rev17
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
74 Año 5 - Nro. 17 [Diciembre 2011]<br />
Fig 19: El terreno triangular ocupado por el Instituto Roffo.<br />
Fig 18: Eufemio Uballes (1848- 1933)<br />
Fig. 20. Plano del Instituto de Medicina Experimental<br />
circa 1927/28. Los cuatro edificios fundacionales.<br />
Fig 21: El arquitecto Gino Aloisi (1864-1924)<br />
sor de Ciencias Naturales en la Escuela Nacional<br />
de Comercio (cargo que ocupa hasta<br />
1932) y profesor libre de Anatomía Patológica<br />
del Colegio Médico Argentino y del<br />
Centro de Estudiantes de Medicina (1912 -<br />
1918). Durante este período, también dicta<br />
10 cursos (de los cuales 5 son sobre cáncer)<br />
y desarrolla una prolífica actividad de<br />
investigación que lo lleva a publicar 44 trabajos<br />
científicos (de los cuales tres salen en<br />
revistas extranjeras y uno -“Nueva contribución<br />
al estudio del cáncer experimental”-<br />
recibe, en 1916, la medalla de oro de la<br />
Academia de Medicina -Premio Centenario<br />
de la Independencia Argentina al mejor<br />
trabajo inédito-). A su vez, en 1915, el entonces<br />
director del Departamento Nacional<br />
de Higiene, Dr. José Penna (Fig. 15) crea el<br />
Instituto Bacteriológico Nacional (hoy Instituto<br />
Malbrán) y mientras designa para su<br />
dirección al prestigioso bacteriólogo berlinés<br />
Rudolf Krauss, nombra a Roffo Jefe de<br />
la Sección Cáncer.<br />
Finalmente, una vez concluida la guerra,<br />
nuestro médico es comisionado por la Academia<br />
de Medicina para estudiar la organización<br />
de los institutos de cáncer experimental<br />
en Francia, Inglaterra y Alemania<br />
(un dato interesante es que la Academia<br />
gestionó y consiguió que Roffo continuara<br />
percibiendo su sueldo como miembro del<br />
Instituto Bacteriológico Nacional durante<br />
su ausencia). Su designación como delegado<br />
estaba en consonancia con el nuevo impulso<br />
que había cobrado la construcción del<br />
Instituto de Medicina Experimental y demuestra<br />
que, en 1919, él era considerado el<br />
candidato natural para ocuparse de su organización<br />
y dirección.<br />
Si bien el plan de viaje, como se señala en<br />
su solicitud de licencia, incluía una visita<br />
los Estados Unidos, su estadía en el país<br />
del norte nunca se concretó; por lo que, en<br />
1921, luego de terminar su itinerario por<br />
el Viejo Mundo, publicó en el Boletín de la<br />
Academia de Medicina el “Informe sobre los<br />
institutos del cáncer en Europa”. En los últimos<br />
tramos de este compendio de experiencias,<br />
Roffo dice textualmente: “Deseoso<br />
de cooperar con la más pronta realización<br />
del Instituto del Cáncer de la Academia de Medicina<br />
(…) ofrezco a tal fin mi desinteresado<br />
concurso, hasta tanto el honorable Congreso<br />
apruebe el presupuesto de sostenimiento del<br />
Instituto. A este fin proporcionaré todas las informaciones<br />
y datos adquiridos en mis visitas<br />
a los distintos institutos similares que he visitado<br />
por encargo de esta honorable Academia,<br />
en Francia, Alemania, Inglaterra, Bélgica<br />
e Italia”.<br />
La piedra fundamental del nuevo instituto<br />
(Fig. 16) fue colocada el 15 de noviembre<br />
de 1914 (en cumplimiento a lo resuelto<br />
aquel 5 de octubre por la Academia Nacional<br />
de Medicina) en una fracción de terreno,<br />
perteneciente a la Facultad de Agronomía<br />
y Veterinaria, en los barrios Villa del<br />
Parque y Devoto. El área -cedida para tal fin<br />
por una resolución del entonces rector de<br />
la Universidad de Buenos Aires, Dr. Eufemio<br />
Uballes, (Fig. 17) y el decano de la Facultad,<br />
Dr. Schatz- abarcaba una superficie<br />
triangular de 5 hectáreas aproximadamente,<br />
delimitada por las avenidas San Martín,<br />
Tres Cruces (hoy Francisco Beiró) y Nazca<br />
(Fig. 18). Los planos del nuevo instituto<br />
(Fig. 19) fueron trazados por el arquitecto<br />
Gino Aloisi (Fig. 20), quien se inspiró en<br />
el Instituto Nacional del Cáncer de Heidelberg<br />
(Samarithernhaus). •<br />
Revista DM MD - Ciencia y Cultura Médica - Diagnóstico Médico - www.diagnosticomedico.com