Boletines DICEX 2018.

Tendencias en el Comercio Exterior
Boletín No.23 Septiembre 2018
Más que solo una palabra de moda o un concepto de ciencia
ficción, la inteligencia artificial ya tiene una multitud de
aplicaciones para convertir navegadores en compradores.
Cosas como la personalización del usuario, los hábitos de
compra registrados, los anuncios personalizados y la
participación de los clientes pueden impulsar la posibilidad de
compra hacia los minoristas de comercio electrónico, y eso es
solo la punta del iceberg.
El elemento humano es clave en esta ecuación. Los clientes
son los que necesitan estar convencidos de que su decisión de
comprar es la correcta, y los análisis basados ​en la tecnología
ayudan a mejorar la probabilidad de que sus decisiones vayan
en favor del proveedor. Las herramientas de análisis
respaldadas por inteligencia artificial han mejorado mucho en
la creación de perfiles de usuario para cada cliente. Estos
pueden revelar información valiosa sobre cada visitante, de
una edad a otra, a lo que realmente hacen en el sitio web de la
tienda.Esta información puede ser utilizada para influir en otras
partes del negocio, como el diseño de la tienda en línea y las
ofertas especiales, puede ayudar a segmentar a los
compradores y mejorar las apelaciones a las personas.
De vuelta en el mundo real, no virtual y físico, las empresas
también han estado monitoreando a los clientes más de cerca
que nunca. Las soluciones de inteligencia artificial se utilizan
para controlar las expresiones faciales y las reacciones
emocionales a medida que las personas compran. Si bien esto
puede parecer un tipo de esquema de vigilancia indeseable, la
tecnología apunta en gran medida a combatir el hurto en las
tiendas. Sin embargo, también obtiene algunos datos
utilizables para las tiendas, revelando qué áreas de la tienda
atraen la mayor cantidad de visitantes o qué provoca la
reacción más fuerte.
Estos permiten que las empresas conozcan mejor a sus
clientes. Todo se reduce a una mejor gestión de las
relaciones con los clientes: las aplicaciones que optimizan
todo el proceso, desde la persona hasta la compra,
requieren menos mano de obra para lograr mejores
resultados. Los sistemas inteligentes pueden ayudar a las
empresas a administrar su inventario, automatizar la
indexación, categorizar al instante, detectar imágenes de
baja calidad y marcar contenido objetable más rápido que
nunca.
En cambio, las herramientas analíticas se pueden utilizar
para obtener el máximo efecto, lo que hace que la
experiencia del cliente en línea sea lo más fluida posible.
Cuanto más un sitio web pueda atraer las necesidades
individuales, más probable es que un navegador se
convierta en comprador. Esto puede tomar la forma de
cualquier cosa, desde un simple saludo web hasta algo
más elaborado como un chatbot.
Se estima que el 80 por ciento de los compradores realizan
investigaciones en línea, incluso cuando planean comprar
un artículo en la tienda. Por lo tanto, cuando se
comercializan con intención, los minoristas de comercio
electrónico pueden atraer clientes por el beneficio de estar
en línea y junto a la información que el cliente requiere.
En DICEX sabemos que la importancia del uso de la
tecnología y que las oportunidades de mercadeo usando
inteligencia artificial son casi infinitas. Las tasas de
abandono del carrito, la facilidad de navegación del
catálogo y la participación del cliente se pueden mejorar
mediante la implementación de sistemas inteligentes
basados ​en el cliente..
Fuentes: https://www.ecommercetimes.com/story/From-
Browser-to-Buyer-How-Smart-Solutions-Are-Transforming-E-
Commerce-85531.html