14.05.2013 Views

HISTORIA DE LA CONQUISTA Y POBLACIÓN DE ... - Venciclopedia

HISTORIA DE LA CONQUISTA Y POBLACIÓN DE ... - Venciclopedia

HISTORIA DE LA CONQUISTA Y POBLACIÓN DE ... - Venciclopedia

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

sus pobres alhajas, pasaron sin recato, ni temor a la obscenidad de aprovecharse<br />

de sus hijas y mujeres, con tan poco miramiento, que no rehusaban<br />

ejecutar operaciones tan feas, aunque fuese a la vista de los mismos ofendidos;<br />

y como no hay paciencia a quien no irrite la sinrazón de un agravio, no<br />

pudiendo sufrir los indios los que experimentaban repetidos, trocando la<br />

mansedumbre de su natural pacífico en un furor más que bárbaro, tomaron<br />

las armas una tarde para buscar venganza a sus ofensas y mataron cuantos<br />

españoles pudieron encontrar divertidos en los entretenimientos de su lascivia<br />

escandalosa: pasando luego con numerosas tropas, que tenían prevenidas<br />

de toda la provincia, a poner estrecho cerco a la ciudad (que había<br />

dejado Paredes ceñida con un fuerte palenque de maderos), reduciendo<br />

a sus vecinos a tan conocido aprieto, que si no acudiera a socorrerlos con<br />

alguna gente de refresco el mismo Don Diego García de Paredes (a quien<br />

habían avisado desde el principio de esta revolución) sin duda consiguieran<br />

los indios el intento de que no quedase español vivo; pero desbaratados los<br />

bárbaros con su llegada, aunque se vieron obligados a levantar el sitio, no<br />

fue bastante el descalabro que tuvieron en sus tropas para que perdiesen<br />

el coraje, ni disminuyese el rencor que habían cobrado contra la sinrazón<br />

española, pues reforzados de nuevos escuadrones, sin que les acobardase<br />

el temor de los muchos que morían, volvieron a repetir los asaltos con tan<br />

porfiada obstinación, que hallándose ya Paredes con diez infantes menos<br />

y otros muchos heridos, tuvo por imposible poderse mantener contra la<br />

fuerza de una inocencia ofendida; y más cuando procurando reducirlos a<br />

concordia, con olvido de lo pasado, no proponía medio para la paz, que no<br />

fuese en los indios nuevo incentivo para continuar la guerra: y así, dejando<br />

la pacificación de aquella provincia para otra ocasión más oportuna, valiéndose<br />

del silencio de la noche y de la traza de dejar muchas lumbres encendidas<br />

y algunos perros amarrados, para que oyéndolos ladrar no conociesen<br />

los indios la retirada, desamparó la ciudad, con gran porción de ganados,<br />

que habían introducido los españoles, así para su sustento, como para el<br />

multiplico; y cogiendo la marcha a paso largo, sin que lo sintiesen los indios,<br />

se volvió para el Tocuyo ya en días del año de cincuenta y siete lxi .<br />

BIBLIOTECA AYACUCHO<br />

169

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!