Tokio en tres platillos

Puros
Humo que sugiere
Al saber que visitaremos el hotel
St. Regis, lujo, comodidad y
grandeza son algunas ideas que nos vienen
a la cabeza. El pensamiento dicta ir a tomar
una copa en el King Cole Bar, pero hemos
escuchado sobre la fuerte presencia que los
puros Davidoff tienen ahí y eso nos hace
estar seguros que, en esta visita, habrá
grandes sorpresas.
Desde el lobby principal del hotel, subimos
al tercer piso y doblamos a la derecha
para llegar a una hermosa terraza con
una inigualable panorámica de la ciudad
de México donde, en un primer vistazo,
distinguimos el Castillo de Chapultepec,
el Ángel de la Independencia, la Estela de
Luz y la Diana; siendo ésta nuestra primera
sorpresa de la noche. Sí, este exclusivo
mirador pertenece al King Cole Bar, donde se
encuentra el Lounge Davidoff, el único en
su tipo en la Ciudad de México; lo cual viene
a ser nuestro segundo beneficio; pues nunca
imaginamos un lugar tan bello y exclusivo.
Por Marlene Mizrahi
El King Cole Bar cuenta con área
interior y una acogedora terraza. Nos
decidimos por el exterior, pues venimos con
la idea de quedarnos un largo rato aquí, en
compañía de un buen puro.
El sommelier se acerca a nosotros y,
como es debido, pedimos una bebida. Éstas
arriban rápidamente, pero es cuando nos
llega el agradable aroma de un puro bien
conservado, que decidimos preguntar por la
selección de la casa.
Después de la señal, el sommelier se
acerca a nosotros y, para nuestra sorpresa,
no viene sólo, sino acompañado de un
carrito. La incertidumbre crece mientras éste
se acerca, y una vez próximo a nosotros,
nos asomamos sobre el cristal de la caja de
madera para dar cuenta de la gran colección
de puros que el Lounge Davidoff - St. Regis
ofrece a sus visitantes. El carrito, como la
inigualable y variada selección, perfilan como
la tercera sorpresa de la noche.
Estámos completamente
indecisos sobré cuál de todas las
opciones elegir –aunque muy seguros
de que nuestra preferencia será
un Davidoff –. Es aquí cuando el
sommelier, después de una atinada
lectura de cada uno de nosotros y del
momento que esperamos compartir,
comienza a recomendar aquellos
de larga duración. Cabe mencionar
que el tiempo no es obstáculo, pues
aquí se encuentra ocasión para todo;
aún si solo cuentas con 15 minutos
para un “Entreacto Davidoff” –
aquellos puros que se consumen más
rápidamente –.
Nos damos cuenta que la
selección de un puro es
mucho más que azar, algo
muy parecido a la preferencia
de un buen vino; pues la
disyuntiva por tamaño, lugar
de origen, tipo de tabaco,
entre otras características,
difieren a cada uno de los
cigarros puros; haciéndolos
únicos e irrepetibles para
atinar como el maridaje
perfecto de nuestro aperitivo,
bebida, humor y tiempo
disponible.
La importancia de una buena
elección reluce aún más cuando
se nos hace entrega de un ipad,
donde se muestra un menú visual
con los detalles de cada puro
que se encuentra en la colección
del Lounge Davidoff - St. Regis.
Al tomarlo, vemos las opciones
principales: Precio, Origen (República
Dominicana, Nicaragua, Honduras,
México y Cuba) y Formato. Una
vez seleccionado el nombre de un
puro, el ipad abre una pantalla con
la descripción completa del elegido,
donde se indica su origen, historia,
tamaño, precio y recomendación de
maridaje. Cabe mencionar que éste
exclusivo y único menú se actualiza
en línea, por lo que siempre muestra
lo más nuevo que la cava del Lounge
Davidoff - St. Regis recibe. El ipad
sería la cuarta sorpresa de la noche
pero ¿alguién sigue contando?
Después de tantos asombros,
hemos perdido la enumeración, pero
tenemos un presentimiento que
habrá una mayor sorpresa a todas las
anteriores.
Al fijarnos en la mesa de
donde nos llegó ese primer aroma
de tabaco vemos que, a su lado, un
hombre mira una caja distinta a la
que se nos mostró a nosotros, algo
que perfila como un humidor propio.
Al preguntarle al sommelier sobre
éste, él nos sonríe y nos dice: “¿me
acompañan? Creo que les gustará
conocer algo”.
74 www.luxeandclass.com
www.luxeandclass.com 75