La gritos del Fénix

Sólo vívida imaginación de los investigadores? Tal vez, pero cierto es que lo que
antes era la montaña volcán está vacío por dentro y no se instaló una base militar
que nadie, incluso hoy en día, usted puede acercarse. Además, en los alrededores,
desde hace unos años se le hizo una importante excavación de la tierra para abrir
una nueva carretera, se registran extraño magnetismo que nadie puede averiguar el
origen. Magnetismo que puedan ser causados por esa nave lugar (tal vez movido
por un nucleares no necesariamente extraterrestre) todavía no está completamente
extinguido.
Una visión general de Monte Cavo
Una visión de la forma sagrada
Hay otra hipótesis de que, sin embargo, podemos decir: en esa cantera de montaña
podría artefacto para entrar en esa línea imaginaria que une los dos polos terrestres
alrededor de la cual la Tierra completa su movimiento de rotación de la inclinación
que varía cíclicamente entre 22,5 ° y 24.5 ° en un período de 41.000 años. Y eso
explicaría el interés militar hacia la montaña.
También creo que el sitio ha sido identificado por los expertos militares que
estudian las escrituras antiguas en busca de pistas. Pistas que, en mi opinión, en
este caso, estaban contenidos en la Divina Comedia de Dante.
El poeta, una vez dentro de la montaña puede haber encontrado algo, tal vez sólo
un poco plana, o tal vez una nave espacial de una sociedad terrestre anterior
evolucionado. Y si lo que escribió en la Divina Comedia no se deriva de sus
visiones y su no eran sólo fantasías, a través del conocimiento que tenía, contenida
en el texto de los tres mundos de código y sus diversos niveles y la información
velada en donde se encuentra el sitio que había descubierto.
Digo esto porque creo también que cuando el poeta menciona la oscuridad del
bosque, hablando de cómo se veía entonces lo que era el bosque sagrado de la
Diana de los Castelli Romani, que no conoce el alcance exacto pasado. E
investigando, he aprendido que una vez en la zona fueron también los tres ríos de
los cuales Dante escribió en su obra. Hoy esos ríos sólo recuerdan el Emisario.
Incluso que prácticamente