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último grado que un hombre puede sufrir. Augusto Barnard muere el 1º de Agosto. El<br />
brick naufraga en la noche del 3 al 4. Arthur Pym y Dirk Peters, refugiados en la caena,<br />
vuelta, se ven reducidos a alimentarte de cyrrhopodes, de los que el casco está cubierto,<br />
en medio de bandadas de tiburones que les espían... Finalmente, llega la goleta Jane de<br />
Liverpool, capitán William Guy, cuando los náufragos no habían derivado menos de 25º<br />
de Norte a Sur.<br />
Evidentemente, no repugna a la razón admitir la realidad de estos hechos, por más que<br />
la tirantez de las situaciones se lleve hasta los últimos límites, lo que no es de extrañar<br />
tratándose de la prestigiosa pluma del poeta americano. Pero, a partir de este momento,<br />
se va a ver si la menor verosimilitud es observada en la sucesión de los incidentes que<br />
siguen. Arthur Pym y Dirk Peters, recogidos a bordo de la goleta inglesa, fueron bien<br />
tratados. Quince días después, recobrados de sus angustias, no se acordaban de ellas:<br />
¡tan proporcionado a la energía del contraste es el poder del olvido! Con alternativas de<br />
bueno y mal tiempo la Jane llegó el 13 de Octubre a la isla del Príncipe Eduardo,<br />
después a las islas Crocet, por camino opuesto al de la Halbrane, y, por último, a las<br />
islas Kerguelen, que once días antes había yo abandonado.<br />
Empleáronse tres semanas en la caza de bueyes marinos, de los que la goleta hizo<br />
buen acopio. Durante está escala, el capitán de la Jane depositó la célebre botella en la<br />
que su homónimo de la Halbrane pretendía haber encontrado una carta donde William<br />
Guy anunciaba su intención de visitar los mares australes,<br />
El 12 de Noviembre la goleta abandonó a las Kerguelen y subió al Oeste hacia Tristán<br />
de Acunha, como nosotros lo hacíamos ahora.<br />
Llegó a la isla quince días después y permaneció en ella una semana, y el 5 de<br />
Diciembre partió para reconocer las Auroras por 53º 15’ de latitud Sur y 49º 38’ de<br />
longitud Oeste, islas imposibles de encontrar.<br />
El 12 de Diciembre la Jane se dirigió al polo antártico. El 26 son vistos los primeros<br />
ice-bergs, más allá del grado 73, y se reconoce el banco de hielo. Del 10 de Enero de<br />
1828 al 14 del mismo, evoluciones difíciles, paso del círculo polar en medio de los<br />
hielos y navegación por la superficie de una mar libre; la famosa mar libre descubierta<br />
por 81º 21’ de latitud Sur y 42º de longitud Oeste; siendo la temperatura de 47º<br />
Fahrenheit (8º 33 c. sobre 0) y la del agua 34º (1º11c. sobre 0).<br />
Se convendrá en que Edgard Poe está aquí en plena fantasía. Nunca navegante alguno<br />
había llegado a tales latitudes, ni aun el capitán James Weddell, de la marina británica,<br />
que no pasó del 74 paralelo en 1822.<br />
Pero si esto es inadmisible, ¡cuánto mas los incidentes que siguen! Incidentes que<br />
Arthur Pym, o sea Edgard Poe, refiere con inocente inconsciencia.<br />
¡Verdaderamente él no dudaba de elevarse hasta el polo!<br />
En primer lugar, no se ve un solo ice-bergs sobre aquel mar fantástico. Innumerables<br />
bandadas de pájaros vuelan por la superficie, entre ellos un pelícano, que es muerto de<br />
un tiro. Sobre un bloque de hielo (¿los había, pues, aun?) venía un oso de la especie<br />
ártica y de dimensiones ultragigantescas. Al fin la tierra es señalada a estribor. Se trata<br />
de una isla de una legua de circunferencia, a la que se da el nombre de isla Bennet en<br />
honor al socio del capitán en la propiedad de la Jane.<br />
Este islote está situado en los 82º 50’de latitud Sur y 43º 20’ de longitud Oeste, según<br />
dice Arthur Pym en su diario; pero desafío a los hidrógrafos a formar un mapa de los<br />
pasajes antárticos sobre tan fantásticos datos.<br />
Naturalmente, a medida que la goleta ganaba el Sur, la variación de la brújula<br />
disminuía, mientras que la temperatura del aire y del agua se dulcificaba, con un cielo<br />
siempre claro y una brisa constante de algunos puntos del Norte.