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joan buades crespí separados de aquellos seres que constituyen su dulce encanto y su más vehemente amor) están hoy pesarosos de haber tomado una resolución tan extrema. ¡Ah! No podemos recordarlo sin que rueden por nuestras mejillas lágrimas de acerbo dolor! Aquella multitud de compatriotas que se ausentaron y a quienes casi toda Palma salía a despedir y a presenciar su embarque, ¿quién sabe las penalidades, que habrá sufrido a causa de la miseria, del hambre y de la desnudez en que se han visto? Y ¿quién sabe si a consecuencia de tan crueles calamidades habrán ya sucumbido muchos de aquellos infelices? Son muy fundados sin duda los presentimientos que concebimos ante las tristes noticias que a menudo dirigen a sus familias aquellos emigrados, y que desgraciadamente vienen a confirmar los fragmentos de las dos cartas que hemos copiado No es nuestro intento hacer revivir en los corazones de las familias los lúgubres recuerdos de las desconsoladoras escenas de aquella penosa despedida; pero sí hacer desistir a los que, acaso alucinados por halagadoras promesas y por el brillo del falso oro y el de un brillante porvenir, tratan de emprender un viaje largo y a un punto donde el trabajador padece tantos sinsabores envueltos con el colmo de todas las penalidades e infortunios inherentes a la expatriación y al desengaño. EL ÁNCORA, 28 DESEMBRE 1889 Con especial gusto publicamos el siguiente escrito, aunque es seguro que su lectura causará honda pena a todas las personas que deploran, como nosotros, las desagradables peripecias que han sufrido muchos de nuestros compatriotas que emigraron a Chile. Dice así: 100 Señor Director de El Áncora. Remito a U los siguientes “acapites” de cartas que han escrito dos hermanos mallorquines que hace algunos años se encuentran en Chile, por si los juzga dignos de que aparezcan en su acreditado periódico para enseñanza de todos los que sueñan en riquezas.- Un suscritor. El primero de estos “acapites” es de fecha de 31 de octubre último, y pinta de una manera sencilla, pero clara, todas las peripecias que nuestros compatriotas experimentaron en su viaje . Dice así: “La cuestión palpitante entre nosotros es la de los emigrantes mallorquines. No hay día que no se presenten algunos de los que se quedaron en Talca, y todos reniegan y blasfeman contra el gobierno y sus agentes. A. C. (Antonio Crispi) vive en esta nuestra casa. Todavía no ha podido encontrar colocación, y así muchos otros. Hoy llegó un barbero con su mujer y dice que en Talca, en una peluquería le habían ofrecido cinco pesos semanales, lo que no le bas- 1889: L’allau emigratòria de mallorquins a l’argentina i xile taba para comer. A. D. (Alfredo Dubaes) y otros zapateros tienen trabajo: ganan de dos pesos a dos pesos y medio. Paso a darle cuenta de las noticias que he podido conseguir sobre el viaje de los mallorquines desde Palma a Chile, para que te formes idea de los sufrimientos que estos infelices que, engañados por las promesas que les hacian los agentes del diablo, se han atrevido a atravesar el océano en busca de un brillante cielo, cuando solo han descubierto un cielo cubierto de negros nubarrones y de miseria. Desde Palma a Barcelona ya sabrás mejor que yo lo que les pasó y, tambien que se embarcaron gran número de catalanes, franceses, rusos, italianos i tutti cuanti a más de los que se embarcaron en Valencia, Alicante, Málaga, pero lo que no se si sabias es la clase de gente que se embarcó y que fue la canalla más grande. Allí había ladrones, desertores y hasta rameras. Considera que algazara se formaría. Desde Barcelona a Málaga pasaron algo bien porque no había tanta gente y la comida era buena y se divirtieron cantando; pero en Málaga se pelearon los dos cocineros, uno frances y el otro italiano, y el resultado fue que se despidió al frances que era el mejor. Desde entonces la comida fue mala y al repartirse había peleas y hasta puñaladas. Desde