mi-manual-del-bebe-vers-5
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Nutrición bebé<br />
Problemas<br />
de apetito<br />
¡Doctor, este niño no come!<br />
Esta es una situación bastante frecuente<br />
en la consulta pediátrica. Cuando<br />
los doctores oyen esta queja y se dan<br />
a la tarea de investigar cuáles son los<br />
contenidos de la dieta, la mayoría de<br />
las veces encuentran lo que se puede<br />
llamar un desorden en la alimentación,<br />
acompañado de una gran indisciplina<br />
en el proceso alimenticio.<br />
Así, el niño toma decisiones no siempre<br />
muy acertadas y prefiere comer lo<br />
que más le gusta y, claro, a la hora que él<br />
lo decide. Esto para los padres y por lo general<br />
para abuelas, tías y toda una corte<br />
de personas que intervienen en este proceso,<br />
resulta desastroso y preocupante.<br />
Tenemos que aprender que la alimentación<br />
es una función mas a cumplir durante<br />
el día y no la única función, de tal<br />
manera que la obsesión de todas las personas<br />
involucradas en alimentar al niño<br />
ter<strong>mi</strong>na por generar un muy mal ambiente<br />
en las horas de co<strong>mi</strong>das, lo cual<br />
va creando en el pequeño una a<strong>vers</strong>ión,<br />
un temor horrible con esas horas y ese<br />
tema, cuya consecuencia siempre ter<strong>mi</strong>na<br />
siendo un mayor rechazo.<br />
Siempre es aconsejable para los<br />
padres —y también los abuelos— que<br />
entiendan que la obligación de ellos<br />
llega hasta cuando la co<strong>mi</strong>da está servida<br />
—en la mesa o donde se acostumbra<br />
que el niño coma y ojalá que sea<br />
al tiempo con el resto de la fa<strong>mi</strong>lia en<br />
cuanto ello es posible— y que deben<br />
dejar que de ahí en a<strong>del</strong>ante sea el<br />
niño quien asuma su responsabilidad.<br />
Los adultos no forzamos, no amenazamos,<br />
no castigamos, ni damos pre<strong>mi</strong>os<br />
a los niños por comer. Si el niño come,<br />
¡qué maravilla! Y si no come, el problema<br />
es de él. En algún momento sentirá<br />
hambre y tendrá que hacerlo.<br />
La recomendación para todos los<br />
adultos que alimentan niños es que solo<br />
organicen desayuno, media mañana,<br />
almuerzo, onces y co<strong>mi</strong>da —y lo que a<br />
esas horas se acostumbra en la casa,<br />
organizado y dispuesto por la mamá, o<br />
por quien esté a cargo de esa labor—.<br />
Además no se debe ofrecer nada diferente<br />
a ninguna otra hora. Es un proceso<br />
de educación que debemos cumplir<br />
con el ejemplo, con mucho cariño y con<br />
mucha firmeza, y todos los involucrados<br />
completamente de acuerdo en el tema.<br />
165