Atención Salseros, Atención Bongoseros: Llegó el Bembé. Música ...
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escenario de una actividad febril, ya que sólo puede seguir existiendo<br />
mediante la continua revitalización de sí misma. Y a causa de esta<br />
imposibilidad de parar su actividad, las r<strong>el</strong>aciones sociales y las<br />
tradiciones de las sociedades precapitalistas se desarticulan y se<br />
disu<strong>el</strong>ven. De aquí que “todos los sólidos se desvanecen en <strong>el</strong> aire,<br />
todo lo sagrado es profanado y <strong>el</strong> hombre en última instancia, es<br />
obligado a enfrentarse con <strong>el</strong> sentido común, sus verdaderas<br />
condiciones de vida, y sus r<strong>el</strong>aciones con su clase.” 13 La desmitificación<br />
de las r<strong>el</strong>aciones sociales resulta, entonces, un aspecto inherente al<br />
desarrollo d<strong>el</strong> capitalismo.” (Thompson, 1998:240)<br />
De allí que la importancia que Thompson le concede al pensamiento marxista,<br />
radica en la consideración de que la anulación de “prejuicios y opiniones”, propios<br />
d<strong>el</strong> “pasado”, causada por una lógica capitalista, “aterriza” a los sujetos y los hace<br />
ver sus condiciones de existencia –tal como son-: de explotación. Esto, argumenta<br />
Thompson “prepara <strong>el</strong> cambio para <strong>el</strong> tipo de transformación ilustrada concebida<br />
por Marx” (Thompson, 1998:241) Así, la erradicación de la tradición como una<br />
yerba mala bajo <strong>el</strong> paso de la modernidad, pareciera una condición sine qua non,<br />
suficiente y necesaria para que <strong>el</strong> verdadero progreso humano sea alcanzado.<br />
Existe entonces, casi que de común acuerdo, una especie de –tesis general d<strong>el</strong><br />
declive- de la tradición. Se tiene por supuesta una disociación entre las<br />
“sociedades tradicionales” y las modernas, concebida en un camino lineal que las<br />
primeras recorren para alcanzar a las últimas. Sin embargo, (aunque sin alejarse<br />
totalmente d<strong>el</strong> mod<strong>el</strong>o d<strong>el</strong> declive) es Giddens quien plantea que la tradición no ha<br />
sido totalmente anulada, sino que ha tenido que reinventarse, y que ésta es<br />
precisamente la única explicación plausible para analizar porqué ciertas formas<br />
concebidas como “tradicionales” persisten en tantas sociedades. En un afortunado<br />
parafraseo de Giddens, Thompson sostiene que:<br />
Las prácticas tradicionales no desaparecen todas a la vez d<strong>el</strong> mundo<br />
moderno sino que su estatus cambia en determinados aspectos. […] En<br />
<strong>el</strong> momento en que las tradiciones son llamadas a defenderse, pierden<br />
su estatus de verdades incuestionables. Sin embargo, puede que<br />
sobrevivan de determinadas maneras, por ejemplo, transformándose en<br />
una nueva forma de fundamentalismo que rechace la ap<strong>el</strong>ación a la<br />
justificación discursiva y trate, contra un entorno de duda generalizada,<br />
de reafirmar <strong>el</strong> inviolable carácter de la tradición. (Thompson, 1998:242)<br />
Aún cuando se revitaliza <strong>el</strong> pap<strong>el</strong> de la tradición, en un intento de explicar (si bien<br />
Marx y Eng<strong>el</strong>s en Thompson. Manifiesto d<strong>el</strong> Partido Comunista, en Obras S<strong>el</strong>ectas<br />
Volumen 1. 1968, Pág. 38<br />
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