Málaga hasta Cabo Verde puede decirse que la comida fue de peor condición, y enfermaron varios y de hambre murieron cinco. Había algunos que contaban con ahorros provenientes de la venta de sus muebles, y los gastaron todo. En Cabo Verde, desembarcaron varios, prefiriendo pedir limosna antes que morirse de hambre. De Cabo Verde a Punta Arenas demoraron treinta días, y hubo dos grandes peleas: una entre italianos y andaluces, en que salieron a relucir los puñales resultando varios heridos; otra entre franceses y mallorquines, en la que sacaron revólveres, pistolas y manoplas, llegando a tal extremo, que el capitán amenazó con hacer volar el buque. Siempre había marineros fusil en mano haciendo la guardia. En todo el camino se mataron cinco bueyes de catorce que llevaban. Y ¿qué son cinco bueyes para mil setecientas personas?. Con las tripas hacían caldo para los enfermos. Llegados a mitad del estrecho (Magallanes) tuvieron un gran temporal. Al fin llegando al puerto de Talcahuano, desembarcaron en la mayor confusión, y resultó que en una familia el marido se hallaba por un lado, la mujer por otro y los hijos por otro. Los equipajes llegaron mal y muchos perdieron casi toda su ropa”. El otro “acapite” de fecha 1 de noviembre a más de confirmar lo anterior, dice entre otras cosas: “La tal emigración no tiene razón de ser, porque Chile no tiene terrenos que dar, ni industria que fomentar, en lo que se habla de un meeting que la clase obrera quiere celebrar contra la emigración de extranjeros, y de una petición dirigida al ministro plenipotenciario de la 101
joan buades crespí Argentina para que patrocine la emigración de chilenos a dicho país, por no tener en el suyo trabajo. Despues habla de los jornales, y dice que un peón solo gana de treinta a cuarenta centavos, y un artesano de 1 peso a 1’80, y que los comestibles son carísimos, y lo que se gana no basta para comer, y mucho menos para vestir. Y concluye aconsejando a todos que no emigren, porque el país está muy mal”. Renunciamos a hacer ninguna clase de comentarios, porque los hechos que se relatan, revisten un carácter demasiado exasperante y desconsolador y por lo mismo no queremos hacer resaltar con negros colores el fondo de unos cuadros tan sombrios, que deben llenar de amargura los corazones de las familias de aquellos que fueron engañados con promesas de un porvenir halagüeño, merced a las incalculables riquezas que les ofrecieron los emisarios de aquella República. 102 FONTS 1. FFoonnttss nnoo iimmpprreesseess 1889: L’allau emigratòria de mallorquins a l’argentina i xile Actes de les sessions del Consistori municipal de Pollença (1888-1889). Arxiu Municipal de Pollença. Correspondència municipal de l’Ajuntament de Pollença (1888-1889). Arxiu Municipal de Pollença. Movimiento de buques y pasajeros (1889), sèrie Estadística. Arxiu del Regne de Mallorca. 2. FFoonnttss iimmpprreesseess AGUILÓ “SERENA”, Juan: Sen van: Impremta de J. Colomar. Palma, 1889. Bonas-Ayres lo qu’es es seu govern y relació de sa protecció que poren trobá els emigrants que pasan abaix de sa bandera de sa República Argentina. Impremta de Juan Colomar. Palma, 1889. BORRÀS, M.: Els emigrants de Pollensa y Manacó o siga relació dés motius que tenen els habitants d’aquets pobles per anar a viura a sa República Argentina. Palma, 1889. BORRÀS, M.: Decimas glosadas referent en els emigrants mallorquins. Impremta de J. Colomar. Palma, 1889. Dictamen sobre las causas y origen de la inmigración en las provincias de Baleares y Canarias, redactado por el Exc. Sr. Nicolás Díaz y Pérez. Ministerio de Fomento, Dirección General de Agricultura, Industria y Comercio. Imprenta de M. Romero. Madrid, 1882. 3. PPuubblliiccaacciioonnss ppeerriiòòddiiqquueess La Almudaina El Áncora El Centinela Diario de Barcelona El Diario de Palma El Felanigense El Isleño Las Instituciones El Manacorense Puntos y Comas El Republicano La Roqueta 103
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