crecimiento</strong> <strong>de</strong> la e<strong>con</strong>omía. En promedio,<br />

<strong>de</strong>s<strong>de</strong> 2010 este diferencial se ha situado por <strong>de</strong>bajo <strong>de</strong> 2 puntos porcentuales en 13 <strong>de</strong> 19 países <strong>de</strong> la región,<br />

lo que, <strong>de</strong> mantenerse, permitiría una trayectoria ampliamente sostenible <strong>de</strong> la <strong>de</strong>uda pública. Por <strong>el</strong>lo, se<br />

<strong>de</strong>ben aprovechar las <strong>con</strong>diciones ventajosas <strong>de</strong> acceso a los mercados <strong>de</strong> financiamiento. Cabe <strong>de</strong>stacar que<br />

en algunos países este diferencial es ampliamente negativo, en particular en <strong>el</strong> caso <strong>de</strong>l Brasil, que muestra<br />

un diferencial promedio <strong>de</strong> 5,8 puntos porcentuales (véase <strong>el</strong> cálculo <strong>de</strong> estos indicadores en CEPAL, <strong>2015</strong>).<br />

Este diferencial ha sido también muy <strong>el</strong>evado en <strong>el</strong> <strong>Caribe</strong> <strong>de</strong>s<strong>de</strong> 2009, <strong>con</strong> promedios superiores a 6 puntos<br />

porcentuales en Barbados y Jamaica. En <strong>con</strong>diciones <strong>de</strong> bajo <strong>crecimiento</strong> y tasas <strong>de</strong> interés <strong>el</strong>evadas, la propia<br />

dinámica <strong>de</strong> la <strong>de</strong>uda pública da lugar a una in<strong>con</strong>trarrestable bola <strong>de</strong> nieve, por lo que mejorar este diferencial<br />

resulta fundamental.<br />

Para enfrentar la <strong>de</strong>sac<strong>el</strong>eración <strong>de</strong> 2014-<strong>2015</strong>, los países <strong>de</strong> la región en que <strong>el</strong> en<strong>de</strong>udamiento público es bajo<br />

(y que, por tanto, tienen acceso a crédito barato) han recurrido ampliamente a las políticas fiscales. En cambio, en<br />

los países en que <strong>el</strong> niv<strong>el</strong> <strong>de</strong> la <strong>de</strong>uda pública es <strong>el</strong>evado o don<strong>de</strong> existen dificulta<strong>de</strong>s <strong>de</strong> financiamiento a causa <strong>de</strong>l<br />

<strong>de</strong>terioro <strong>de</strong> las cuentas públicas, se han anunciado recortes presupuestarios. Al <strong>con</strong>templar medidas <strong>de</strong> <strong>con</strong>tención<br />

<strong>de</strong>l gasto, será preciso proteger la <strong>inversión</strong> y evitar círculos viciosos causados por ajustes fiscales excesivos que<br />

afectarían <strong>el</strong> <strong>crecimiento</strong>, redundarían en una merma <strong>de</strong> los recursos tributarios y, en última instancia, provocarían<br />

una agudización <strong>de</strong>l déficit y un aumento <strong>de</strong> la <strong>de</strong>uda pública.<br />

Capítulo III<br />

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