La gritos del Fénix

Un urdido farsa y hecho con buenas intenciones porque seguramente las personas
no entendían y no creían lo que decían, y sobre lo que querían para advertir a ellos,
sino como confirmando el dicho se puede hacer mucho daño con la mejor de las
intenciones, ya que podemos ver que farsa generado, sólo confirma el dicho.
John, que probablemente fue informado de la farsa, se
muestra en su lugar en mi hombre de la kipá roja que
Miguel Ángel pintó a mirar a María desconcertado.
(Giovanni, que la segunda carta citada en el Evangelio,
sabía claramente quién era realmente María, de hecho,
en la segunda carta, el sacerdote se dirige a la Iglesia
como afirma, sino a María. Y 'María, llamó elegido, el
destinatario de la carta,
no a la Iglesia (http://www.perfettaletizia.it/bibbia/2giovanni.html).
Observando la obra de Miguel Ángel, naci en mí otra interesante porque me di
cuenta de que el artista, en el lado donde está la mujer con el brazo blanco y el
color de la carrocería, poner unos cuantos hombres y muchas mujeres, mientras
que el otro donde no es el gigante con el pelo rojo, que ha puesto a muchos
hombres y algunas mujeres.