Amor de Viejo. - Bicentenario
Amor de Viejo. - Bicentenario
Amor de Viejo. - Bicentenario
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
ci campo libre, echo una ojeada por la sala y algo adivinó<br />
<strong>de</strong> lo que habIa sucedido.<br />
Dorotea estaba no solo preocupada, sino que tenla<br />
a<strong>de</strong>más los ojos liorosos; don Facundo no se encontraba<br />
ya en su puesto, que era raro abandonara los domingos,<br />
las flores <strong>de</strong>l jarrón estaban <strong>de</strong>spedazadas... todo concurrIa<br />
a creer en un acontecimiento.<br />
Doña Nicanora, queriendo abordar <strong>de</strong> una vez la cuestiOn,<br />
preguntO con lianeza:<br />
—(,Por qué se fue tan pronto don Facundo?<br />
—Qué sé yo, contestO la joven con un tono bastante<br />
<strong>de</strong>sabrijlo.<br />
—Yo no me tardé nada, y pensé encontrarle todavIa.<br />
—Ello es que valia más que nunca hubiera venido.<br />
—COmo! (,has tenido con éi algñn disgusto?<br />
—No, pero es tan fastidioso, tan chocante.<br />
—.Hija, no se trata asI a los buenos amigos.<br />
—En fin, mama, te lo dire <strong>de</strong> una vez porque yo no<br />
puedo aguantar esta plidora...<br />
—Vamos a ver: qué ha sucedido?<br />
—Que ci tal don Facundo ha tenido la <strong>de</strong>sfachatez,<br />
ci atrevimiento, <strong>de</strong> darme su retrato que para nada necesito.<br />
—