DU ODÉCIMA EDICIÓN

da esa «lucha de clases», en las que según Lenin, para alcanzar la
armonía dentro de la sociedad, se debía exterminar un grupo
específico de clases sociales determinadas.
¿El fin justifica los medios?
En la primavera del año 1933, estaban muriendo más de 32 mil
personas al día, la mitad de ellas eran niños (en su mayoría eran
asesinados si iban a los campos de trigo a buscar granos, a los que los
francotiradores de la KGB soviética les disparaban). En septiembre de
1932, Lenin le escribe a su camarada Lazar Kaganovich (ateo de origen
judío) que se debían tomar medidas severas para evitar perder Ucrania
debido a su situación económica. En ciertas reuniones privadas del
gabinete de Stalin, se decidió una de las acciones más terroríficas de
la historia: en esos años se acabaron todas las reservas de alimentos
en Ucrania y se hizo un cerco geográfico sobre este país, en las que
no entraba ni salía nada ni nadie. Al principio nadie falleció, ya que
las almacenes de granos y vegetales restantes les permitieron
sobrevivir al cerco; sin embargo, una de las acciones que llevó a este
terrible acontecimiento fue la confiscación de los víveres por parte de
Stalin y de su gabinete, con lo que condenó a la muerte a la población
rural campesina ucraniana. En una entrevista a un sobreviviente del
Holodomor, Nikolai Melnik menciona la manera de cómo se llevaba
estas confiscaciones: «Papas, remolachas, coles… se llevaban barriles
llenos de coles saladas; se llevaron todos los comestibles».
En otra entrevista, esta vez a un académico de
la Universidad de Kiev, Volodymir Sergiychuk,
este menciona cómo era la acción legal de la
confiscación de víveres a la población rural que
dio pie a la hambruna conocida como Holodomor.
«Cuando se llevaron la comida, prohibieron a los
campesinos buscarla al otro lado, comprarla,
ganarla o llevársela».
comunes. Muchos de los que sepultaban aún estaban vivos, puesto que
los soldados recibían por salario 200 gramos de pan por cada cadáver
que recogían. María Zaguts, otra de los sobrevivientes. menciona de
manera desgarradora cómo las unidades de la KGB llevaban los
supuestos cadáveres: «Enterraban a las personas… que aún estaban
vivas… la tierra se movía».
Al igual que los nazis cuando asesinaban a los judíos y romaníes, y se
robaban el oro de las víctimas, lo fundían y lo depositaban en bancos
suizos, los comunistas soviéticos sustrajeron el grano y los víveres de
los ucranianos; pero, en vez de depositarlo en la banca soviética o rusa,
lo exportaron a los países occidentales, incluyendo a los países aliados
del nacionalsocialismo alemán. Aun así, miles de toneladas de grano y
de bienes comestibles fueron vendidos a países occidentales. Los
medios de comunicación de Europa y Estados Unidos reseñaban la
terrible magnitud de la masacre artificial ucraniana a manos de Stalin;
pero, ninguna nación occidental hizo nada para ayudarlos, tal como las
naciones cristianas se hicieron oídos sordos al genocidio armenio antos
antes. Así, la tierra de Ucrania, conocida anteriormente como «el
granero de Europa occidental y oriental», estaba siendo devastada y
destruida sin escala precedente, la organización para el estudio del
Holodomor
en Connecticut, EE UU, analizó de esta manera en qué
consistió el hecho (es una traducción al español del original en inglés).
«Fue diseñado por Stalin y sus verdugos para enseñar a los agricultores
independientes de Ucrania "una lección que no olvidarían" por resistirse
a la colectivización, lo que significaba renunciar
a sus tierras y ganado para dárselos al Estado.
[Ucrania estaba entonces bajo la dominación
soviética]. Por otra parte, que estaba destinado
a tratar "un duro golpe" a cualquier aspiraciones
nacionales del pueblo ucraniano, el 80 por
ciento de los cuales eran campesinos».
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Otros genocidios
Es a partir de las acciones mencionadas en las
que se comienza a perpetrarse la matanza por
medio de la hambruna contra la población civil
de nacionalidad ucraniana. Muchos morían en
sus casas de manera tortuosa y lenta, incluso
los niños lloraban desesperados por comida y
muchos iban a los campos de trigo vigilados por
los militares soviéticos a buscar un poco de
grano, muchos de ellos eran asesinados por los
mismos, incluso unidades de la KGB, como se dijo anteriormente;
allanaban las casas de la población civil ucraniana para buscar los
cadáveres de los que morían por hambre y los enterraban en fosas
La diáspora ucraniana ha estado denunciando el
genocidio propiciado por Stalin. Cartel
invitacional para una conferencia sobre el tema
(a la izquierda). Abajo, fotografías de niños
ucranianos moribundos por el hambre y el frío.