Vedanta-Advaita-Sesha-Abril-2015
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el hecho de que toda la información potencialmente cognoscible se
conoce a sí misma ubicua y simultáneamente. El universo, con toda su
gradación de vida y junto con todo aquello que ha sido o será, envuelve
al unísono al perceptor difundiéndolo en lo percibido. La inmensa
realidad conocida no se equipara con ninguna otra condición existente
en el universo. Todo el universo fluye conociéndose a sí mismo sin
que el ātman registre sentido de diferencia temporal o espacial.
Allí el amor, el saber, el ser se conjugan en una expresión nodiferenciada
donde las cosas no se ven nacer ni morir, el sentido de
cambio —que mentalmente solemos registrar— cesa y la vitalidad del
acto de la comprensión y del amor nuclean cada fracción del universo
impidiendo que ella se catalogue independiente de cualquier otra.
El perceptor (el ātman), inmerso en la propia bienaventuranza que
provee el Saber que todo Es, no encuentra fuera de si un universo
independiente de si mismo. Si Mismo es el tiempo, el espacio y la
causa de lo que nace y muere. Si Mismo es viento, sombra, luz y vida.
Jamás el ātman dejo de ser lo que siempre ha sido; comprende que
nunca existió dualidad, que māyā es ilusión y que la realidad siempre
permaneció. Sin embargo, nadie dice: «ahora sí sé, ahora conozco».
Nadie habla, nadie escucha; pero todo sonido, desde el producido en
la galaxia mas lejana hasta el trinar del escondido pájaro de la mañana,
son escuchados por «aquello», por ese insondable oído que esta en
ningún lugar pero se encuentra simultáneamente en todas partes.
ŚLOKA 10
El estado en que (el pensamiento de) ego desaparece y el cuerpo
también deviene inconsciente, es llamado estado de sueño profundo.
El estado en el cual el ego se manifiesta a medias es llamado estado
de sueño. El estado en el que la manifestación del ego es total es
llamado estado de vigilia.
En el estado de sueño profundo (suśuptyavasthā) desaparecen
la manifestación, el ego y la apreciación corporal. En el estado de
sueño con sueños (svapnāvasthā) el ego es a la vez sujeto y objeto