Documents 24 - Fundació Carles Pi i Sunyer

DOCUMENTS PI I SUNYER
LA MEDIACIÓN, UNA HERRAMIENTA ÚTIL
EN LA JUSTICIA PENAL
Charo Soler Roque
Mediadora en el ámbito penal
La mediación, como saben Uds., es un proceso a través del cual las partes que están enfrentadas en un
conflicto, con la ayuda de un mediador, deciden voluntariamente buscar una solución al conflicto que les
enfrenta.
Para conseguir este objetivo, el mediador estructura su trabajo y, apoyándose en su modelo, en las
técnicas que conoce y domina y en su habilidad como profesional, facilita la comunicación entre las
partes con el objetivo de llegar a un acuerdo.
En este proceso será básico:
• El rol del mediador, el cual procurará no predisponerse a favor de ninguna de las partes;
• Un trabajo conjunto con las dos partes desde el inicio;
• Una estructura en las intervenciones tal como marca el método;
• Voluntariedad de las partes;
• Acuerdos de índole privado.
En la Justicia penal, normalmente, las leyes no hablan de mediación; todo lo más, aparecen textos que
hacen referencia a la conciliación o a la reparación a la víctima, sin que en ninguno de ellos se especifique
cómo se tiene que hacer.
La reparación a la víctima en su sentido más amplio es lo que permite que una de las formas en las que
se pueda llevar a cabo esa reparación sea a través de una mediación en la que las partes, directamente,
con la ayuda de un mediador, decidan cómo quieren reparar y ser reparadas.
La mediación en el ámbito penal es un proceso a través del cual víctima y autor del delito, con la ayuda
de un tercero que no toma partido por ninguno de ellos, se implican en la búsqueda de soluciones en el
conflicto que les enfrenta como consecuencia del hecho delictivo, devolviendo el protagonismo a las
partes para que sean ellas las que decidan la forma en que quieren reparar y ser reparadas. Este proceso
tendrá consecuencias en el ámbito penal. Supone, para el autor del delito, la posibilidad de afrontar de
forma constructiva y positiva las consecuencias de su actuación, haciendo o diciendo algo a favor de la
víctima. Para la víctima implica la posibilidad de participar en un proceso donde pueda aportar su visión
del problema y sus propias soluciones.
Hablar de mediación en el ámbito penal suscita muchas dudas e interrogantes: para los defensores de la
mediación, porque dicen que la metodología utilizada no es la propia de la mediación; para los juristas
más puristas, porque no ofrece garantías procesales y porque ven en ella el peligro de volver hacia una
etapa ya superada de Derecho privado, donde, sin el control del estado, la solución de unos conflictos
jurídicos depende de los intereses de unas partes que no siempre están en igualdad de condiciones.
La experiencia en menores durante diez años y el intento que se pretende llevar a cabo en adultos,
aportan datos diferentes.
La mediación en el ámbito penal es posible, pero evidentemente tenemos que saber que las características
del contexto condicionan la intervención. Por lo tanto, hemos de tener en cuenta los siguientes
aspectos:
• Las partes vienen configuradas por el Derecho penal, el cual nos dice quién es el autor y quién la
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