Entrelíneas 114

REPORTAJE
IMPACTO EN EL MEDIO AMBIENTE
El aumento en las construcciones urbanas, especialmente
de edificios y condominios no solo
afecta la apariencia y organización de la ciudad.
Un aspecto que tiene gran relevancia en la actualidad
y que también se ve perjudicado por esta
situación es el medio ambiente, especialmente la
flora y fauna, pues las nuevas edificaciones vienen
a reemplazar espacios que antes eran hogar de
plantas y animales.
Francisco De La Barrera, docente de Biogeografía
y Diversidad de la carrera de Geografía en
la Universidad de Concepción, indica que, aunque
existen regulaciones que protegen la biodiversidad,
estas no son perfectas. “En los lugares que
están establecidos para urbanizar, la norma indica
un porcentaje que debe quedar sin construir. Va a
depender de la cantidad de casas, pero no define
en ningún caso el contenido de esa área verde. En
el caso de haber árboles nativos hay regulaciones
sobre cuántos se puede cortar y cómo se deben
replantar, pero en general, se establece que hay
que ponerlos en la misma provincia, ni siquiera en
el mismo predio que se afectó”, sostiene.
Cada vez se levantan más edificios y casas en
sectores como bosques, cerros y áreas verdes.
Rodrigo Sanhueza, profesor de Geografía Urbana
y planificación territorial en la Facultad de Arquitectura,
Urbanismo y Geografía de la Universidad
de Concepción, explica por qué: “Cada vez se
construyen barrios más alejados de los centros de
las ciudades porque dentro del paquete vivienda
se vende el contacto con la naturaleza, entonces
se buscan algunos sectores alejados que tengan
cercanía con espacios naturales”.
El daño medioambiental no es algo lejano que
no vaya a afectar a quienes habitan las nuevas
edificaciones, por el contrario, sus consecuencias
pueden ser inmediatas, como afirma De La Barrera:
“Dependiendo de la dinámica natural del lugar
y lo que había antes de urbanizar, cuando se reemplazan
zonas que tenían vegetación, esa tenía
el rol de captar la lluvia, quitarle velocidad y hacer
que escurra hacia el suelo para poder infiltrarse.
Cuando eso se elimina, el agua cae directo sobre
superficies duras, como techos y cemento, lo que
podría generar inundaciones y derrumbes”.
FALTA DE IDENTIDAD
El hecho de que el Plan Regulador no establezca
límites de altura para las edificaciones, hace
que la ciudad se estructure de manera poco homogénea.
Por lo mismo, las inmobiliarias tienen
completa libertad al momento de decidir el diseño
arquitectónico de dichas estructuras, dejando
a la urbanización con una distribución caótica,
poco definida y que trae consecuencias en las for-
Por el momento, las inmobiliarias siguen construyendo sin límites de altura.
Fotografía: Marcela Santíbañez.
28